La adaptación de Zelda a la gran pantalla sigue generando grandes expectativas
La inminente adaptación cinematográfica de The Legend of Zelda genera más expectación que nunca, especialmente tras el éxito de otra adaptación
La emoción por la película de la leyenda de Zelda se intensifica tras el 80% de éxito en taquilla de la ultima adaptación del Planeta de los Simios.
Basada en la serie de videojuegos de Nintendo que ha cautivado a los jugadores durante décadas, The Legend of Zelda está preparada para llevar a Link y Zelda a la gran pantalla. Particularmente después del éxito comercial de la película de Super Mario Bros, las expectativas son elevadas para la interpretación del director Wes Ball de Legend of Zelda.
El éxito de otras adaptaciones de alta fantasía como El Señor de los Anillos y El Brujo demuestra que los mundos de fantasía detallados pueden traducirse eficazmente a la acción en vivo. El desafío radica en preservar los elementos visuales distintivos y los arquetipos del material original, mientras se explora con las fortalezas visuales únicas del medio cinematográfico.
Afortunadamente, la experiencia de Ball con la franquicia The Maze Runner lo sitúa en el tono adecuado para una posible aventura de acción en vivo de la leyenda de Zelda, hablando de sus habilidades para adaptar historias de aventuras. Su último éxito cinematográfico es muy impresionante en ese sentido, específicamente debido a las formas en que aborda una historia visual potencialmente complicada y vasta con el mismo tipo de energía que una adaptación de Legend of Zelda necesitaría para triunfar en la gran pantalla. El mundo del Planeta de los Simios podría traducirse bien en Hyrule. Varios juegos de The Legend Of Zelda tienen lugar en ruinas, uno de los aspectos más perdurables de The Legend of Zelda es la forma en que la mayoría de las entregas de la serie están en gran medida desconectadas entre sí.
Ha habido más de una docena de versiones de Link a lo largo de los años, con solo un puñado apareciendo a través de los títulos. Esto ha permitido varios enfoques diferentes de Link y su historia, con muchos ambientados en las ruinas de una tierra que una vez fue próspera. Juegos como Ocarina of Time y Wind Waker exploran los nuevos mundos que han surgido sobre ruinas, con la segunda mitad de la primera construyendo sobre la destrucción causada por la conquista de Ganondorf del inocente Hyrule de la primera mitad.
El Reino del Planeta de los Simios brinda una excelente plataforma para el talento del director Wes Ball. Su preparación para dirigir la adaptación de The Legend of Zelda agrega aún más emoción. La película tiene una trama simple pero sólida, destacando especialmente por su ampliación visual del mundo. Situada muchas generaciones después de la era de César, la película nos sumerge en un escenario postapocalíptico cubierto por la vegetación que ha reclamado la civilización humana. Cada locación presenta una atmósfera única, transmitiendo emociones a través de su diseño visual y la construcción del mundo.
Desde el asombro del observatorio en ruinas hasta la inquietante presencia de los barcos oxidados en el reino de Promixus, cada lugar evoca sensaciones distintas. Con una poderosa banda sonora y personajes definidos, la película logra capturar la esencia de los juegos de Zelda, que se caracterizan por sus entornos vibrantes y diversos. La habilidad de Ball para manejar la imaginería y los tonos distintivos en El Reino del Planeta de los Simios sugiere que está bien equipado para adaptar The Legend of Zelda con éxito.
