[Análisis] ‘Zombie Slayer Diox’ (eShop)

UFO Interactive Games, la compañía californiana que nos ofreció Samurai Sword Destiny para eShop y que tuvimos la oportunidad de analizar, ha engrosado su cátalogo para la plataforma de descarga digital de Nintendo 3DS con 4 juegos desde entonces. Se tratan de  Johnny Kung Fu, Samurai G, Balloon Pop Remix y Zombie Slayer Diox, convirtiéndose así en la compañía que más juegos ha aportado al catálogo de software descargable desarrollado para 3DS. Hemos tenido la oportunidad de analizar Zombie Slayer Diox, el primer juego de género musical que llega al todavía escaso, pero cada semana más grande, catálogo de juegos exclusivos de eShop. Echadle un ojo al tráiler antes de continuar leyendo.

Desenvaina la espada y desenfunda tu guitarra ¡los zombis te esperan! Otra vez…

La historia y la ambientación es bien sencilla, nuestro protagonista, el rockero Diox se dedicará a acabar con la plaga de muertos vivientes que se cierne sobre la ciudad, a golpe de espada y sonido de guitarra eléctrica. El juego se aprovecha de la actual moda de los zombis en los videojuegos generada por títulos como Plants VS Zombies para intentar hacer un juego medianamente atractivo para el publico más joven. Sin embargo, el mercado ya empieza a estar sobrecargado y si bien es cierto que no se han visto juegos de zombis con esta temática, este título se antoja innecesario y previsible, llegando incluso a lo cutre. Si ya la ambientación del juego, con grandes dosis de “fanservice occidental” como nos tiene acostumbrados UFO en sus juegos para 3DS, viene a ser poco original y facilona, la ejecución en este juego en específico no ayuda nada a la hora de calificarlo positivamente  y es que el recurrido tema zombis es un arma de doble filo. Puede salirte un juego interesante como Dead pixels o algo mediocre, como Zombie Slayer Diox.

UFO no defrauda en la estética.

Si hay algo que se puede resaltar de la compañía californiana  UFO Interactive Games es que realiza unos juegos estéticamente muy bien cuidados en relación a sus recursos. Si bien sus títulos en 3D, aunque emanan bastante trabajo, no brillan en este aspecto, lo cierto es que el 2D lo manejan bastante bien, siempre con títulos con un diseño artístico destacable a la hora de analizar. El guitarrista Diox, protagonista del juego, salvo por el resto de factores que rodean el juego, se podría decir que es hasta carismático y los distintos escenarios en los que transcurre el juego, los cuales son distintos barrios de una ciudad, no tienen nada de reprochable; un diseño desenfadado y colorido siguiendo esa línea de dibujo animado visto tanto en Plants vs Zombies  como en muchos de los juegos del catálogo de DSiWare. Y es que el que piensa en comprar un juego de este estilo, no busca un diseño artístico al estilo Toriyama, sino algo sencillo y dentro de la simplicidad que esta estética pueda aparentar, lo cierto es que cumple. No se trata de un trabajo brillante, original (nada original, de hecho) ni transgresor, pero al menos es un aspecto que no defrauda y que se debe valorar positivamente, algo que haré poco a lo largo de este análisis.

Un título musical cuya banda sonora es un “Meh”.

Pese a lo tremendamente coloquial y hasta algo vulgar que pueda parecer la expresión, el hecho es que, en mi opinión  es la palabra que mejor describe el apartado sonoro de este título, recordemos perteneciente al genero musical. Un buah como una catedral que poco más y me indigna. Muchos juegos, para bien o para mal tienen aspectos que no dejan indiferente a nadie ya sea por ser considerados como uno de los puntos fuertes del juego o por ser tan rematadamente malos que es inevitable hacer notar tu indignación ante el asunto. Bien, pues el problema de este juego es la total indiferencia que transmite la banda sonora. Como era de esperar, una lista de canciones de estilo rock, creadas específicamente para el juego como punto a favor pero que se configuran repetitivas, escasas y sin personalidad con un total de 12 pistas que se pueden descargar de manera gratuita desde la pagina oficial de la compañía.

Perded vuestro tiempo escuchándolas y coincidiréis en que no tienen nada de especial, algo que parece inaceptable en un juego de este género, es necesario decir, vale, que las pistas no están mal. No se pueden calificar de forma negativa porque seria una canallada, pero el foco de este asunto está en que este apartado debería ser el principal incentivo para adquirir este juego. Debería suscitar comentarios de tipo “merece la pena solo por las canciones” y no un mediocre “bueno, no está mal” o como yo resumiría en una palabra: “Meh”.

Con zombis y rock ¿Quién quiere jugabilidad?

Normalmente este apartado debería ser central, pero lo cierto es que no hay mucho que comentar aparte de la definición de los controles y el objetivo del juego . Y es que bajo la premisa que expresa el título de este apartado del análisis, ha sido con la que los chicos de UFO han desarrollado este juego, o al menos, es a lo que apunta.

Como ya intuiréis, la jugabilidad de este juego es pésima y es que, cuando los controles se basan en la pantalla táctil y el dispositivo en cuestión no responde como debería la experiencia jugable, cae a lo mas profundo de la letrina mas asquerosa de un campamento militar. En resumidas cuentas, los controles son seis simples movimientos: deslizar el stylus hacia la derecha, izquierda, arriba, abajo y las dos diagonales combinándolo si se precisa con las flechas de la  cruceta perteneciente cada una a un color (azul, rojo, amarillo y verde). Dicho esto, el objetivo del juego es el siguiente: Diox avanzará por el escenario y tendrá que matar a la todos los zombis que le sea posible, para ello habrá que ejecutar el movimiento que se ilustra encima de la cabeza de cada zombi. Si el símbolo es de un determinado color, entonces habrá que usar también la cruceta a la vez que se realiza el movimiento con el stylus. Cuantos más zombis seguidos mates, mayor será el multiplicador que bonifique la puntuación. Sin embargo, si se te escapa un zombi, perderás el multiplicador y te quitará salud. Para ganar deberás reunir una cantidad especifica de puntos en cada escenario, perderás si al acabar la canción no llegas a la puntuación requerida o si tu barra de salud queda vacía.

Se puede decir que es un Guitar Hero versión hack and slash. En este punto hay que reconocer que el método esta bien pensado y resulta atractivo, pero la ejecución tira por la borda todo el trabajo anterior. La pantalla táctil no responde, al hacer un movimiento hacia la derecha se interpreta como si se hubiese hecho una diagonal y así en 36 frustrantes combinaciones posibles en las que en un movimiento, el juego interpreta otro. No hay nada más que contar; para jugar bien  a este juego tienes que ejecutar el movimiento del stylus al milímetro aunque tampoco se garantiza que lo vaya a reconocer. Si alguno creyera que puede ser debido a una mala calibración de la pantalla táctil de la consola, basta con  buscar un poco por la red para encontrar muchas más quejas como la presente respecto a este juego.

¿Por qué lo llaman diversión cuando quieren decir frustración?

Como siempre insistimos en nuestros análisis, lo importante de un juego es la jugabilidad y la diversión. Bien, pues este es otro de los puntos flacos del juego, ya que aunque no se puede decir que no divierta, esta diversión resulta de lo mas efímera.  Es una realidad que la ambientación del juego es de lo mas jocosa y es inevitable esbozar alguna que otra sonrisa, pero lo cierto es que esa diversión potencial se queda en nada cuando el pésimo reconocimiento de la pantalla táctil te empieza a frustrar de manera inevitable. Entonces pasas de divertirte a desesperarte y la verdad es que cuesta bastante querer seguir jugando. No me cuesta reconocer que me ha costado bastante pasarme todos los escenarios porque simplemente resulta un juego inapetente, poco divertido y que solo hace echar pestes.

Otros detalles a tener en cuenta

La duración es uno de los factores importantes que faltan por analizar. El juego en sí, como la gran mayoría del catalogo de eShop y DSiWare, tiene una duración mas bien corta; está destinado ser jugado esporádicamente en cortos intervalos de tiempo. No merece la pena decir algo malo sobre este punto: si el juego reaccionase bien, la duración del juego la pondría uno mismo, ya que podría ser bastante rejugable.

En cuanto a la dificultad, es necesario decir que esta muy bien configurada, empezaremos en modo fácil y luego se dará la opción de jugar en modo normal o difícil, según vayamos avanzando por los escenarios, sin contar con el hecho del mal control de la pantalla táctil, se ha de reconocer que el modo fácil es asequible, el modo normal tiene su dificultad y el modo difícil es endiabladamente complicado.

Por último, el 3D estereoscópico. Fuera de los debates sobre si el 3D aporta o no a la jugabilidad y a una nueva experiencia de juego, el hecho es que en este título es totalmente anecdótico. No gastes batería activando el 3D con este juego. Es el típico 3D de post-producción por capas, en este caso muy mal hecho y que no hace nada más que molestar.

Algunos extras que se agradecen.

Después de tanta negatividad se ha de reconocer que el contenido, etiquetémoslo como extra, se agradece bastante aunque no salva el hecho de lo nefasto del juego. Las tablas de puntuaciones ayudan a que un juego sea rejugable. Si algún suicida quisiera volver a jugar a este juego, superar sus propios récords y los de los demás, siempre es un buen incentivo para seguir jugando.

Por otra parte, se incorpora también otro elemento que es muy bien recibido en cualquier juego: los logros, en este caso vienen datos en formas de púas de guitarra que iremos consiguiendo al realizar una hazaña cualquiera, ya sea derrotar a un jefe o alcanzar una determinada puntuación. Como último extra, encontramos un modo en el que jugar cualquier canción del catálogo por separado, sin tener que recurrir al modo historia.

Sin duda, son pequeños detalles que aunque parezcan irrisorios, pueden revitalizar al juego sobremanera.

Conclusión.

Zombie Slayer Diox es un juego que se suma a la lista títulos tras el boom de los muertos vivientes de forma mediocre y predecible. Posee buena ejecución en algunos aspectos y nefasta en los más importantes, que son la jugabilidad y la diversión. Un juego, sin duda con potencial, pero que me hace pensar si en verdad lo han llegado a testear debidamente antes de sacarlo al mercado. Si el juego valiese 1 quizás te podría decir que para cuatro ratos tontos te podría servir, pero lo cierto es que vale la friolera cantidad de 6€, así que, por favor, piénsatelo mil veces antes de comprártelo.