Las 4 consolas de Nintendo que salvaron a la empresa
¡Grandes máquinas con juegos geniales!
Nintendo es una de las empresas más prolíferas de la industria. Nintendo Switch está batiendo récords de ventas, sus videojuegos venden como churros y la «marca Nintendo» goza de muy buena salud. pero esto no siempre fue así. De hecho, Nintendo atravesó varias etapas oscuras que a muchos nos hicieron temer lo peor respecto al futuro de la compañía. En este artículo, repasaremos aquellas consolas de Nintendo que salvaron la empresa en su peor momento.
Las consolas que salvaron a Nintendo
Game Boy
Vale, puede que en 1989 Nintendo no estuviera pasando por un mal momento económico, pero sí que fue la primera Game Boy la que, después de la salida de NES, colocó y afianzó a Nintendo como una de las referentes de la industria. Recordemos que, hasta entonces, Nintendo tenía un negocio más diversificado, centrado en experiencias arcade y juguetes electrónicos. Con casi 120 millones de unidades vendidas, la Game Boy es una de las consolas más icónicas y exitosas de la historia.
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Nintendo Wii
En 2006 Nintendo lanzaría al mercado su nuevo proyecto, la Nintendo Wii, con una gran presión. Venían de varios batacazos comerciales con sus dos últimas consolas de sobremesa, Nintendo 64 y Nintendo GameCube. Ésta última, llegando a vender apenas 22 millones de unidades, lo que colocaba a la empresa de Kyoto en una situación muy delicada. No les quedaba otra que reinventarse. ¡Y vaya que si lo hicieron!
Haciendo honor a su nombre en clave, Wii fue toda una revolución y un fenómeno mundial. Más de 100 millones de consolas repartidas en las casas de todo el mundo pusieron a padres, hijos y abuelos a jugar al tenis, hacer deporte o jugar al Super Mario de turno. Su innovador control por movimiento dividió a los fans, pero acercó los videojuegos a un nuevo público. Puede que haya significado el fin de una Nintendo referente tecnológicamente hablando, pero sin duda fue una decisión que salvó a la empresa de una quiebra económica.
Nintendo 3DS
Nintendo Wii U fue el gran fracaso de Nintendo. Sus apenas 14 millones de unidades vendidas pusieron en serios aprietos económicos a Nintendo, que tuvo que poner sus esperanzas en Nintendo 3DS. Y esta tampoco lo tuvo nada fácil en sus inicios. Con una precoz rebaja de precio incluida, la portátil asumió el rol de salvavidas y mantuvo a flote las arcas nintenderas durante muchos años. Consiguió remontar un pésimo lanzamiento y, junto a su excelente catálogo, hoy es recordada como un sistema de lo más completo y respetado. Y no es para menos, porque llegó a la cifra de 80 millones de consolas vendidas. Con ella pudimos disfrutar de grandes títulos como Super Mario 3D Land, los remakes de Ocarina of Time y Majoras Mask o el Resident Evil: Revelations. En Nintenderos ya repasamos los 25 mejores juegos de Nintendo 3DS.
Nintendo Switch
Aunque el relativo éxito de Nintendo 3DS sirvió para amainar el temporal, no fue hasta que nuestra querida Nintendo Switch llegó al mercado cuando Nintendo empezó a respirar tranquila. Tras el mal recuerdo de Wii U, Nintendo aprendió de sus errores y lanzó al mercado un concepto rompedor, que pulía las buenas pero mal ejecutadas idea de su antecesora. Dado que el mercado de sobremesa no acababa de dar los frutos esperados, ¿por qué no fusionarlo con el portátil? Pues… ¡tachán! Dieron con la fórmula del éxito. A día de hoy, Switch amenaza el trono de consola más vendida de la historia, solo superada por PlayStation 2 y Nintendo DS, con más de 125 millones de unidades vendidas.
Sus hasta 6 versiones diferentes sirvieron para mantener vivo un sistema que tuvo una vida útil de nada más ni nada menos que 9 años. Ojo, que era una familia numerosa: la Nintendo 3DS original, Nintendo 3DS XL, Nintendo 2DS, New Nintendo 3DS, New Nintendo 3DS XL y la New Nintendo 2DS XL.