Análisis Análisis Switch Nintendo Switch

[Análisis] Disgaea 4 Complete+ para Nintendo Switch

[Análisis] Disgaea 4 Complete+ para Nintendo Switch

Si hay una franquicia infravalorada en el mundo de los videojuegos en cuanto a ventas y por la que servidor siente verdadera lástima, no es otra que la de Disgaea. En principio, lo tiene todo para ser llamativa: un humor desternillante, una buena historia, complejidad más que justa, mucho por hacer, la aprobación de crítica y público y un carisma arrollador que sorprende de entrega a entrega. No obstante, con el paso de los años, en lugar de crecer en popularidad, se ha estancado, decayendo cada vez más y más en unidades vendidas, y poniendo en jaque a Nippon Ichi Software, su desarrolladora, la cual se encuentra en un incesante peligro de quiebra con pérdidas registradas que no paran de crecer en cada reporte de resultados.

Así es, como diría Scar en El Rey León, la vida no es justa. A pesar de todo, en el siguiente análisis intentaremos hacer justicia al último lanzamiento de la franquicia en Nintendo Switch luego de que nos hayan llegado la primera entrega y la quinta. Es decir, hoy vendremos a hablaros de Disgaea 4 Complete+, edición definitiva del título anteriormente lanzado en otras plataformas que ha venido para gozar de una segunda juventud a la consola híbrida, siendo distribuido en nuestro país gracias a Bandai Namco Entertainment.

De esa forma, después de haberlo probado en profundidad después de las casi cincuenta horas (que se pueden alargar a más de doscientas con el abrumador postgame) que dura su campaña, hoy venimos a intentar resolver todas las dudas que podáis tener acerca del título. ¿Merece la pena? ¿Es un buen juego de estrategia? ¿Esconde algo más detrás de su humor gamberro? ¡No dudéis en acompañarnos una vez más para descubrirlo!

Otros contenidos en esta categoría:

Las sardinas, un manjar de otro mundo

Sabemos que muchos lo preguntaréis, así que antes de nada, vamos a responderos a lo siguiente: Podéis disfrutar de esta entrega sin haber jugado a ninguna de las anteriores; ya que a pesar de compartir algún que otro personaje de entrega a entrega, no necesitáis comprender el trasfondo de ninguno para disfrutar de la aventura que se nos presenta, la cual es completamente original y no pierde valor al ser jugada por usuarios primerizos. Una vez aclarado esto, entremos en materia con la trama, la cual no tiene desperdicio alguno.

En esta ocasión, nuestra historia seguirá al vampiro Valvatorez, quien fuese otrora un tirano temido por sus víctimas, y que ahora… Bueno, ahora podría decirse que prefiere engullir sardinas todo el día, las cuales considera un manjar muy superior al de la sangre humana. Por dicha razón, su estatus está de capa caída, y pasa el tiempo siendo adiestrador de Prinnies (los pingüinos considerados como las mascotas de la franquicia, los cuales en realidad son humanos que fueron viles cuando aún estaban vivos y que pagan por sus fechorías en el más allá), un trabajo que nadie en el Netherworld quiere pero que él asimila gustoso en compañía de su lacayo más fiel, Fenrich, un hombre lobo que pone por las nubes a su señor y que lo sigue ciegamente sin importar la situación.

Así, todo parecerá ir medianamente bien, hasta que una calamidad inesperada ocurre para nuestro vampiro; tras prometerles una sardina por completar su entrenamiento a los Prinnies, estos desaparecen por obra del Corruptment (juego de palabras entre “gobierno” y “corrupto”), quienes consideran que ya no son necesarios. Ante dicha forzosa medida, Valvatorez decide ponerse manos a la obra y tomar cartas en el asunto, todo con el fin de cumplir su promesa; una promesa de sardinas.

De tal modo, a lo largo de nuestra extensa aventura nos encontraremos con todo tipo de personajes como podrían ser Fuka (una chica que estaba destinada a ser una Prinny pero que por problemas de presupuesto simplemente se pone un disfraz de uno), Emizel (el hijo del presidente del Netherworld, título que usa para conseguir lo que quiere) o Vulcanus (conocida como el ángel de la avaricia, una chica que oculta un pasado en común con Valvatorez) por nombrar algunos, los cuales irán aderezados por acción, sátira, viajes en el tiempo y humor de corte nipón por partes iguales.

Para finalizar, destacar que conforme a nuestro rendimiento en las batallas (aspecto del juego en el que entraremos en materia a continuación), podremos acceder a multitud de finales que harán que la rejugabilidad del título esté más que servida. Dicho lo cual, si queréis saber más acerca del tono de la historia, os dejamos con un entretenido vídeo acerca de la misma:

Reclamando la cima

Hablando de la jugabilidad del título, podemos empezar afirmando que se divide en dos aspectos claves: las batallas (las cuales serán por turnos y al más puro estilo de un juego de estrategia, llegando a rozar un nivel de detalle enfermizo) y el tiempo que pasamos en el Hades, nuestra base de operaciones personal.

Analizando en profundidad de esto último, lo cierto es que el Hades es, por así decirlo, algo como el monasterio en Fire Emblem: Three Houses, un lugar en el que no solo podremos pasar el rato y hablar con nuestros compañeros, sino un sitio en el que tendremos acceso a facilidades de todo tipo, que consistirán fundamentalmente en una tienda de armas, otra de armaduras, otra de objetos consumibles, otra de habilidades (donde podremos aprender nuevas o mejorar las que tenemos) e incluso una para poder rememorar la historia hasta el momento, todo eso rematado con un Senado en el que se votarán diversas peticiones que realicemos (y en la que incluso podremos realizar sobornos para que se giren las tornas a nuestro favor, ya que al fin y al cabo, somos malvados).

Por supuesto, podremos ir ampliando la extensión de nuestro Hades conforme vayamos ganando batallas, lo que se traducirá en todavía más facilidades que poder usar, y más diversión y cosas que hacer a lo largo de nuestro periplo. No queremos destriparos todas las posibilidades que ofrece este aspecto del juego, pero sin lugar a dudas, se trata de una fortaleza indispensable para cuando tengamos que enzarzarnos en las contiendas más salvajes y disparatadas.

Entrando en materia con las batallas, las cuales como os comentábamos son por turnos y con movimiento por casillas (es un juego de estrategia, al fin y al cabo), podemos afirmar que están refinadas al milímetro, ofreciendo muchas posibilidades que se explican al principio de la trama en una serie de tutoriales que, si bien pueden parecer algo abrumadores al principio, acaban convirtiéndose en los pilares de una acción que fluye sin problemas.

En concreto, podremos reclutar a distintos personajes de diversas clases (en total, unas 25) que lucharán junto a nosotros, cada uno con distintos rangos de acción, habilidades, movilidad, y demás características que podremos malear a nuestro gusto. Así, una vez empiece la acción, tendremos opciones clásicas del género como son cambiar la perspectiva del campo de batalla, defendernos, usar objetos, realizar ataques normales, emplear habilidades que consumirán SP tanto en solitario como en conjunción con otros personajes, e incluso recoger y lanzar tanto objetos como a nuestros propios aliados para que estos alcancen lugares de difícil acceso. Usando estas herramientas, cada batalla será diferente, y algunas requerirán que nos rebanemos un poco los sesos para poder salir victoriosos de más de una situación intrincada.

Terminando con esto, queremos destacar una función bastante importante, emblema de la franquicia, que como no podía ser de otra forma está también presente en esta. Así es, os hablamos del Chara World y del Item World, otras facilidades más del Hades que nos permitirán combatir en niveles que no forman parte de la campaña principal, pero que conseguirán volvernos rematadamente fuertes a base de reforzar nuestros objetos y personajes de una forma que hará que estos suban más de un peldaño en cuanto a poder se refiere.

Sin lugar a dudas, hay miles de estrategias que adoptar en el juego, y cuando las sumas todas, se vuelve un concepto algo abrumador en cuanto a profundidad a pesar de partir de unas raíces clásicas, no obstante, no hay mejor forma de asimilarlo todo que jugando uno mismo a la aventura y viendo todo lo que puede ofrecer. Y es que a pesar de todo lo que ya os hemos contado, también os podríamos hablar de las 400 habilidades que contiene el juego, de los hechizos de nivel Peta, de la evolución de armas, de la posibilidad de fusionar demonios para hacerlos más grandes y poderosos o incluso de las formas en las que pueden cambiar los escenarios… Sin embargo, aquí hemos rascado la superficie para crear un concepto general de un juego que esconde detrás de sí mucho que ofrecer y que merece que descubráis todos sus entresijos por vosotros mismos.

Una promesa inquebrantable

Tratando con el aspecto visual del juego, podemos decir que sigue en la línea del resto de entregas; un estilo de animación japonesa, realmente colorido y con una estética que se presta mucho al humor absurdo que se genera en determinadas situaciones para acentuar el factor cómico de la aventura. En resumidas cuentas, una delicia que en esta ocasión se ve acentuada por la adaptación a la alta definición del título, haciendo que los sprites de los personajes se vean más nítidos que nunca y que la acción cobre vida de una forma mucho más vibrante, dejando solo algún que otro cabo suelto muy perdonable.

Creemos que también es adecuado hablar de otro apartado por el que es conocido la franquicia, que no es otro que su dificultad. Tratando esto, podemos aseguraros que el título no es exactamente un camino de rosas, y como es costumbre, sabrá ponernos contra las cuerdas más de una vez, no obstante, también nos ofrecerá muchísimas herramientas como las que os enumeramos en el apartado anterior para que no tengamos que preocuparnos demasiado al quedarnos atascados en algún capítulo. De esa forma, cada jugador podrá elegir la intensidad que prefiera, preparándose más o menos concienzudamente antes del inicio de cada batalla.

Si pasamos a mencionar sus funciones en línea, podemos decir que son bastante anecdóticas, resumiéndose en alguna que otra mecánica pasiva relacionada con el Senado o en enviar/recibir grupos de piratas que harán de las suyas en algunos aspectos del juego. Realmente, no creemos que las carencias en este apartado resulten algo realmente negativo, ya que realizar partidas entre jugadores con los sistemas que propone el juego sería algo bastante caótico y difícil de equilibrar, y como de por sí es una experiencia para un jugador sumamente rica, no es algo que podamos achacarle como un punto negativo. Además, al tratarse de un juego tan de nicho, tampoco planteamos que resultase factible mantener unos servidores dedicados en los que se tardaría gran cantidad de tiempo en emparejar a jugadores para iniciar alguna partida que, a fin de cuentas, tomaría muchísimo tiempo en finalizar (recordemos que esto es un juego de estrategia, con contiendas que se pueden alargar incluso horas en las que alguno de los jugadores podría desconectarse y echarlo a perder todo).

Por su parte, entrando en materia con el apartado sonoro, podemos afirmar que la banda sonora tampoco decepciona, contando con temas bastante pegadizos, cosa que es de agradecer ya que debido a la extensión del título tendremos que pasar bastante tiempo escuchándolos. También, podremos gozar de interpretaciones en japonés o en inglés, siendo ambas igual de válidas y bien ejecutadas, por lo que queda a elección del consumidor cuál de las dos escoger. Dicho lo cual, para terminar con este apartado os dejamos con el tema de apertura del juego, llamado Last Engage e interpretado por Akiko Hasegawa y Asami Shimoda:

Vale, ¿pero qué hay de nuevo, dood?

Está bien, ya os hemos hablado lo suficiente del juego, no obstante, seguramente que alguno de vosotros será de esos que ya lo jugó en su día en alguna otra versión para distintas plataformas y os estaréis preguntando qué trae de nuevo esta versión, o si merece la pena comprar de nuevo el juego, no solo por apoyar a la franquicia, sino por sentir que aporta algo nuevo a la experiencia que pudieseis haber tenido en un pasado.

Así, ahora procederemos a explorar qué novedades trae el título para aquellos jugadores que ya sean veteranos, y es que para empezar, conviene destacar que, al ser una versión definitiva, todo el contenido adicional (en otras palabras, todos los personajes y escenarios) de versiones anteriores del juego está incluido de base. Por supuesto, a esto se suman características que ya estaban disponibles en Disgaea 5 (el cual fue lanzado también para la consola) y que no os destriparemos, pero que mejoran la calidad general de la experiencia de juego.

Sin embargo, lo realmente novedoso del título y por lo que se le ha concedido el título “plus” se trata de la incorporación de la alta definición (el juego se ve a 1920 x 1080p), así como la habilidad de ajustar la velocidad del combate hasta cuatro veces más, además del importante guardado automático después de ganar una batalla (antiguamente, esto no ocurría, y ocasionaba más de un quebradero de cabeza a los olvidadizos).

Dejando eso de lado, el título no contiene ningún elemento nuevo para la historia (aunque tampoco lo necesite), limitándose a ser, simplemente, una versión definitiva que se encarga de reunir todo lo que traían las anteriores revisiones del juego y puliéndolo todo un poco para que la experiencia sea lo más refinada posible.

Conclusión

El título del cual hoy os hemos hablado es una maravilla, tanto para los fanáticos de la franquicia de la que proviene, como para aquellos que aprecien el humor japonés o los buenos juegos de estrategia. De tal forma, si después de títulos como Fire Emblem: Three Houses buscáis una propuesta que pueda ser digna de vuestro tiempo, no podemos hacer más que recomendaros Disgaea 4 Complete+.

Ahora bien, a pesar de lo que os hemos estado comentando, no todo será positivo, y es que, por ejemplo, los jugadores más veteranos que ya se hayan pasado el juego en otras plataformas tampoco encontrarán demasiados alicientes para volver a experimentar lo que el título propone. No obstante, si no es tu caso y no te abruma la cantidad de contenido que se encuentra en el juego así como la inherente repetitividad del género del que proviene, no podemos hacer más que recomendarte unirte a las desventuras de Valvatorez y su grupo de amigos. La diversión está servida.

Disgaea 4 Complete+ ya se encuentra disponible tanto en formato físico como en formato digital a través de la eShop de Nintendo Switch, a un precio de 49,99 €, con una duración de 50 a 200 horas en dependencia del contenido que quieras disfrutas, contando con textos en francés o inglés y ocupando un espacio de 4958,72 MB.

Por último, si todavía os encontráis indecisos con respecto a si el título es o no para vosotros, debéis de saber que una demo del mismo se encuentra disponible en la eShop de la consola para que podáis decidir si es o no lo que buscáis. Además, si al final decidís haceros con el juego, podréis imprimir diversas portadas alternativas en su página oficial, la cual os recomendamos visitar si queréis ahondar todavía más en el título. ¡Disfrutad mucho!

9.0

[Análisis] Disgaea 4 Complete+ para Nintendo Switch

Puntuación Nintenderos: Imprescindible

  • Historia:
  • Jugabilidad:
  • Gráficos:
  • Sonido:
  • Duración:
  • Multijugador:
Destaca en:
  • Una historia tronchante con un elenco lleno de carisma.
  • Una extensa duración, con una jugabilidad rica y compleja.
  • Un festín audiovisual, estando por primera vez en alta definición.
Flojea en:
  • Un ritmo lento que puede no ajustarse a todos los paladares.
  • No ofrece demasiado para aquellos que ya se hayan pasado la aventura anteriormente.
  • Su sentido del humor puede no llegar a conectar con todo el mundo.