[Análisis] Story of Seasons: Pioneers of Olive Town para Nintendo Switch
La serie de Story of Seasons es una con un largo recorrido tras de sí. Habiendo debutado en Occidente bajo el nombre de Harvest Moon y consagrándose como la franquicia de juegos de granjas por excelencia, mucho ha llovido, y tras múltiples nuevas entregas (una incluso contando con el mismísimo Doraemon), parece que esta vez viene más fuerte que nunca con la que promete ser una de las entregas más ambiciosas y completas de la serie.
Así es, en esta ocasión venimos a hablaros de Story of Seasons: Pioneers of Olive Town, juego que recibimos tras tan solo un mes con respecto a su lanzamiento en Japón y en perfecto castellano gracias a la labor de Marvelous y de Meridiem Games. ¿Qué nos ha parecido el título? ¿Cómo ha sido nuestra vida en la granja? ¡Descubridlo con nosotros!
Como apunte antes de comenzar, intentaremos no dar detalles acerca de funciones que desbloqueamos una vez avanzado bastante el juego, ya que creemos que son cosas que merecen ser vistas por vosotros mismos. Aún así, podéis echarle un vistazo a nuestras impresiones sobre el título en los diversos vídeos del juego que hemos ido emitiendo en directo en nuestro canal de Facebook Gaming. Una vez aclarado todo esto, ¡vamos allá!
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La dura vida del granjero
Nada más comencemos nuestra primera partida y hayamos creado a nuestro personaje con las distintas opciones de personalización a nuestro alcance, seremos transportados gracias a la ayuda de nuestra fiel motocicleta a los rurales parajes de Villa Oliva, donde el mismísimo alcalde del lugar nos recibirá para comunicarnos que ahora la vieja granja de nuestro abuelo es nuestra, y que debemos darle vida, no solo a ella (con tal de ganarnos el sustento que necesitamos para sobrevivir en esta nueva situación que se nos presenta), si no también al pueblo, que últimamente necesita algo de ayuda para convertirse en un centro turístico digno de visitar.
A partir de entonces, nuestro trabajo a lo largo de las estaciones y los años comenzará, no solo para convertirnos en una pieza fundamental del crecimiento de la villa, si no para poder transformarnos en todo un granjero de renombre. Cultivar, recolectar y refinar materiales, domar animales, pescar o minar se convertirán en nuestro pan de cada día, tareas que irán consumiendo nuestras energías (y nuestro tiempo), por lo que tendremos que mantenerlas a raya con tal de no acabar fatigados y en cama. ¡La gestión será esencial!
Así, lo que comenzará como una tienda de campaña y un solar silvestre lleno de piedras y hierbajos, acabará convirtiéndose en el remanso de paz de nuestros sueños conforme vayan pasando las estaciones, con verduras hasta donde alcanza la vista, animales clásicos como una simpática vaquita gigante o un caballo sobre el que podremos montar y un sinfín de materiales de toda índole que poder vender para poder sacarnos una buena suma de dinero a la vieja usanza.
Como siempre con este tipo de juegos, lo recomendable es tener paciencia y hacer las cosas con calma y tranquilidad. Es un juego para disfrutar a fuego lento, ¡así que no os precipitéis! Construid la granja de vuestros sueños con cariño, calma y sosiego. El juego no os meterá prisas, pero os incentivará constantemente a organizaros de la mejor forma posible.
Villa Oliva en acción
El centro neurálgico de nuestra aventura será sin lugar a dudas el tranquilo pueblo portuario de Villa Oliva, donde no solo podremos conocer a un sinfín de personajes (hay muchos, de todos los tipo, aunque en lo personal, nuestro favorito es Iori), cada cual con sus propias personalidades y rutinas, si no acceder a todo tipo de servicios en forma de comercios, cada uno con sus distinguidos horarios de apertura.
En concreto, en Villa Oliva encontraremos todo tipo de facilidades para hacer más llevadero el crecimiento de nuestra granja, como podrían ser tiendas de semillas y flores, restaurantes donde reponer energías o incluso tiendas de animales, o un museo donde catalogar nuestros recursos. Hay de todo lo que podamos necesitar, siempre que tengamos el dinero para pagar por sus servicios, claro está.
Incidiendo en esto, antes os dijimos que podíamos conseguir buenas sumas vendiendo materiales que recolectáramos, no obstante, no será la única forma de ganarnos el parné, ya que todos los habitantes de Villa Oliva nos irán dejando peticiones que, al completarlas, además de ayudarnos a desentrañar más las diversas mecánicas con las que cuenta el juego, nos darán recompensas que nos servirán en la aventura.
Sumado a esto, tampoco faltarán los eventos, más de doscientos en total, que se irán sucediendo conforme pasen los días y las estaciones, e irán desde los cumpleaños de los residentes de Villa Oliva hasta acontecimientos especiales que tendrán a todo el pueblo en vilo y que desencadenarán eventos como divertidos minijuegos en los que podremos participar y en los que seremos recompensados en función de nuestro desempeño. ¡Nunca habrá ausencia de diversión en Villa Oliva!
Por último, ya que hablamos de sus habitantes, sería imposible dejar sin mencionar el sistema de relaciones del título, el cual se mantiene también en esta entrega sin demasiados cambios, aunque contando en esta ocasión con un buen grado de inclusión, permitiéndonos casarnos y formar una familia con cualquier pretendiente que elijamos, da igual el género de nuestro personaje. Un paso adelante en la franquicia que estamos seguros de que muchos seguidores de la misma apreciarán. Como podréis imaginar, no os destriparemos cómo os podréis ganar los corazones de vuestro personaje favorito, pero tened en cuenta que cada uno tiene unos gustos únicos que tendréis que descubrir por vosotros mismos. ¡Buena suerte, rompecorazones!
Una aventura a fuego lento
Como os mencionamos antes, Story of Seasons es una serie que tiene como objetivo el que disfrutes el juego a tu manera, tomándote las cosas con calma y siguiendo tu propio ritmo, con objetivos pequeños y trabajo duro que, en el fondo, se acaba haciendo llevadero. No obstante, el título también tiene alguna que otra carencia, como podría ser el rendimiento, el cual en ocasiones podría ser mejor, con algunas caídas de fotogramas (que no terminan de lastrar la experiencia) cuando llevamos una partida algo más desarrollada y largos tiempos de espera que cortan el ritmo del juego, pero que nos dejan, eso sí, con pantallas de carga de lo más graciosas con todo tipo de capturas del título. Por supuesto, se espera que estos problemas sean sobrellevados con futuros parches, pero no quita que sigan ahí y que puedan molestar a algún que otro jugador.
Otro factor a tener en cuenta es el del tedio a la hora de recolectar materiales, ya que los necesitaremos para casi cualquier cosa (reparar edificios, conseguir mejores herramientas, fabricar máquinas para refinar esos mismos materiales…), cosa que se puede hacer repetitiva y resultar cargante a ciertos jugadores pero que, quieras o no, es un elemento común del género y algo que ha estado presente en anteriores juegos de la franquicia en cierta medida, así que no molestará en demasía al público objetivo que ya sea fan o haya probado otros títulos similares, como podría ser Animal Crossing: New Horizons.
Finalmente, tocando el apartado artístico del juego, la verdad es que no tenemos queja, con un diseño que sigue la línea de la serie y que resulta tierno, entrando por los ojos y siendo la mar de agradable. De hecho, para acompañar, tendremos a nuestra disposición una cámara de fotos entre nuestras herramientas para sacar instantáneas a todo lo tierno que se nos cruce por nuestro camino. Por otra parte, los solteros y las solteras tampoco decepcionan, siendo variados y atractivos, con todo tipo de gustos en mente. Dicho lo cual, lo último a destacar sería el apartado sonoro, tal vez otro punto en el que el juego flojea un poco, con una banda sonora que, si bien no resulta molesta y cumple con su cometido, tampoco destaca, invitándonos muchas veces a reproducir nosotros nuestros propios temas mientras hacemos las labores de mantenimiento de la granja que formarán parte de nuestras rutinas en el juego.
Conclusión
Como conclusión final después de todo lo que os hemos contado, no podemos afirmar otra cosa que estamos ante un título completo, lleno de contenido y que agradará a los fans de la franquicia, no solo por seguir en su línea agregando algunas cosas nuevas que son de agradecer, si no por la promesa de que se seguirá actualizando en el futuro con nuevo contenido.
Por supuesto, no todo es color de rosa, y puede que el tedio de recoger materiales para construir cosas (sobre todo al comienzo del juego) o algunos de sus problemas técnicos (que, se espera, sean solucionados con consecuentes parches) echen para atrás a algunos jugadores. Sin embargo, lo importante en Story of Seasons no es el destino, si no el camino. Es un juego que, como Animal Crossing o Stardew Valley, está pensado para ser disfrutado a fuego lento, paso a paso, y con una tranquilidad que, sin lugar a dudas, el juego sabe transmitir con maestría.
Crea una granja, cásate con quien quieras, forma una familia, ten animales de todo tipo, cultiva, pesca, cava en la mina, haz amigos, pero ante todo, sé feliz. Ese es el núcleo del juego, y la idea que nos intenta transmitir: cuando vas a tu propio paso, todo sabe mejor. Disfrutad de la vida de granja.
Story of Seasons: Pioneers of Olive Town se encuentra disponible para Nintendo Switch a partir de este 26 de marzo tanto en formato físico como en formato digital en la eShop de Nintendo Switch contando con textos en un perfecto castellano, algo que es de agradecer.
Por su parte, junto al juego también saldrá un completo pase de temporada que, además de otorgarle disfraces exclusivos a nuestro personaje nada más adquirirlo, nos irá desbloqueando nuevo contenido hasta agosto del año que viene que estará relacionado con entregas pasadas de la serie. Podéis echarle un vistazo con detenimiento aquí.
Por último, si lo vuestro es el formato físico, estáis de enhorabuena, ya que tendréis a vuestra disposición dos ediciones, una estándar (con un divertido peluche de regalo de reserva en ciertos comercios) y otra coleccionista, con un cuaderno, diez cartas de los personajes, un póster y una caja con una ilustración de Igusa Matsuyama. ¡La decisión final es vuestra!