[Análisis] 1979 Revolution: Black Friday

Ink Stories y Digerati han querido traer hasta Nintendo Switch un título tan especial como 1979 Revolution: Black Friday. Inspirado en la revolución iraní que cambió el rumbo de este país a finales de la década de los 70, tenemos disponible en la máquina híbrida una aventura interactiva que ya se estrenó hace unos años en PC, llegando posteriormente a otras plataformas. ¿Queréis comprobar qué nos puede ofrecer este juego en nuestra consola?

Una buena dosis de historia

En plena época de la Guerra Fría, cuando dos países como Estados Unidos y la ya extinta Unión Soviética se disputaban el título de superpotencia mundial, surgieron sustanciales cambios y movimientos en países que hasta entonces habían estado sujetos a las directrices de uno de estos dos bandos, bien de forma directa o indirecta.

Uno de esos países era Irán, que tenía un gobierno regentado por el rey Sha, cuyo mandato, que contaba con el apoyo de Estados Unidos y Reino Unido, no era bien recibido entre una gran parte de la población.

Las decisiones de este mandatario, cada vez más impopulares, originaron que habitantes del país iraní de diversas clases sociales, ideas políticas y religiones, salieran a las calles a protestar por un cambio en favor de una república libre e islámica. Este movimiento se vio potenciado y guiado por el Ayatolá Jomeini, quien posteriormente regentaría el poder en el país tras la marcha del rey Sha.

Ante la magnitud de las revueltas, el Sha causó grandes represiones entre la población, llegando a aprobar una ley marcial que permitía a las cuerpos militares aplicar la fuerza que fuera necesaria, llegando a ejecutar a miles de civiles durante una de estas manifestaciones. Ese día se dio a conocer como el Viernes Negro, hecho que da nombre a este juego.

Y en este caldo de cultivo nos sitúa 1979 Revolution: Black Friday. Nos ponemos en la piel del joven Reza Shirazi, un fotógrafo iraní que tras su paso por Europa regresa a la ciudad de Teherán, encontrando que varios de sus amigos están metidos de lleno en la resistencia al Sha. Pronto descubrirá que, casi sin quererlo, él también formará parte de esa resistencia, encontrándonos con un hecho histórico muy poco tratado en el mundo de los videojuegos y que aporta frescura y ganas de aprender más sobre lo sucedido.

Es hora de tomar decisiones

Cuando comenzamos a jugar a 1979 Revolution: Black Friday, pronto caeremos en la cuenta de que estamos ante una aventura interactiva, parecida a las que podemos encontrar entre las obras de Telltale Games.

Manejando a Reza en tercera persona, tendremos algunas fases de exploración, en las que buscaremos pistas, haremos fotografías y hablaremos con algunos personajes. Sin embargo, el peso principal del juego recae en nuestras respuestas y decisiones durante todos los diálogos, que influirán en cierta medida en cómo se desarrolla la historia.

A la hora de elegir respuestas, debemos estar ágiles, pues contamos con un tiempo limitado para leer rápido y contestar la opción que por impulso diríamos. Así que no tardéis en tomar la decisión o el juego os la dará de forma automática.

Pero debemos recordar que somos fotógrafos, y eso el juego nos lo mantendrá presente durante toda la aventura. Tomaremos fotos de momentos y detalles importantes, enfocando simplemente con apretar el botón en el momento justo. Al realizar estas fotografías comprobaremos el resultado y, además, será comparado con las fotografías reales que se dieron durante la revolución, aportándonos aún más pedacitos de esta interesante historia.

Otro de los elementos jugables que encontraremos en el título son los Quick Time Events, en forma de sencillos acontecimientos como marcar varias direcciones con el joystick mientras huimos, o apretar un botón para evitar que nos ahogue algún tipo más nervioso de la cuenta.

Mientras exploramos encontraremos algunos objetos y curiosidades que podremos examinar en profundidad en el apartado de Extras, como grabaciones de audio de las entrevistas del Ayatolá, artículos, carteles…etc.

Revelando instantáneas

Si antes decíamos que el título puede recordar a las aventuras de Telltale en su dinámica, también es así en su aspecto gráfico, con un estilo de dibujado basado en el cel shadding. Sin embargo, en este caso nos encontramos con más sombras que luces, ya que el juego da la sensación de que podría haberse pulido mucho más en este apartado.

El framerate es bastante inestable durante las fases de exploración, sin llegar a mantenerse en los 30fps. También apreciaremos otros defectos como dientes de sierra y clipping en algunos momentos, en los que personajes del entorno nos atravesarán literalmente. Dentro de lo que cabe, en el modo portátil llega a aguantar el tirón de forma pasable, pero estos defectos se hacen mucho más presentes cuando jugamos en la TV. Como apunte curioso, el juego no nos permite hacer capturas de pantalla, al menos por el momento.

Los modelados y los escenarios en general, quedan bastante pobres. Las animaciones, tanto corporales como de los rostros en los diálogos de los personajes, conforman otro de los puntos más flojos, mermando un poco la aventura, que se ve sostenida por otras cualidades.

Y otra de esas cualidades es el aspecto sonoro, que equilibra la balanza. Y es que si los subtítulos del juego nos permiten ponerlos en español, el doblaje será en inglés en cualquier caso, y se agradece. Este doblaje cuenta con actores que ya solo por su forma de pronunciar, se notan originarios del lugar donde se produce la aventura, confirmándose en los títulos de crédito, con nombres que nada tienen que ver con los anglosajones. La banda sonora cumple y tiene momentos muy intensos en los que acompaña a la perfección esos instantes de tensión.

La revolución fue más larga

1979 Revolution: Black Friday, está distribuido en 19 capítulos que no nos llevarán más de tres horas completar. Desde luego, es una duración que se queda muy corta para todo lo que podía haber dado de sí una historia como esta.

Y es que algunos de estos capítulos de los que hablamos no duran más de un par de minutos, en los que simplemente presenciamos un diálogo eligiendo alguna respuesta y poco más. Así pasaremos al siguiente capítulo.

Nuestras respuestas influyen, sí, pero el peso no es tan fuerte como pudiéramos imaginar. El aliciente de rejugar el título puede residir en ver el par de finales distintos que nos ofrece, aunque, ya os avisamos que en ambos casos, dejan una sensación bastante fría.

Poco más se puede encontrar como parte de contenido del juego, salvo los Extras antes nombrados, que nos ayudarán a descubrir un poco más de un hecho histórico como este.

Conclusiones

1979 Revolution: Black Friday es una buena aventura interactiva, que tiene como principal baza una trama basada en un hecho histórico muy poco trabajado en el mundo de los videojuegos, como es la revolución iraní. Es capaz de mantenernos con ganas de jugar y de saber más de lo ocurrido en la realidad. Su aspecto gráfico y su duración merman en parte esta experiencia, que trata de compensarse con un apartado sonoro destacable. El título ya se encuentra disponible en la eShop de Nintendo Switch al precio de 11,99€ y necesitaréis de 4,1 GB de espacio para su descarga.