El intento fallido de Nintendo of America que casi cambió la historia de Pokémon

Pokémon es una de las sagas y franquicias más importantes del mundo entero. Tras la salida de su primer juego en Japón en el año 1996, se convirtió rápidamente en un fenómeno que revolucionó las bases de la industria.

Sin embargo, la franquicia de Pokémon estuvo a punto de sufrir un grandísimo cambio tras su llegada a los Estados Unidos. Según un reciente informe, Nintendo of America estuvo muy cerca de alterar el diseño de varios de los Pokémon más icónicos antes del lanzamiento oficial en el país.

Entre ellos, estaba incluido el mismísimo Pikachu. De haberse aprobado, esta decisión podría haber cambiado drásticamente la percepción de Pokémon y tal vez incluso afectado su éxito a largo plazo.

El dilema del diseño “demasiado lindo”

En 1998, cuando Pokémon estaba listo para expandirse a mercados fuera de Japón, Nintendo of America se enfrentaba a un gran desafío. Se trataba de adaptar una serie enormemente popular en su país, dirigida a un público occidental con gustos aparentemente diferentes.

En Japón, los juegos originales, Pokémon Rojo y Verde (conocido como Pokémon Azul en Occidente), habían vendido más de 10 millones de copias. Gracias a este éxito se convirtieron en los juegos más vendidos en la historia del país.

Sin embargo, el equipo de marketing de Nintendo of America temía que el estilo visual original de las criaturas fuese considerado “demasiado lindo“. Esto era un grandísimo problema para ellos y pensaban que no encajaría bien con los jugadores estadounidenses.

Con esta preocupación en mente, el equipo decidió experimentar con nuevos diseños, apostando por un enfoque más agresivo y visualmente impactante. Se especuló que un estilo “graffiti” podría ser más atractivo para los jóvenes occidentales.

No obstante, estos cambios no fueron bien recibidos en Japón, especialmente por Tsunekazu Ishihara, director ejecutivo de Pokémon Company. Este describió el nuevo diseño de Pikachu como algo cercano a “un tigre con pechos enormes”.

Esta exagerada y poco fiel interpretación casi llevó a un rediseño completo de los personajes, lo que probablemente hubiera sido un golpe desastroso para la franquicia.

Afortunadamente, se mantuvo el diseño original

Por suerte, estos diseños alternativos nunca vieron la luz. Ishihara y otros responsables lograron desechar los cambios y los juegos se lanzaron en los Estados Unidos manteniendo el arte original.

Esto resultó ser un acierto ya que el diseño visual de las criaturas es uno de los aspectos más elogiados de la saga hasta el día de hoy. Únicamente se realizaron cambios menores a los nombres de los Pokémon.

Desde su lanzamiento, Pokémon ha crecido hasta incluir un total de 1.025 criaturas. Cada una de ellas cuenta con un diseño completamente único y que ha logrado cautivar el corazón de todos de una forma u otra.

Actualmente, Pokémon es una de las marcas más exitosas y reconocibles de todo el mundo, con más de 480 millones de unidades vendidas entre todos sus títulos.

Un éxito que pudo haberse desmoronado

Aunque hoy día es difícil imaginar un mundo sin el adorable Pikachu que todos conocemos, esta anécdota revela lo cerca que estuvo Nintendo of America de cambiar el curso de la franquicia.

La decisión de no modificar los diseños originales fue crucial para mantener la esencia de Pokémon y garantizar su éxito a nivel global.

La historia sirve como recordatorio de que a veces los intentos de adaptar una obra cultural pueden tener consecuencias no deseadas si no se respeta su esencia original.

¿Y tú qué opinas? ¿Qué crees que hubiese pasado? Te leemos en los comentarios.