[Análisis] Castle Crashers Remastered para Nintendo Switch

Castle Crashers Remastered, desarrollado por The Behemoth, es un juego de acción en 2D donde tomaremos el control de uno de los numerosos héroes para rescatar a las princesas y el cristal. Este título respira humor, jugabilidad y, sobre todo, rejugabilidad.

Desembarcando en Nintendo Switch el pasado 17 de septiembre de 2019, nos llega un título adaptado perfectamente a la consola híbrida de Nintendo con textos traducidos al castellano y una fluidez pasmosa.

La historia en Castle Crashers es meramente circunstancial: el malvado de turno llega por todo lo alto y roba el cristal, además de a 4 princesas. Nuestro deber es rescatarlas, y para ello tendremos que ir superando a todo aquel que se nos interponga en nuestro camino. No faltarán los toques de humor, reinos enemigos y hasta los alienígenas en esta aventura.

Es en la jugabilidad donde este título destaca de manera sobresaliente. Para empezar, tendremos a los 4 personajes principales, además de los 2 extras de los DLC, incluidos de forma gratuita. A medida que subamos de nivel, podremos subir las estadísticas de los personajes, siendo estas: fuerza, magia, defensa y agilidad.

Existen más de 25 personajes para desbloquear. Algunos estarán ocultos y otros se desbloquearán al pasarnos el juego, como un personaje en concreto que descubriréis por vuestra cuenta. En general, todos los personajes son iguales, salvo por sus magias, muy características de cada uno, salvando algunos, que serán iguales entre sí. Por ejemplo, el caballero rojo controla la electricidad, mientras que el rosa controla la magia del amor.

Por si fuera poco, y además de las más de 40 armas a desbloquear, tendremos unas mascotas que nos ayudaran en el combate. Cada una de ellas tendrá una habilidad especial, como Zebra, que encontrará fruta en la hierba, o Jirafa, que nos aumentará la experiencia obtenida en un 10%.

Todo este conjunto de opciones, mascotas, armas, magias, hace de Castle Crashers un juego altamente rejugable para conseguirlo todo. Además, el juego cuenta con el modo “Insane” para un nuevo desafío en toda la aventura, arenas y un divertido minijuego.

Gráficamente el título luce de maravilla en Nintendo Switch, ya sea en modo portátil o en TV, el juego luce en las resoluciones máximas posibles, y goza además de una maravillosa fluidez constante. Las animaciones son muy divertidas a la par que cómicas.

El sonido que acompaña este título no tiene pérdida. La BSO es muy animada y se nos pegará rápidamente el ritmo en los huesos. Los efectos de magias y espadas están muy bien sincronizados. No hemos encontrado ninguna pega en este apartado.

Sin embargo, el modo multijugador se ha visto afectado por el hecho de que no podamos elegir la región de los jugadores con quienes queramos jugar. Hemos notado un increíble lag al jugar con ciertas personas, siendo casi imposible avanzar. Si hay suerte y nos toca con alguien con una buena conexión a la red, lo cierto es que se le logra sacar el máximo partido a este título, pero si no, puede convertirse en un infierno. También puedes jugar en la misma consola con otro mando, o con otra consola que tenga Castle Crashers en su Nintendo Switch.

En conclusión, Castle Crashers es un título muy recomendado para todo aquel que disfrute los juegos de acción en 2D. Quema, dispara, acribilla a tus enemigos y amigos en este divertidísimo juego de The Behemoth, de los que esperamos que en un futuro también lancen el resto de sus obras en Nintendo Switch.

Podéis adquirir Castle Crashers en la eShop de vuestra Nintendo Switch, a un precio de 16,99€ con un peso de 160,43 MB, además de conseguir 85 Puntos de oro en My Nintendo.