[Mini-Análisis] Kharon’s Crypt – Even Death May Die para Nintendo Switch

Si sois fans de sagas como The Legend of Zelda, seguramente os interese el juego del que os venimos a hablar hoy. Después de años de desarrollo, Kharon’s Crypt al fin se encuentra disponible en Nintendo Switch. Y después de habernos hecho paso a través de él, os podemos asegurar que es un juego que merece mucho la pena. Os contaremos a continuación por qué.

Encarnando a Caronte… y a sus víctimas

Lo primero que hemos de comentar de Kharon’s Crypt es que se trata de un dungeon crawler en el que tendremos que hacernos paso a través de todo tipo de puzles (cada cual más complicado que el anterior) y enemigos encarnando a Caronte, personaje que debe su nombre a aquella figura mitológica de la literatura griega que se encargaba de transportar las almas de los muertos.

Así pues, en esta aventura, nos veremos encerrados en una cripta (que da nombre al juego) por obra de un malvado rey que piensa que si nos sella, podrá eludir la muerte. Por eso, tendremos que ingeniárnoslas para salir de este aprieto, haciendo uso tanto de distintos objetos que iremos consiguiendo como de una mecánica muy original: poseer los cuerpos de los enemigos que derrotemos, haciendo uso de sus habilidades únicas para poder hacernos paso por la aventura. Hay una gran cantidad de enemigos, cada cualquier con sus propias mecánicas de las que hacer uso de forma ingeniosa y divertida. También existen numerosos jefes, que suponen grandes retos.

En líneas generales, estamos ante un juego variado y desafiante (tal vez demasiado, en algunas ocasiones), ideal para aquellos amantes de juegos que ya no se hacen hoy en día. Puede que su estilo no conecte con toda clase de jugadores, pero aquellos que sean capaz de meterse en su propuesta, encontrarán un muy buen título que disfrutar.

Un apartado audiovisual genial

El aura de misterio de la aventura es increíble, gracias en parte a su apartado audiovisual. De las ilustraciones en pixel art se ha encargado Mimibits junto a Hebi Lee (director del juego y encargado de sus otros aspectos), mientras que de la banda sonora está a cargo Tony Manfredonia. El trabajo de ambos con el título es de diez, consiguiendo replicar al máximo la atmósfera críptica de los juegos de Game Boy Color de la época.

Aunque su duración aproximada es de unas 15 horas de juego (en dependencia de nuestro nivel de habilidad, claro), también cuenta con logros para los más completistas que pueden aumentar la extensión de la aventura. Además, podemos personalizar el juego con distintos marcos que van desde las propias Game Boy de distintos colores hasta ilustraciones temáticas. Lejos de eso, también podemos elegir entre tres esquemas de control distintos, algo que también es de apreciar.

Como conclusión, si hay un juicio final que debamos emitir a Kharon’s Crypt, es que es un juego hecho con mucho corazón. Todos sus implicados han estado esforzándose por sacar este proyecto adelante durante mucho tiempo, y ha dado sus frutos con una mecánica muy divertida y bien aprovechada, una gran variedad de puzles y enemigos y un apartado audiovisual reminiscente de otros tiempos que merece mucho la pena.

Kharon’s Crypt – Even Death May Die ya está disponible en la eShop de Nintendo Switch a un precio de 13,95 euros (en el momento en el que redactamos estas líneas se encuentra rebajado), y se encuentra en perfecto español. Sigamos apoyando a producciones patrias para que nuestra industria siga experimentando un crecimiento sano en el que todos tenemos cabida.

Tras este pequeño análisis, está previsto que en los próximos días publiquemos un artículo hablando del juego en mayor extensión haciendo uso de una charla que tuvimos en su día con Hebi Lee, su principal responsable. ¡Permaneced atentos! Hasta entonces, esperamos que lo paséis muy bien con Kharon’s Crypt.