Por un lado, tenemos a nuestro queridísimo Charizard, quien sufrió desde su primera pre-evolución algunos eventos traumáticos. En la primera temporada y cuando era un Charmander, su entrenador lo abandonó por pensar que era débil. Esto provocó que el inicial tuviera una obsesión con ser fuerte y demostrar su valía.
De igual manera ocurrió con Infernape, ya que Ash consiguió a Chimchar después de que su anterior entrenador, Paul, lo abandonara por considerarlo inútil. Misma historia, misma solución en Sinnoh.
Incluso pasa algo parecido con Gengar en Viajes Pokémon. Aunque este sea de tipo Fantasma, aprendió Fuego Fatuo con la ayuda de otros Pokémon de tipo Fuego de Ash como Infernape, Charizard y Pignite. Además, antes de unirse a Ash, Gengar fue abandonado por su entrenador anterior en el sitio que luego se convirtió en el Laboratorio Cerezo.
Otros Pokémon de fuego con problemas emocionales
Por otro lado, existen algunos Pokémon de fuego que también compartieron momentos difíciles y dolorosos, aunque no fueran abandonados.
Por ejemplo, Ash atrapó a Torkoal durante su viaje por Hoenn. El entrenador y su grupo lo encontraron en el Valle de Acero, donde estaba siendo atacado por varios Pokémon de tipo Acero, incluido un fuerte Steelix. Hasta que Ash pudo salvarlo, Torkoal estaba en una situación desesperada y sufría debido a los constantes ataques.
Un segundo ejemplo es lo ocurrido con Incineroar, quien originalmente fue un Litten que tenía a Stoutland como su padre adoptivo. El Pokémon de tipo Normal encontró y cuidó a Litten cuando estaba herido, ayudándolo a entrenar y proporcionándole un hogar en las calles de Melemele. Desafortunadamente, Stoutland enfermó gravemente y, a pesar de los esfuerzos de Ash y Litten para salvarlo, falleció. La pérdida de su padre adoptivo dejó a Litten devastado, pero eventualmente encontró consuelo y fortaleza con Ash, quien se convirtió en su nuevo entrenador y amigo.
Excepciones que rompen la regla
Sin embargo, los fans encontraron dos casos especiales en los que Pokémon de tipo fuego de Ash tuvieron estabilidad emocional.
Uno de ellos fue Quilava, el cual conoció a Ash cuando era un Cyndaquil perseguido por un entrenador rival y el Equipo Rocket. Ash ayudó a Cyndaquil a defenderse, demostrándole su poder con un potente ataque de Llamarada, lo que permitió a Ash capturarlo y ganarse su confianza.
En cuanto a Fletchling, Ash lo atrapó en la región de Kalos. Ash lo vio robando la comida de Pikachu y decidió capturarlo. Tras una emocionante batalla en la que Pikachu y Froakie trabajaron juntos para debilitar a Fletchling, Ash logró capturarlo con una Pokéball. Al igual que Cyndaquil, rápidamente se integró en el equipo como un Pokémon confiable y valioso.
Vía GameRant