[Análisis] Storm Boy: The Game

Storm Boy es un videojuego que adapta por primera vez al medio el libro infantil homónimo del autor australiano Colin Thiele, que fue publicado en 1964. El año que viene podremos ver una nueva adaptación cinematográfica de la obra, aunque ya ha sido llevado a la gran pantalla y al teatro con anterioridad.

Playa de minijuegos

Para los que no sepan nada acerca de Storm Boy ni de Colin Thiele, el juego pone al alcance de los usuarios un par de apartados explicativos sobre la obra y una corta biografía de su autor. La narración tiene lugar en la costa australiana, con un niño llamado Storm Boy que rescata a tres pelícanos a punto de fenecer en el nido. Cuando, ya sanados, llega el momento de liberarlos de vuelta a la naturaleza, uno de ellos volverá junto a él, Mr. Percival, y sus lazos se estrecharán aún más…

El joven Storm Boy explora la playa en bellos días despejados o atardeceres; mientras camina emergen los textos que nos narran su historia y a lo largo del recorrido van surgiendo los minijuegos a los que puedes dedicar tu tiempo o ignorar. Incluso pueden saltarse los minijuegos obligatorios ya que podrían suponer un desafío a los más pequeños. Para un título pretendidamente infantil no encontramos la barrera de la dificultad sino la del lenguaje, con textos en perfecto inglés.

Al terminar la aventura, que llevará poco más de media hora, se desbloqueará un nuevo menú que permite volver a recorrer los cuatro capítulos del juego o acceder directamente a los minijuegos. Dejo una lista que contiene la mayoría de ellos:

• Volar encarnando a un ave.
• Recoger moluscos.
• Alimentar con pescado a los pelícanos.
• Navegar en barca y nadar o bucear.
• Dibujar en la arena.
• Lanzar la pelota al pelícano.
• Surfear las dunas.

Un cuento táctil

Se nota que este título ha sido diseñado para dispositivos móviles con unos impecables controles táctiles en mente, que se convierten en la mejor forma de disfrutar el juego. Teniendo en modo portátil una experiencia tan completa, haber podido disfrutar de las mismas sensaciones en el televisor parece un requisito imprescindible, pero se prescinde de los controles por movimiento de los Joy-Con así como de la vibración HD.

Usar el texto como recurso y nexo para contarte un libro es la salida más pobre que se me ocurre cuando tienes un medio completamente interactivo para explorar otras posibilidades de manera jugable y no narrativa. Al final Storm Boy sale beneficiado en esos pequeños momentos donde puedes realizar acciones cotidianas y disfrutar del simple gesto de coger un palo y ponerte a garabatear sobre la arena húmeda hasta que tus trazos se los lleve la marea. Aunque su escasa duración tampoco te permite lamentarte demasiado de su poca inventiva y te quedas con los bonitos parajes y sobre todo el mensaje final.

Recomendado para…

Amantes de la naturaleza y los días de playa tranquilos que pueden tornarse procelosos.

Otros títulos a los que me remite

• Sus playas exploradas por un niño es imposible no asociarlas a las de Rime, también disponible en Nintendo Switch.
• Shape of the World es otra experiencia breve, contemplativa y poco exigente que puede disfrutarse en Switch.

Storm Boy está disponible en la eShop de Nintendo Switch desde el 20 de noviembre y cuenta un tamaño de descarga de 327 MB.