Mi Wii U Gamepad no es reconocido por mi Wii U. Incluso he puesto el gamepad al lado de la consola y nada. Me aparece en el gamepad el típico mensaje de que te debes acercar más a la consola. Todo comenzó con que yo normalmente suelo jugar con mi Pro Controller ya que es más cómodo ( Con Mario Kart 8 ) y tengo configurada la consola para que el SO se actualize solo. Entonces supongo que tenía la versión 5.1.2U (OJO, mi consola es mexicana) y se actualizó a la 5.2.0U. Al encender la consola me puso un mensaje diciendo que también debía actualizar el Gamepad. Ya que pensaba jugar con mi Pro controller seleccioné la opción “Actualizar más tarde”. Más o menos una semana después (hoy) me dieron ganas de jugar al Art Academy (Que es de dibujo y obviamente solo usa el gamepad) por lo que procedí a encender el gamepad. Entonces sucedió lo que ya expresé arriba. Ya intenté sincronizarlo, pero mi Wii U no reconoce al Gamepad al presionar el botón SYNC de la consola y gamepad. Supongo que será porque consola y gamepad tienen diferentes versiones de software. Entonces me surge esta duda.

¿Cómo hago para actualizar el software de mi gamepad?

S que puedo intentar con la consola de otro, pero no tengo muchas oportunidades para eso. Digamos que prácticamente no tengo amigos que posean la consola, por lo que eso no es viable. ¿Hay un modo para hacer downgrade a mi consola y volver a actualizar o algún método por PC o alguna otra cosa? Por favor no quiero recurrir al SAT. Seguro que el SAT estará en USA, pero no quiero pagar envíos ni complicarme nada por falta de tiempo.

PD: Este es mi primer post, por lo que recibo observaciones con mucho gusto para mejorar.

Actualización: Ya logré resolverlo, al parecer mi Gamepad se desincronizó extrañamente de mi consola, y al intentar volverlo a sincronizar no presionaba bien el botón, por lo que creí que era un fallo. Quizás de desincronizó con el tema de que no actualizé su SO. Ahora curiosamente mi Gamepad si fue reconocido por mi consola, e inmediatamente después de sincronizarlo me pidió actualización. Dios, ¡Qué susto me había pegado!