[Artículo] Vuelta a la realidad tras un humillante Digital Event
Ayer fue una cita marcada en el calendario de todo seguidor de Nintendo, una fecha en la que conoceríamos los futuros proyectos de la mano de una compañía que siempre nos ha alegrado con calidad y mimo en cada uno de sus juegos. Sin embargo, en un evento calificado por muchos como la gran decepción en años, hemos vuelto a una dura realidad de un plumazo. Después del espectáculo toca reflexionar en qué ha fallado Nintendo para que lleguemos a una situación en la que ni ellos mismos prevén qué les augura el futuro.
Al poco de finalizar el Nintendo Digital Event, el descontento se ha generalizado como la pólvora. Los títulos anunciados no son suficientes para contentar a una gran legión de seguidores. Nintendo ha movido ficha mal, desconcertando a todo un mundo que, con rabia, reivindica una explicación para la pesadilla que experimentó ayer. Después de recopilar multitud de comentarios en nuestros foros así como en multitud de medios, os aportamos los factores por las que una cita tan esperada como la de ayer se convirtiese en un tren directo al fracaso.
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Tabla de contenidos:
1. Abandono a Wii U, ¿se acabó su travesía?
Comenzamos este análisis por la sobremesa de Nintendo, Wii U, una consola que ha adolecido desde sus comienzos una situación tensa y de crisis. Muchos esperábamos grandes títulos en esta consola. Después del E3 del año pasado, donde Nintendo nos mostró un universo repleto de títulos de gran calidad a favor del jugador, escuchando sus peticiones y haciéndolas realidad, esta vez nos encontramos con la ausencia de una consola que, después del espectáculo, está abocada al fracaso.
De todos los títulos que vimos ayer, para la sobremesa se mostraron hasta 8 juegos, donde cabe matizar que únicamente 3 de ellos fueron enseñados por primera vez. ¿Wii U está acabando su recorrido? Aún le quedan entregas como Star Fox Zero, Xenoblade Chronicles X o el aún lejano The Legend of Zelda que pueden alargar su vida. Sin embargo, muchos salimos convencidos de que le queda poco por recorrer. Su penuria ha sido constante desde que llegó al mercado, adoleciendo su desfase en comparación al resto de la competencia, superior a ella, y la huida de los estudios que reniegan a aportar nuevas entregas. Solo Nintendo apoya a una consola tan poco atractiva para las desarrolladoras, donde ayer descubrimos que le toca sufrir una dura travesía.
El evento ayer se centró especialmente en la sólida portátil, que aún tiene cabida en el mercado. Wii U ha sido relegada a un segundo plano. Muchos jugadores nos preguntamos ahora mismo cuánto tiempo le falta. En un momento en el que Nintendo no tiene que darla por perdida, volcar toda su atención en ella, parece ser que cambió de opinión. El tiempo dirá, aunque a priori no podemos esperar mucho más esfuerzo de ella.
2. ¿Juegos que todos queríamos? Sí, pero no como nos esperábamos
Si existe una palabra con la que describir el Nintendo Digital Event de este año es una: DECEPCIÓN. Muchos coincidirán en esto. Ayer vimos el resurgir de grandes sagas que siempre nos han gustado, aunque no exactamente como esperábamos… Sí, han vuelto, qué más queremos, pero el tratamiento que han recibido ha desatado la furia de muchos jugadores que añoraban una nueva dosis de su cazarrecompensas favorita o escaparse de nuevo a un recóndito y tranquilo pueblo.
Recapitulemos las «sorpresas» que vimos ayer: un nuevo Metroid donde, en lugar de ver el retorno de Samus prefiere dejar de lado su trabajo galáctico para abrir paso a un título cooperativo, un Animal Crossing en donde el alcalde decide tomarse unas vacaciones y convertir el pueblo en un gigantesco tablero, un Zelda que, luchando aún por completar su esperadísima aventura en Wii U, revisita 3DS con un título con el sello de Four Swords y rescatando la temática de A Link Between Worlds, o Mario que, en lugar de aportarnos una nueva aventura plataformera, continua con su afición al tenis.
El regreso de muchas de nuestras franquicias favoritas se ha hecho realidad, pero no como nos hubiera gustado. Tanto ha enfurecido a los jugadores la caída de Metroid a ese nivel que hasta se ha iniciado una campaña de firmas con el objetivo de frenar el desarrollo de ese título. La negativa de los jugadores es tajante, donde incluso cada uno de los vídeos mostrados ayer está plagado de votos negativos en YouTube. Desconozco si esta es la decisión de Nintendo, convertir sus queridas sagas en juegos de segunda, pero si este es el camino que ha decidido seguir mejor frenar y otorgar un final justo a todos estos juegos que nos han alegrado durante años.
3. Mucha variedad pero poco atractivo
Nintendo siempre aporta juegos adaptados a la mayoría de los jugadores. Hemos visto acción y disparos con Star Fox Zero y Metroid Prime: Federation Force, aventuras y puzzles en The Legend of Zelda: Triforce Heroes, RPG en Mario & Luigi Paper Jam o Fire Emblem: Fates e incluso creatividad y diversión en Super Mario Maker y Animal Crossing: amiibo Party. Pero hay que realizarse esta pregunta: ¿Estos juegos trascenderán con el tiempo?
El E3 es el escenario perfecto para mostrar las principales bazas, títulos de gran peso que atraigan a los jugadores. Este año Nintendo nos ha aportado mucha variedad, sí, pero a su vez títulos poco atractivos para el público. Han faltado los pesos pesados, la participación de franquicias que nos inciten a decir «Esto es lo que me vende tu consola». No hemos tenido esto, ni siquiera juegos que trasciendan en el tiempo y sean recordados como grandes dentro del catálogo. Muchos diréis que podemos meter Star Fox Zero, por ejemplo, en este saco, aunque diferentes críticas a su sencillo apartado gráfico junto a la posterior conversación de Miyamoto tras el evento donde afirmó que carecerá el título de online de momento, relegan este juego de su posición como un AAA típico de la compañía.
El año pasado recibimos la tímida presencia de Splatoon, nueva y desconocida apuesta de la compañía, imágenes de Super Smash Bros, Hyrule Warriors, Bayonetta 2… Estos juegos sí que son alabados por los jugadores y guardados con esmero, entregas que harán que recordemos, en este caso, Wii U. Este año hemos recibido títulos de segunda división ,incapaces de enfrentarse con los grandes y eclipsados por el atractivo que provocan. Nintendo no puede jugar así sus cartas y vivir de estos juegos. Así solo conseguirá quedar relegada a un mero aperitivo en una industria donde cada vez tiene menos cabida.
4. ¿Cuándo comprenderá Nintendo que es mejor ir en compañía?
El apoyo third-party, la pesadilla que actualmente está experimentando Nintendo. La empresa se encuentra sola en un mar lleno de tiburones comiéndose poco a poco su terreno. Apoyada únicamente por sus propios exclusivos, debe sobrevivir ante títulos de gran calibre que pasan de largo de su consola. Los títulos multiplataforma son muy importantes para conseguir pulir un catálogo aunque esto parece que le da la espalda a Nintendo.
Las presentaciones de la competencia directa de Nintendo, donde encontramos a Sony y Microsoft, han aportado desde títulos de su propia cosecha a multiplataformas que visitarán ambas consolas. Juegos como Dark Souls 3 o Final Fantasy XV aterrizarán en las dos plataformas. ¿En la de Nintendo también? Por desgracia no. Estas entregas son muy importantes para atraer al jugador, son títulos que venden además de proporcionar apoyo al catálogo que, en nuestro caso, podría completarse con grandes First-Party marca Nintendo.
La fortuna no acompaña a la compañía y este es uno de los principales problemas que adolece la consola desde sus inicios. ¿Donde está ese tan prometido apoyo de las Third-Party que veríamos? ¿Reducido simplemente a lanzar nuestros amiibos exclusivos para Skylanders? Si la única relación que cuida Nintendo con estas compañías es con Activision vamos mal. Siempre podrá optar entre dos opciones: cabalgar sola en una industria cada vez más competitiva o tender realmente la mano a otros estudios que la acompañen en esa travesía. Nintendo, el tiempo para recapacitar se te acaba.
5. Un Digital Event mal conjugado, lento y pesado
Concluimos con el problema de raíz que achaca la desastrosa intervención ayer de Nintendo. Antes de nada, vamos a retroceder en el tiempo. ¿Dónde se quedaron esas conferencias en directo, donde Reggie, Iwata y compañía compartían con los presentes sus juegos venideros? En 2013 comenzarían las conferencias en diferido, eventos totalmente calculados al milímetro, otorgando el tiempo justo a cada juego y su presentación. Tras un Digital Event el del año pasado simplemente sublime, Nintendo ha fracasado incluso al gestionar cómo llevar a cabo la presentación.
Lenta, pesada y carente de dinamismo, así es como describo los poco más de 50 minutos de conferencia de ayer. Nos encontramos con trailers salpicados por todo el evento que nos pillaron desprevenidos. La confusión también reinó a lo largo de la conferencia, donde anuncios relevantes como Metroid Prime: Federation Force solo tuvo unos pocos segundos para después desaparecer y abrir paso al siguiente título.
Por otra parte, nos encontramos con entrevistas pesadas y contenido ya conocido. Comenzamos por ejemplo con Star Fox Zero y un trailer donde se muestran las nuevas mecánicas que veremos, aunque restando el impacto positivo que podrían causar intensas batallas, todo esto reunido en una especie de crucero intergaláctico por algunos de los planetas que visitaremos. Después largos minutos de entrevista a los desarrolladores que bien pueden servirnos para comprender el esfuerzo y origen de cada título, aunque restan el protagonismo a lo que únicamente queremos ver: juegos y más juegos.
Esta fue la tónica del evento. Cabe mencionar también el espacio que recibieron entregas como Fire Emblem: Fates junto al crossover con Shin Megami Tensei, Yoshi’s Woolly World o Xenoblade Chronicles X, aunque debo citar en este último el impresionante vídeo que me puso los pelos de punta, para, o no conocer información relevante y desconocida o para fechas tan distantes como decepcionantes. En conclusión, espacio malgastado que se podría haber aplicado a grandes títulos con mucho público esperándolo como Project Zero o material de The Legend of Zelda U que bien podría haber tenido un trailer para levantar ánimos, sin olvidar el apoyo indie con grandes títulos como Fast Racing Neo, el cual está recibiendo una gran atención por su brillante puesta en escena en Wii U.
Finalmente, concluye la conferencia con un largo y tedioso recorrido por Mario y su completo editor de niveles Super Mario Maker, además de incitar a bailar con Mario por una buena causa, una bonita acción por parte de Nintendo aunque, ¿realmente necesario alargarla durante tanto tiempo?
Hora de sacar conclusiones. Nintendo nos proporcionó una de sus peores actuaciones en la historia del E3, calificada por muchos directamente como la peor. Una presentación en la que partía con ventaja al desconocer todos los proyectos de cara a este evento se ha convertido en una conferencia pesada y tediosa en un momento en el que solo queremos ver grandes lanzamientos y material inédito. Finalmente salimos con dudas de que Wii U, que ha recibido un duro golpe a su imagen ya deteriorada, consiga sobrevivir además de un futuro incierto por parte de Nintendo.
Frente a la competencia, Nintendo se aleja cada vez más de ella. Al final sí que podemos decir que Nintendo ha ganado este E3. Ha sido la que más ha dado de qué hablar, ya sea para bien o para mal…