[Análisis] The Legend of Zelda: Echoes of Wisdom para Nintendo Switch

Tras juegos tan grandes como The Legend of Zelda: Breath of the Wild o Tears of the Kingdom, era difícil de imaginar qué rumbos tomaría la franquicia de Zelda para volver a sorprender a los jugadores. Sin embargo, Nintendo lo logró de nuevo con un título que, a su manera, se encargaría de romper nuevamente muchas de las convenciones de la franquicia desde su más inmediata premisa: uno que, de forma similar a lo ocurrido este año con Princess Peach Showtime!, estaría protagonizado por la princesa.

Ya hemos completado The Legend of Zelda: Echoes of Wisdom, y venimos a contaros qué nos ha parecido esta aventura, que tira por proponernos usar nuestra creatividad de formas nunca antes vistas en la franquicia, dejando el combate convencional en segundo plano en pos de mecánicas nuevas y tan interesantes como son la creación de réplicas o el poder de vincular.

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La aventura más creativa de Zelda

En The Legend of Zelda: Echoes of Wisdom una serie de brechas se están tragando todo a su paso, afectando a la paz de todos los pueblos de Hyrule e incluso dejando fuera de combate al espadachín legendario. Sin un héroe que salve el día, le toca a la princesa Zelda tomar el papel protagonista, siendo acompañada de la misteriosa hada Tri para salvar a su gente en una aventura que la llevará a recorrer desde desiertos mortíferos hasta mazmorras llenas de peligros y acertijos.

Jugar como Zelda es bastante distinto a jugar como Link. Lejos de pegar espadazos a todo lo que se mueva, tendremos que servirnos de replicar toda clase de objetos para hacernos paso por el mundo y de enemigos para que nos protejan. Los distintos elementos que podemos replicar tienen un valor determinado, así que solo podremos replicar unos pocos al mismo tiempo. Esto da lugar a toda clase de situaciones en las que tendremos que elegir bien qué objetos usar para poder pasar de un lugar a otro, o qué monstruos invocar para hacer frente a enemigos específicos.

Además de las réplicas, Zelda cuenta en el juego con la habilidad de vincular, que le permite enlazarse a distintos objetos para moverlos o tirar de ellos, o utilizarlos para llegar a sitios de difícil acceso. Otra herramienta que usaremos de forma continua es el modo espadachina, con el cual podremos (a costa de consumir energium) hacer uso brevemente de las habilidades de Link para liarnos a espadazos con enemigos, ser más rápidos y saltar un poquitín más alto.

Un mundo hermoso, como hecho de juguete

The Legend of Zelda: Echoes of Wisdom replica de forma ejemplar el apartado artístico ya visto en el remake para Nintendo Switch de Link’s Awakening, con un mundo hecho de miniaturas de lo más cuco que se adereza con un apartado musical muy bien traído, repleto de leitmotivs de la franquicia.

De ese modo, el colorido Hyrule que nos presenta el juego contrasta muy bien con la oscuridad del mundo del vacío, al cual deberemos acceder a través de las brechas que se están abriendo por el mapa y donde encontraremos las mazmorras del juego. Estas son bastante clásicas, y si bien no nos otorgarán objetos nuevos, sí que nos incitarán a sacarle todo el partido a nuestras réplicas para permitirnos hacernos paso por sus salas y vencer a los peligrosos jefes que las habitan.

Coleccionables por todos lados

Como nos tienen acostumbrados los juegos de Zelda, Echoes of Wisdom cuenta con coleccionables a tutiplén para que nunca nos sintamos aburridos. Desde los clásicos fragmentos de corazón hasta los sellos, pasando por las piezas de poderilio: siempre habrá algo que nos incite a no querer dejar piedra sin levantar en Hyrule.

Además de lo mencionado, el título dispone de bastantes misiones secundarias que nos otorgarán los personajes del juego, que se suman a minijuegos repartidos por el mundo, mecánicas como la de montar a caballo, o a la obtención de autómatas, réplicas de enemigos mecánicos mucho más eficaces, pero también más frágiles que una réplica al uso.

En total, completar The Legend of Zelda: Echoes of Wisdom puede tomar en torno a unas 20 horas, una duración dentro de la línea de los juegos de Zelda en dos dimensiones. En cuanto su apartado técnico, fuera de alguna que otra ralentización puntual, lo cierto es que no hemos experimentado pantallas de carga demasiado largas ni otros factores que hayan lastrado la experiencia en exceso. Lo que sí, nos hubiese gustado una forma mejor de navegar la lista de réplicas más allá de un menú lateral, ya que cuando has avanzado mucho en el juego y tienes bastantes en tu inventario, encontrar la que quieres puede volverse algo un poco más engorroso de lo que debería.

Esta sí que es la leyenda de Zelda

Sin lugar a dudas, The Legend of Zelda: Echoes of Wisdom ha sabido sorprenderme mezclando la creatividad sin límites que han estado ofreciendo los juegos 3D de la franquicia con el sabor clásico de los Zelda en dos dimensiones. Jugar como la princesa Zelda es un soplo de aire fresco, y mecánicas como la utilización de réplicas o el vincular nos han parecido de sobresaliente.

Desde luego, estamos ante uno de los pesos pesados de Nintendo de cara a estas Navidades, así como ante un juego de The Legend of Zelda que pasará al recuerdo, no solo por apostar por ideas frescas y valientes que los fans llevaban pidiendo desde hace tiempo, sino también por ser un juego sumamente entretenido y lleno de imaginación.

The Legend of Zelda: Echoes of Wisdom llega a Nintendo Switch en exclusiva este 26 de septiembre tanto en digital a través de la eShop como en físico a través de la My Nintendo Store, ¡no te lo pierdas!