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El juego de tus sueños #4: Pokémon Zero

El juego de tus sueños #4: Pokémon Zero

Inicio el relevo de mis compañeros con sus Splatoon, sus juegos de carta y su X con una sentencia: Los gráficos no lo son todo en esta vida, (y eso cualquiera con dos de frente te lo confirmará), lo que duele es cuando algo o alguien tiene potencial y no lo exprime. A mi me da igual que el render del árbol de Wartile se vea como se ve, es un resultado excelente, sobre todo teniendo en cuenta el estudio que hay detrás. ¿Pero opino igual de aquel fatídico árbol de Espada/Escudo? ¿Acaso es justo comparar el presupuesto de Deck13 y Playwood Projects con la marca que gana más de miles de millones de dólares? La respuesta es un rotundo no. Pero como es fácil acomodarse y dejar que entren los billetes, lo único que puedo hacer ahora, es tumbarme, dormirme y soñar.

Sangre nueva entra en el equipo de Pokémon Company y por lo que sea, decide que es hora de explorar nuevos desafíos con la saga de videojuegos. Un enfoque nuevo y que se adapte a un publico más adulto. Un punto de partida para fanes veteranos, gente desencantada con la saga y por que no, nuevos jugadores que jamás pensaron en Pokémon como una opción para ello.  Pokémon Zero (nada que ver con el antagonista de la película de Giratina, eh).

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Un juego de mundo semi-abierto pero vivo (no necesitaríamos un Azertoh) donde la trama fuera más adulta. No digo oscura, que es justamente el extremo opuesto al que solemos ir fácilmente la gente. “Un detective que investigue al malvado Team Rocket que de verdad maltraten a los Pokémon en combates violentos que…” Woah woah, relax. En Pokémon Zero se podría hablar de las preocupaciones de los ya no son tan niños pero crecieron con el juego. La historia podría tratar de un/una protagonista que ve como su vida actual no es lo que esperaba comparado a cuando era un niño. Ser campeón de la liga pokémon es idílico y la responsabilidad real es llegar a fin de mes entre tanta factura y responsabilidades. Sin embargo, un día ocurre algo que le hace “click” dentro de él/ella. Nada de encuentros mágicos con un Pokémon singular porque “oh, eres especial”. El arco principal seguiría siendo un mensaje positivo, como “siempre hay espacio para el conocimiento propio como ser humano de una sociedad de la que sientes apartado y atrapado”. Que encontrara en su compañero Pokémon (pues sería 1 principal siempre fijo y otros cuantos como mucho, nada de llenar cajas y cajas) una razón igual de validad como cualquier otra para dar sentido a una vida que de por sí, no siempre la tiene, pero eh, eso es la vida: Dura e implacable, pero no por ello digna de disfrutarse. Un camino íntimo entre jugador y juego.

¿Eh? ¿Qué es eso? Oh cierto, el despertador…