El poder más roto de That Time I Got Reincarnated as a Slime

Hay muchos personajes fuertes que bien podrían tener el poder más roto de That Time I Got Reincarnated as a Slime. Sin embargo, hay uno que destaca por sobre todos los demás en poder y eficiencia.

Seguimos con ganas de ver anime tras el avance de nuevo episodio de Horizontes Pokémon y la fecha de la serie oficial de Dead Cells. Y mientras esperamos por los mejores estrenos que se vienen a lo largo del 2024, los nuevos capítulos del slime más heroico de la industria nos dejan analizar mucho más sobre el anime.

Pero estamos notando que la serie está alcanzando niveles cada vez más exagerados, donde los personajes tienen habilidades tan poderosas que es difícil decidir cuál sería más devastadora o efectiva que otra. Sin embargo, el anime ha dejado claro cuál es la más poderosa entre todas ellas.

¿Cuál es el poder más roto en That Time I Got Reincarnated as a Slime?

El poder más roto en That Time I Got Reincarnated as a Slime es el más básico de la serie: el de absorber y analizar. Esta habilidad le permite a Rimuru desbloquear poderes nuevos y evolucionar los que ya tenía, absorbiendo objetos y formas de vida.

Al subir de nivel, Rimuru evoluciona junto a sus habilidades »Glotonería» y »Gran Sabio». Mientras más fuentes de poder se trague, más fuerte se volverá. Esto lo convierte en un poder sin límites, pues en teoría podría engullir la Genkidama de Goku y devolvérsela, por ejemplo. Además es un poder único del slime, pues la mayoría de los personajes nacen con una afinidad por la fuerza física o mágica.

Como si fuera poco, gana el poder de replicar, copiar, fusionar y crear hechizos. Incluso le permitió ganar el poder de darle nombre a los monstruos, que evolucionan al subordinarse a él. Esto les da bendiciones que aumentan su fuerza y habilidad mágica. Un ejemplo de su poder es el encuentro con Veldora, el temible Dragon de la Tormenta. Rimuru pudo liberarlo de su encarcelamiento usando Glotonería, aun siendo nuevo en las leyes de ese mundo desconocido.

En general es un poder con infinitas posibilidades, desde cambiar de forma hasta convertirse en Rey Demonio y absorber las magículas de los enemigos para revivir a sus aliados. Se le podría llegar a comparar con un dios, si utiliza sus habilidades adecuadamente. Lo más curioso es que nadie elegiría renacer como un slime si tuvieran que elegir, y vaya de lo que se pierden.