[Análisis] Darkwood

En el pasado Nindies Showcase Spring 2019 aparecieron una gran cantidad de títulos interesantes. Entre estos se encontraba un título Survival Horror con vista aérea que a mis ojos tenía una pinta fantástica. Por lo que se podía prever, se trataba de un juego que medía mucho los pasos del jugador, que presumiblemente debía de resguardarse de graves peligros, administrar muy bien los recursos e ir poco a poco deshilando una historia intrigante y espeluznante.

En el presente, después de mi incursión en los bosques nebulosos de Darkwood, tengo una opinión más precisa de lo que es un juego que transmite muy bien una sensación de agobio y pesadez, de supervivencia difícil, que cuadra perfectamente con la sensación que debe de sentir el pobre protagonista al que manejamos. Es una opinión parecida a la que tenía a priori, pero más matizada: no esperaba que las mecánicas de terror iban a tener una implicación psicológica en mí como sentí, por poner un ejemplo que deja el nombre de Darkwood en un lugar inmejorable, acabando Inside, de Playdead, dos años atrás.

El germen del terror

Darkwood es un roguelite que introduce un buen puñado de ideas del género para llevarlas a la práctica de manera muy eficaz. Teniendo en cuenta que se trata de un juego que debe causar terror, ¿qué ingredientes debería haber de la cesta de las mecánicas de juego? Pon supervivencia, gestión de recursos, construcción de materiales (el famoso crafteo), sistema de día y noche, hordas, enfermedades y curas, mapa en progreso, barra de estamina, iluminación parca, laberintos, combate cuerpo a cuerpo y a distancia, trampas, etc.

Todas las ideas enumeradas en el párrafo anterior tienen mucho sentido en su conjunto. El protagonista, un prisionero que debe fugarse del bosque, deberá ir haciéndose con el dominio de cada una de esas facetas del juego a medida que avanza y muere, del prueba y error. Pese a ser parco en tutoriales (solo al principio hay una zona segura en la que se aprende lo más básico), el diseño del bosque está bien hecho, meticulosamente, y cualquier jugador experimentado en el género de terror hallará con la clave de lo que hay que hacer.

La premisa, como ya se ha dicho, es sencilla: escapar. Sin embargo, conseguir los elementos necesarios para hacerlo no es tan fácil. Pasan algunos días en una misma estancia hasta poder dar con la clave para adentrarte todavía más en el bosque. Es en estos tiempos en un mismo bioma en los que el juego te fuerza a encontrar un cobertizo y protegerlo de las hordas en enemigos que acecharán en la noche. Como más hayas progresado, evidentemente mayor será la amenaza.

Hablando de la dificultad: su curva está muy bien dibujada. Empieza bastante alta, pero siempre te empuja a estar más atento, a ser más cauto, a protegerse más. Por otro lado, existen tres tipos de modo de juego que se pueden configurar al empezar una partida. Como solo he jugado al modo normal, repetiré lo descrito en las opciones de dificultad: el modo difícil, en el que podemos morir 4 veces; y pesadilla, en el que habrá permadeath.

Todo lo descrito convierten el título en un complejo y elaborado juego de survival horror. Su pausa, su investigación, sus textos, sus mecánicas de supervivencia y acción lo convierten en una gema dentro del catálogo de videojuegos de este género en Switch. Pese a su vista cenital, este título cuenta con muchísimas capas de elementos que enriquecen sus partidas desde el punto de vista de la jugabilidad.

¿Y qué hay de la historia?

El éxtasis de terror

Un buen juego requiere un componente narrativo, especialmente los de índole terrorífica. En Resident Evil, a medida que avanzas recopilas información para completar el puzle que, con todas las piezas, acaba cobrando sentido. En Darkwood es parecido: hay una especie de epidemia (también la llaman la Plaga, como en Resident Evil 4), hay mutaciones y hay una suerte de explicación biológica. Sin embargo, el caso que nos ocupa es ligeramente diferente al gran éxito de Capcom.

Darkwood es mucho más sutil en la narrativa. Existe la mecánica del diario, que permite que el protagonista elabore una serie de elucubraciones que ayudan a poner orden a todo el caos que ve el jugador. No obstante, el orden no es del todo cierto. Al final, el protagonista no deja de ser uno de tantos personajes que sufre transformaciones en su comportamiento a lo largo del transcurso del juego y la locura podrá con él en alguna toma de decisiones.

Al igual que en el sistema de juego, la narrativa también cuenta con varias capas. No solo nos enteraremos de lo que sucede a través del diario; sino que una narración en la toma de acciones, los diálogos con los personajes, viñetas e ilustraciones que ampliarán el horizonte narrativo, e incluso un apartado visual muy bien elaborado serán un complemento perfecto para satisfacer las demandas del jugador de querer conocer más y más sobre lo que acontece en esta arboleda maldita.

Aquí llega el momento de razonar el porqué del título de este subapartado. Lo que tiene un juego roguelite es que debes realizar más de una vez el progreso del juego. Es en esta situación de reaprendizaje donde cada vez más las ideas mostradas por los desarrolladores cobran sentido. Además, debido al sistema de ramificación de la historia, en la que según cómo ayudas a los personajes secundarios, cambia el devenir de tu personaje, el contenido narrativo de Darkwood se extiende hasta lugares insospechados.

Y es en uno de estos lugares insospechados donde, después de horas y horas de juego, te hallas completamente inmerso en una especie de éxtasis invertido, de gloria infernal o de euforia descarnada que solo es posible con la combinación exacta de las dosis de jugabilidad intensa y narrativa compleja.

Conclusiones

En este juego de terror hay que llenar jeringuillas de dosis que te protejan de una grave epidemia que sufren los seres orgánicos de un bosque de horror. Como una buena inyección, Darkwood reúne las dosis perfectas de jugabilidad (supervivencia, aleatoriedad, acción, deducciones) y narrativa (toma de decisiones, distintos caminos, múltiples narradores, un clímax). Ejemplo de un título elaborado con tiempo y dedicación. Además, consigue aterrorizarte sin gastar más de lo necesario, lo cual prueba que todos los estudios de desarrollo tienen cabida en esta industria tan extendida.

Darkwood está disponible en la eShop de Nintendo Switch desde el pasado mes mayo a un precio de 14,99 €. Ocupa casi 7 GB y está disponible en español.