Para poner fin a la jornada, la última ponencia reunió a Yashiro Kimura (Rising Star Games), José Manuael Iñiquez (Akaoni Studios) y Fabian Akker (Ronimo Games), quienes centraron el debate en la importancia de tener el concepto de juego completo desde el principio y mantenerlo prácticamente intacto hasta el final del mismo. Ambos abrieron sus intervenciones hablando de la creatividad de sus juegos. Fabian nos contaba que se sentían orgullosos de la IA de su juego, Swords & Soldiers; José Manuel ponía de manifiesto el requisito de que su título, Zombie Panic in Wonderland) tuviera un aspecto muy enfocado al Manga, mientras que Yashiro justificaba la creatividad de Little King’s Story en el planteamiento jugable del mismo: siete reyes con filosofía distinta, lo que da mucha diversidad al juego.
Para Yashiro, la figura del director creativo es fundamental. Para él es imposible dividir las fases que ocupan el diseño creativo, por ello es importante plasmar todo el contenido: tipo de música, historia, vídeos o jugabilidad desde el principio y a partir de ahí evolucionar cada aspecto hasta el producto final. José Manuel destaca que es importante hacer un estudio previo del mercado, ver qué demanda el público y desde ese punto buscar ideas originales para el desarrollo. Además confirma las palabras de Yashiro, con la necesidad total de documentar todos los aspectos del juego desde un principio para que todo el equipo de desarrollo tenga siempre presente la meta a la que llegar.
Por otro lado, los ponentes coincidieron que una persona dentro del proyecto no debería tener más de un puesto dentro del mismo, es decir un productor no debería ser al mismo tiempo director creativo pues son dos puestos que enriquecerían más al proyecto si son dos personas distintas quienes las ocupan.