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[Artículo] Los videojuegos y la salud

Nintendo

Aunque jugar videojuegos es una de las actividades de ocio más populares del mundo, sus efectos en los jugadores, tanto positivos como negativos, a menudo se trivializa. Las tantas investigaciones realizadas en los últimos años merecen ser tomadas en cuenta, sobre todo porque los videojuegos tienen implicaciones para la salud. 

Un enfoque innovador de los videojuegos en la atención médica es su uso en el manejo del dolor. El grado de atención necesario para jugar cualquier juego distrae al individuo de la sensación de dolor, una estrategia que se ha servido entre pacientes pediátricos. 

Un estudio informó sobre el uso de un videojuego para evitar que un niño de 8 años se pegue en la cara. El niño tenía neurodermatitis y cicatrices debido a una punción continua en el labio superior. Los tratamientos previos habían fallado por lo que al niño se le dio un videojuego para mantener sus manos ocupadas. Después de dos semanas, el área afectada había sanado. 

Los estudios controlados que utilizan tanto ensayos aleatorizados como de comparaciones con las medidas basales del paciente muestran que los videojuegos pueden proporcionar distracción cognitiva para los niños durante la quimioterapia del cáncer.

Los videojuegos se han usado como una forma de fisioterapia o terapia ocupacional en muchos grupos diferentes de personas. Tales juegos enfocan la atención lejos de posibles molestias y, a diferencia de otras actividades terapéuticas tradicionales, no dependen de los movimientos pasivos y, a veces, de la manipulación dolorosa de las extremidades. Los videojuegos se han usado como una forma de fisioterapia para lesiones en los brazos y como una forma de terapia ocupacional para aumentar la fuerza de las manos. También se han informado beneficios terapéuticos para una variedad de poblaciones adultas incluyendo usuarios de sillas de ruedas con lesiones de la médula espinal.

Los videojuegos también se han utilizado en programas integrales para ayudar a desarrollar habilidades de habilidades sociales y espaciales en niños y adolescentes con discapacidad grave de aprendizaje u otros problemas de desarrollo, incluido el autismo. 

Sin embargo, no ha habido un seguimiento a largo plazo ni ensayos controlados aleatorizados robustos de tales intervenciones. Además, no se sabe si un efecto distractor depende simplemente de concentrarse en una tarea interactiva o si el contenido de los juegos también es un factor importante, ya que no se han realizado ensayos controlados que comparen los videojuegos con otros distractores. Las investigaciones adicionales deben analizar los factores relacionados con los juegos, las preferencias de los usuarios y los niveles relativos de desafío, y deben comparar los videojuegos con otras actividades potencialmente distractoras. 

Aunque jugar videojuegos tiene algunos beneficios en determinados entornos clínicos, un creciente cuerpo de evidencia resalta los aspectos más negativos del juego, particularmente en niños y adolescentes. Estos incluyen el riesgo de la adicción a los videojuegos y una mayor agresividad Hay numerosos informes de casos de otros efectos psicosociales y adversos para la medicina. Los efectos adversos, cuando ocurren, tienden a ser relativamente menores y temporales, y se resuelven de forma espontánea con una frecuencia de juego reducida. Se necesita una mayor cantidad de evidencia sobre el juego excesivo y sobre la definición de lo que constituye el exceso en primer lugar.