[Análisis] OneShot: World Machine Edition para Nintendo Switch

Hace años, más concretamente en 2014, se lanzaba en la red de forma gratuita OneShot, un juego en el que un muchacho de aspecto gatuno llamado Niko nos hablaba directamente a nosotros para que le ayudásemos a volver a su hogar… Un concepto bastante revolucionario para la época que conseguía romper la cuarta pared de forma espectacular. Ahora, años más tarde, esa aventura ha sido renovada con OneShot: World Machine Edition para Nintendo Switch, juego del cual hoy os traemos nuestro análisis.

Con un sistema operativo recreado para la consola, nuevos coleccionables y una genial localización al castellano, ¿merece la pena darle una oportunidad a OneShot? ¿Es un juego a la altura de vuestras expectativas? No dudéis en seguir leyendo para descubrirlo.

Una historia entrañable, ahora renovada

Como antes os comentábamos, en OneShot encarnaremos a Niko, un simpático chico muy bonachón que despierta en un lugar desconocido lejos de su hogar natal. Allí, se le cuenta que es el mesías (ya que puede comunicarse con nosotros, quienes somos considerados como el Dios de dicho lugar) y que su misión consiste en llevar una gigantesca bombilla (que resulta ser el sol) a una alta torre para devolverle la luz a los habitantes del mundo del juego. Casi nada.

A lo largo de la aventura, tendremos que explorar distintos entornos, consiguiendo objetos, mezclándolos y haciendo uso de ellos para avanzar en la trama. Los personajes con los que nos encontraremos serán de lo más singulares y variopintos. Además, como novedad de esta edición, cerca de ellos encontraremos nuevos coleccionables que nos permitirán conocerlos mejor mediante detalladas fichas de personaje.

La principal novedad de esta versión es la implementación de un sistema operativo ficticio que permite adaptar los rompecabezas del juego desde la versión de ordenadores a consolas modernas. Esto nos recuerda a lo que hizo Doki Doki Literature Club Plus en su día. De tal modo, esta suerte de sistema operativo podremos personalizarlo con nuevos fondos de pantalla y temas que harán de la experiencia algo más llevadero y dado al coleccionismo.

La duración de OneShot: World Machine Edition sigue siendo de aproximadamente unas 7 horas en total. Por otro lado, no hemos encontrado ninguna clase de problema técnico con el juego, así que está bastante pulido en este nuevo lanzamiento. Además, la localización al castellano (y otros tantos idiomas) es otro buen punto a su favor, ya que se encuentra bastante bien hecha.

Conclusión de nuestro análisis de OneShot

El apartado audiovisual retro de OneShot sienta como un guante a la atmósfera del título. El diseño de todos los personajes es genial y bastante carismático, y Niko es un trozo de pan que es capaz de ganarse un hueco en nuestros corazones. La banda sonora también hace bien su trabajo, y los originales acertijos que rompen la cuarta pared haciéndonos jugar con los archivos del juego o con elementos fuera de la pantalla son todo un puntazo.

Para concluir nuestro análisis, OneShot: World Machine Edition sigue siendo el clásico moderno que ya era, solo que mejorado y expandido a plataformas de actual generación para que más personas puedan disfrutar de él. Nosotros nos encontramos muy satisfechos con la experiencia que nos hemos encontrado jugándolo, y recomendamos encarecidamente a todo fan de juegos como OMORI, Yume Nikki o Undertale que le echen un vistazo cuando tengan la oportunidad.

OneShot: World Machine Edition ya se encuentra disponible en formato digital para Nintendo Switch a un precio de 14,99 euros, con textos en castellano y un espacio de almacenamiento requerido de 431,00 MB. Si os gustan los juegos de su estilo, ¡este queda recomendado!