[Análisis] Warhammer 40.000: Mechanicus para Nintendo Switch

Kasedo Games, Kalypso y Games Workshop se dan la mano para crear y traernos un título de estrategia por turnos basado en el inmenso lore del universo Warhammer 40.000. Para ser más concretos, en el ejército más tecnológicamente avanzado de todo el Imperio de la Humanidad, el Adeptus Mechanicus.Es hora de destrozar unos cuantos necrones herejes, ¡por Omnissiah!

Un poquito de background

El 41º milenio es una época oscura y guerras… Así ha sido desde sus orígenes para el “Imperio de la Humanidad”, el mayor imperio estelar que se expande desde Terra hasta los alrededores de la “Franja Este” y las “Estrellas del Halo”. Aunque sus creencias teológica-ortodoxa se basan en el Dios-Emperador, la supremacía de la humanidad de debe en gran medida al “Adeptus Mechanicus”. Estos reconocen al Emperador como líder del Imperio, pero no la realidad religiosa, pues ellos adoran a “Omnissiah” o “Dios Máquina” (más aún después de la muerte del Emperador, pero eso no viene al caso). El quid reside en que esta gente cree que la carne es débil y es por eso que sus “Tecnosacerdotes” y sus fieles en general se modifican con máquinas que potencien sus cualidades.

Historia

Comandamos la Caestus Metalican, una imponente nave de guerra de los Adeptus Mechanicus que explora los oscuros mundos en busca de conocimiento para la humanidad. Es entonces cuando descubren el planeta “Silva Tenebris”, un gigante el cual explorar en busca de tecnología para la humanidad pero que resulta estar lleno de tumbas necronas. Desde la seguridad de la nave nos encargaremos de darle las órdenes pertinentes a nuestra cohorte de “tecnosacerdotes” y fieles (estos no son más que la carne de cañón, aunque se les pueden mejorar las estadísticas). Por estos pasillos que nos llevan de una habitación a otra, nuestra presencia irá alertando a los enemigos locales los cuales irá complicando las cosas, tanto en los enfrentamientos que tengamos, como con el contador global que es el que precipita el final de la historia. En las salas podremos encontrar glifos que deberemos averiguar por nuestra cuenta si son beneficiosos o no y eventos en los cuales tomar una decisión. La cuál afectará de una manera u otra, pero generalmente, de manera negativa. La historia está escrita por el talentoso y experimentado escritor grimdark Ben Counter, responsable de un gran número de novelas de Games Workshop. La trama nos invita a conocer mejor a los altos cargos de la Caestus y sus maneras de pensar tan dispares entre los demás a veces. Todo ello aderezado con una excelente banda sonora y efectos de sonido que potencia la sensación de distanciamiento y tenebrosidad del ambiente.

Como detener a los xenos

El juego se divide en 3 fases principales: planificación de las tropas y los cánticos (mejoras de un uso por misión que podemos desbloquear completando logros) en la nave nodriza, la exploración de las tumbas donde tomar decisiones importantes de cara a la supervivencia y precipitación del final del juego; y por último, los combates contra los necrones. Que, aunque no hay demasiada variedad de los mismos, nunca hay que infravalorarlos. Pero nada a lo que no puedan enfrentarse los fidedignos “tecnosacerdotes”. Cuando más sobresalen en combate estos, es cuando usan su equipación, que requiere de unos puntos de conocimiento que se consiguen de distintas maneras. Sin ellos, la batalla estará perdida. Por ello es importante localizar las fuentes de estos puntos en el mapa, intentar dominarlos y gestionarlos. Pues se usan para el equipo como ya se ha dicho, como para invocar la carne de cañon esa llamada “fieles aliados”. Estos se pueden invocar en las inmediaciones de cualquier “tecnosacerdote” al comienzo de los turnos. Este modo de invocar aliados y gestión de los recursos, convierte Warhammer 40.000 Mechanicus en un título muy interesante de jugar.

Mis conclusiones

LO FEO: Se echa en falta una opción que acelere el tiempo entre turnos, esta carencia puede causar que el jugador se sature antes del título. / El control de la cámara deja que desear, no solo en la elección de casillas como tal, también los zooms en combate que se van lejos de la acción o el zoom manual que desenfoca lo que quieres ver. / La cámara de despliegue es cuanto menos, inútil. Los colores que utiliza y el ángulo hace que sea más práctico desplegar las unidades como sea y luego reiniciar. / La navegación y el formato del libro de arte es un desastre por desgracia. Ni pantalla completa, ni poder ir a una página específica, ni están habilitadas las capturas de pantalla en ese momento. / Pequeñas bajadas de frames.

LO RARO: ¿Qué necesidad hay de medir el rango de los equipos en medios metros (1,5m; 2,5m; 3m…) si el juego va por casillas? Hubiera sido más fácil establecer 1m = 1 casilla, evitaría confusiones. / El rango y daño de los enemigos nunca se tiene claro, entiendo que es para usar los rastreadores y que el jugador aprenda cómo es cada enemigo. Pero llega un momento que puedes llevar 25 misiones (de más de 50 que hay) y aún no sepas seguro si ese enemigo te va a disparar o no desde donde está. / El port viene directo de PC y se nota en los cuadros informativos de equipos o misiones que suelen tapar otros elementos que deberían verse también o directamente habla de clicks de ratón.

LO BUENO: Las numerosas mejoras y personalizaciones que pueden equiparse los “tecnosacerdotes”. / Una curva de dificultad agradable o un desafío infernal si lo prefieres. / Personalización de los ajustes del juego. / Distintos finales / Una ambientación gráfica y sonora muy conseguida. / Incluye los DLC Heretek, dos armas exclusivas, la banda sonora y el libro de arte / Una maravilla para aquellos que buscan un juego de estrategia distinto y en especial para los fans de Warhammer 40K.

Tenéis disponible el juego en formato físico y en la eShop de Nintendo Switch por 39,99€. El tamaño de su descarga es de 4507 MB. Versión analizada 1.4.0.