[Análisis] Circus Electrique para Nintendo Switch
Hay géneros en claro apogeo, ya sea por la novedad, la dificultad o por las mecánicas referidas al gameplay. He de reconocer que soy un enamorado de los roguelike y de los RPG con combates por turnos. Por ello, cuando vi anunciado Circus Electrique percibí algo de aquel mítico Darkest Dungeon, algo que sabía que, si bien, aunque la historia flojease, podría ser muy interesante y disfrutable a nivel de mecánicas. ¿Qué ha ocurrido al final? Un título interesante, aunque quiere abarcar tanto que, en ocasiones, se queda algo mermado.
Tabla de contenidos:
Historia anodina
Aunque el título intenta meternos de lleno en su historia a través de unos personajes bien caracterizados, la trama es, por así decirlo, previsible. Nos encontramos en un Londres Steampunk donde la protagonista, Amelia, trata de desenmascarar una serie de raros acontecimientos que están haciendo de las calles de Londres toda una odisea.
Durante la travesía, necesitaremos la ayuda de nuestro tío, el cual es el dueño del circo, para que nos “preste” algunos de sus robustos y estrambóticos trabajadores circenses, de forma que podamos ir desenmarañando qué sucede en este Londres que se viene abajo. Si bien la premisa no está nada mal y hay numerosas cinemáticas, muy estilo cómics, que tratan de ahondar en la relación entre Amelia y su tío, realmente la narrativa me ha parecido previsible y, en ocasiones, hasta aburrida. Simplemente, es un hilo conductor para que no todo sea “combate, gestiona y vuelve a combatir”.
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Un combate conocido, pero intrincado
Sin lugar a dudas, en lo que respecta a los combates, que será algo que haréis muy a menudo, es donde está la verdadera chicha del título, así como en la gestión del circo, aunque eso lo detallaremos más adelante.
Durante éstos momentos, tendremos que escoger 4 (aunque también podremos escoger menos) personajes del circo. Cada uno tiene sus particularidades, virtudes y defectos que tendremos que explotar. Aquí se bebe mucho de Darkest Dungeon, por lo que tendremos que posicionar bien a nuestros luchadores, dado que los ataques se podrán efectuar siempre y cuando estemos en el lugar correcto.
A medida que avanzamos en la historia, nos encontraremos con una mayor variedad de personajes, los cuales tienen hasta 6 habilidades diferentes que podremos ir subiendo de nivel. No podrían fallar los personajes a corta o larga distancia, los sanadores, el apoyo, etc. Cada habilidad puede tener diversos efectos, por lo que tendremos que conocer muy bien a nuestros personajes para saber qué ataque efectuar en función del momento y la situación. No reinventan la pólvora, pero es muy divertido.
Si Darkest Dungeon incluía el tema de la moral en nuestros personajes, aquí tenemos el “Fulgor”, el cual también afecta a los enemigos. ¿En qué consiste? Si rellenamos la barra de fulgor de un enemigo, aunque le quede vida suficiente, éste se irá del combate. Esta mecánica sí me ha parecido realmente curiosa, dado que no solamente es atacar para mermar la vida de un enemigo, sino pensar en si sería más fácil ir a por su fulgor y eliminarlo del combate.
Algo que no me ha parecido muy interesante ha sido el mapa del juego. A medida que avanza la historia se nos marcará dónde debemos ir, pudiendo “callejear” por el mapa de Londres, lo que nos activará los combates o ciertos eventos, tales como ayudar a una persona, darle dinero, etc. Estos eventos me han parecido sumamente repetitivos y, en una gran cantidad de ocasiones, aún intentando cosas distintas, siempre me han llevado a un combate, por lo que, ¿para qué ponerlos, si al final acabaré haciendo lo mismo? Es una mecánica que podría haberse perfilado algo más y habría dado más juego.
Gestionar un circo tiene su intríngulis
Como no podría faltar, si somos dueños de un circo, tendremos que gestionarlo, y he de confesar que la gente no se conforma con poca cosa. Cada trabajador circense forma parte de una serie de clases, las cuales tenemos que mezclar de forma debida para diseñar un espectáculo en condiciones. No vale todo, hay personajes que no quieren actuar con otros (por ejemplo, un payaso que no quiera estar con un levantador de pesas) y no todas las plantillas de espectáculo casan con todas las clases.
He de decir que he disfrutado mucho gestionando estos momentos en particular, puesto que te sacan de la acción, pero se convierten en un buen momento para intentar sacar jugo a nuestros currantes/combatientes. Al final de cada evento, según la química que finalmente se crea en el espectáculo, podremos ir obteniendo recursos que utilizar en combate. Es verdad que al principio parece algo repetitivo, puesto que le número de plantillas que tenemos y personajes está muy mermado, pero podremos ir adquiriendo más durante la aventura y, finalmente, tendremos espectáculos muy elaborados que nos den muchísimos recursos.
Música circense, en lo bueno y en lo malo
Si algo tiene claro el título es que no quiere que dejes de pensar que estamos en un espectáculo de circo, por lo que la música, en la mayoría de ocasiones, trata de imitar lo que sería estar viendo este espectáculo a cada segundo. La inmersión está conseguida, por supuesto, pero es cierto que, a medida que pasan las horas, comienza a haber un cierto hastío que cansa, dado que la repetición de ciertas melodías taladrantes es muy pesada.
Balanceándose en la cuerda floja
Uno de los peores apartados es el tema técnico. Circus Electrique tiene un buen diseño artístico de personajes, con modelados interesantes y que denotan que han querido asemejarse, pero teniendo su propio estilo, a Darkest Dungeon, no obstante, el problema está en el aspecto más técnico del juego. He sufrido numerosas ralentizaciones, los fps caen de forma abrupta y, en teoría, sin haber nada en pantalla que lo motive, pero lo más dantesco han sido los numerosos crasheos que he sufrido, así como las más de 5 partidas que he tenido que volver a empezar porque, sin motivo aparente, y en puntos distintos, el juego no quería guardarse y siempre cargaba en puntos de inicio de la aventura. Este hecho, además, me ha seguido ocurriendo a pesar de haberse lanzado numerosas actualizaciones.
Conclusiones
Si lo que buscáis es un título que, aún con sus defectos, trate de emular lo que Darkest Dungeon supone en lo que a mecánicas se refiere, estáis ante vuestro título ideal. Circus Electrique nos da una buena dosis de acción y gestión muy divertida, aunque no del todo pulida, que hará las delicias de los fans de este género, aunque salvando las distancias con sus otros competidores.
Circus Electrique está disponible en formato digital en la eShop a un precio de 19,99 euros y tiene un tamaño de descarga de 48866 MB.