[Análisis] King of Seas para Nintendo Switch
Con un claro estilo cartoon que sale de mezclar la arquitectura de Azeroth y el colorido caribe de Rare, llega a Nintendo Switch King of Seas. En este rpg pirata creado por 3DClouds y distribuido por Team 17, nos pondremos el sombrero de capitán para buscar venganza y convertirnos en el rey pirata, ¿os unís a la tripulación, nintenderos?
Hermanos herederos.
Los piratas imponían su ley de la fuerza sobre los siete mares y los chamanes daban forma al mundo con su magia vudú; hartos de esto, los marineros de bien unieron fuerzas y fueron a la guerra contra sus opresores en busca de libertad. Tras una encarnizada batalla, los piratas perdieron y los chamanes abandonaron la magia. Con este evento se instauró una paz de 800 años apenas alterada por aquellos pocos bucaneros que se negaron a perder su estilo de vida a pesar de la derrota. Ahora es el turno de Marylou o Luky (dependiendo a quién elijamos) de prepararse para heredar el trono. Una futura coronación que se ve truncada cuando en su primera misión como capitán alguien usa magia prohibida, matan a su padre y lo culpan de ello atacando su navío y dándolo por muerto. Por suerte para el protagonista que hayamos elegido, ha sobrevivido al ataque y la ley pirata obliga a recoger a los naufragados en el mar sean de la ideología que sean. Es así como ahora pasará a comandar un barco pirata en pos de buscar la verdad, limpiar su nombre y vengar la muerte de su padre.
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Moverse por la mar
Con unos controles sencillos, moveremos la embarcación por un mundo con las localizaciones creadas proceduralmente; por lo que las ubicaciones de los sitios cambiarán con cada nueva partida. Un detalle que aumenta la rejugabilidad pero no le da más profundidad a la partida principal. Habrá que tener en cuenta varios factores como la cantidad de velas que tenemos desplegadas, en que dirección sopla el viento, si hay tormentas… todo eso sin mencionar peligros adicionales como los kraken o los barcos fantasma cuando cae la noche. Además, en la inmensidad del mar se irán generando restos de naufragios, suministros al azar, náufragos y barriles explosivos ¿quién deja eso por ahí tirado? Con una misión principal en mente, el juego se complementa con unas cuantas secundarias que iremos aceptando en las tabernas de otros puertos. La variedad de estas es bastante escasa (escolta a este, lleva esto, tráeme aquello…) y muchas veces son literalmente las mismas. Colaborando así con la sensación de repetitividad que tiene King of Seas en general. Es cierto que los combates en tiempo real son la parte más interesante dado los factores estratégicos a tener en cuenta (velocidad de los navíos, la cantidad de estos, el clima, las rocas cercanas, las habilidades…); pero hay poco más allá de esto. Salir victorioso de estos encuentros nos proporcionan experiencia que podremos invertir en un árbol de habilidades, objetos que poder equipar al barco para que tenga mejores estadísticas y mercancía varia que podremos vender en distintos puertos a distintos precios según el mercado. Sobre el papel la idea es entretenida, pero en la práctica queda coja la cosa. Los trayectos entre puntos clave son largos y carentes de emoción, cosa que puede aumentar el tedio con las misiones secundarias de recadero constante. Que te hundan el barco por un mal combate, un “injusto” cazador de piratas, o un spawn frente a ti de barcos fantasma es un gran castigo pues te hace volver al punto de origen y, literalmente, has perdido tiempo de tu vida en intentar explorar y ver que hay más allá.
Mis conclusiones
LO FEO: Texto ilegibles por el pequeño tamaño de la fuente. / Poca interacción con el mar y con el mundo. / No puedes tener un diseño de personajes y mundo tan interesante y no sacarle jugo. Pon el interior de las tabernas, pon más variedad de NPCs o al menos no uses los mismos en todas las ciudades. / El ritmo del juego es lento y sientes que no tienes control sobre la situación cuando el juego decide generar amenazas en tu cara para finalizarte la exploración. / Poca variedad de embarcaciones. / De nada sirve que explores si no pagas al cartógrafo. Sin él, todo lo que veas no aparecerá en tu mapa.
LO RARO: La cámara solo varía en tres alturas, pero no puedes rotarla hacia ningún lado. Una lástima no solo por implicar una peor navegación, sino por no poder apreciar mejor los escenarios. / Tiene una banda sonora respetable pero es muy muy repetitiva y escasa, además de que ni una sola “sea shantie” con la que amenizar los silenciosos viajes. / Intentar usar la mecánica de comprar-robar barato y vender caro en distintos puertos es prácticamente inútil si el juego te dice “hasta aquí, ahora al punto de origen”, si tardas varios minutos entre mercados y cuando llegas lo haces a ciegas porque no sabes qué necesitan o qué les sobra. Pudiendo además perder otros cargamentos porque ya estás hasta arriba. Es mejor vender donde sea al precio que sea, que perder el tiempo en ganar 3 de oro más por producto.
LO BUENO: La iluminación y su hermoso ciclo de día y noche con las sombras rotando junto con el sol. / Gráficamente es sublime y bastante estable en general. / La dirección artística es todo un acierto. / La hoja de ruta de los desarrolladores donde pretenden actualizar monstruos, mejor la QoL…
Una aventura rolera donde subir estadísticas y habilidades, con una dirección artística preciosa pero carente de ritmo y profundidad. Sin embargo, la base es sólida y con un buen potencial. Habrá que estar atentos a los próximos parches que los desarrolladores han prometido.
Tenéis disponible el juego en formato físico y en la eShop de Nintendo Switch por 24,99€. El tamaño de su descarga es de 1312 MB. Versión analizada 1.0.2.