Faltan apenas unas semanas para que Animal Crossing: Let’s Go to the City aterrice en Europa tras haber recalado en EEUU. Es pues el mejor momento para hacer un rápido repaso a las noticias en torno a esta secuela, cuarta en una saga que comenzó como un experimento arriesgado para Nintendo 64 y que acabó vendiendo millones de copias en GameCube y Nintendo DS. De nuevo nos ponemos en la piel de un adorable personaje recién llegado a un pueblo, sin nada en los bolsillos pero con muchas energías para comenzar una nueva vida.

Regreso al mismo pueblo

La comunicación es el eje y razón de ser de Animal Crossing, tal y como ya comentaba un alegre Miyamoto hace años, cuando el juego sonaba a extravagante propuesta japonesa, al menos desde el punto de vista occidental. Es de ese modo, hablando y entablando relaciones con los peculiares vecinos de nuestro pueblo, como podremos aspirar a mejorar nuestro nivel de vida, pagando al inicio una humilde vivienda y consiguiendo al final grandes colecciones de muebles o fósiles para decorar una gran mansión.

Las tareas habituales se repetirán en Wii, lo que incluye recolección de objetos, jardinería, pesca, diseño de ropa y la compra de todo tipo de artículos para ganar dinero y saldar nuestra deuda hipotecaria. Se han ampliado levemente los tipos de peces e insectos que se pueden capturar, también los sets de muebles disponibles, pero en conjunto nos encontraremos con los mismos animales y objetos que en anteriores versiones.

El reclamo que ha utilizado Nintendo para promocionar este nueva edición es la ciudad, de ahí el subtítulo del juego. En cualquier momento podremos tomar un autobús a la gran ciudad, que en realidad no será más que un pequeño centro de comercio donde encontrar unas pocas tiendas. Tendremos a nuestra disposición una peluquería, una boutique con objetos especiales, un tarot o una tienda de contrabando, instalada por el zorro Redd, un viejo conocido en la serie. En realidad, y a la vista de la información disponible, la ciudad no será más que una mezcla de lo visto ya en anteriores Animal Crossing, sólo que de forma más accesible, ya que no habrá que esperar a que los vendedores lleguen de visita a nuestro pueblo.

Se mantiene también el paso del tiempo de forma real, por lo que jugaremos el mismo día y a la misma hora que marque nuestro calendario. Existirán algunas festividades nuevas en fechas señaladas, con algunas competiciones mejoradas como la del día de los deportes, pero básicamente se repetirá el calendario de fiestas anterior.

El modo online tampoco promete muchas sorpresas, aunque el dinamismo será mayor gracias al chat de voz. La posibilidad de usar el WiiSpeak, micrófono que se venderá junto al juego o por separado, nos permitirá hablar libremente con nuestros amigos mientras correteamos por el pueblo. Por lo demás la experiencia será idéntica a lo que ya tuvimos en Nitendo DS: podremos compartir objetos y diseños, así como conseguir piezas nuevas para venderlas en el pueblo o utilizarlas en nuestra casa.

Y hasta aquí podemos rellenar este avance con novedades. Nos gustaría poder contar más posibilidades inéditas hasta ahora en la serie, pero parece que Nintendo ha decidido que la entrega de Wii sea el mismo juego de siempre. Dejamos las valoraciones definitivas para el análisis, realizado ya con la edición europea del juego. No obstante, resulta evidente que Nintendo no ha hecho esfuerzos para introducir casi novedades en una saga que las pide a gritos. Ya sea por desidia, falta de tiempo o convicción de que era la decisión más acertada, Let’s Go to the City será un juego que muy posiblemente parezca genial al que no conozca la saga pero que resultará muy aburrido al que ya haya disfrutado a fondo con ella. Muy pronto el análisis definitivo.

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