[Análisis] Punch Club

TinyBuild es un publisher de juegos indie, que ha lanzado grandes títulos al mercado, la mayoría con un toque gamberro, de su mano han salido títulos como Party Hard o Speedruners.

Pero en este caso os vamos a hablar de Punch Club de Lazy Bear Games, un juego donde nos convertiremos en el luchador más fuerte de la ciudad.

De niño nuestro protagonista vive la muerte de su padre, asesinado a las manos de un hombre misterioso con el ojo rojo, una vez crece este decide convertirse en luchador, ahí es donde entramos nosotros y tendremos que convertir a nuestro protagonista en el más fuerte.

Nuestro luchador desde el inicio del juego lo moldearemos dependiendo de nuestras preferencias, el juego nos ofrece diferentes caminos que nos harán afrontar los combates de formas distintas. Hay 3 elementos que tendremos que entrenar: fuerza, agilidad y energía. Dependiendo de los elementos que potenciemos con el entrenamiento y las habilidades que escojamos en el árbol de técnicas, nuestro luchador realizara unas habilidades u otras durante el combate.

Arte y sonido

En el apartado gráfico nos encontramos un pixel art maravilloso lleno de detalles en cada esquina, que nos tele-transportará a los videojuegos de los 16 bits. Este estilo hace un guiño a la época de los 80 y los diferentes Beat em’ Up que salieron al mercado en esos años.

A parte de esta estética tan marcada que nos recuerda a títulos más antiguos, encontraremos pequeñas referencias que nos sacaran una sonrisilla y nos acercaran más aun a una ambientación ochentera que han conseguido transmitir sin ninguna duda.

Las diferentes zonas están muy bien divididas dentro del mapa y cada una tiene una estética muy marcada, que hacen que tengan mucha personalidad, durante el juego podrás ver un gimnasio, un restaurante o el barrio chino.

La música es el punto más flojo del título y aunque de entrada la banda sonora encaja perfectamente con la estética que tiene el juego, a la mínima que jugamos un par de horas nos daremos cuenta que excepto en los combates, la música es un bucle que a la larga se hace algo aburrida y repetitiva.

Jugabilidad

En cuanto a jugabilidad encontramos un título que es muy simple en cuanto a controles, únicamente tendremos que navegar por los diferentes menús para poder realizar las acciones necesarias en cada momento.

Por otro lado la interfaz encaja muy bien con la estética del juego y que ningún jugador tendrá problemas para desplazarse por ella al cabo de unos minutos, sin embargo hemos encontrado algo molesto, y es que si accedemos al mapa de la ciudad ya no hay manera de salir, tenemos que cambiar de ubicación o volver a hacer clic en la ubicación donde nos encontramos, algo que se hace algo raro cuando entras en el mapa por equivocación.

Al empezar el juego se nos deja escoger entre 3 dificultades (Súper fácil, normal y difícil) pero esta dificultad es poco visible, creemos que aunque no nos dieran a elegir estos niveles de dificultad el juego seguiría sintiéndose igual por la falta de interacción que tenemos en los combates.

Los combates son totalmente simulados, así que cuando nos toque luchar solo tendremos que ver como pasa el tiempo y nuestro personaje hace cada uno de los movimientos, eso si, las habilidades que nosotros escogemos al inicio de cada asalto que tendremos que ajustar para ajustarnos al contrincante. Cada uno de los combates tiene un numero de rondas asignadas que determinan la largada de cada uno de estos.

Conclusión

Punch Club es un juego que te pedirá siempre 5 minutos más porque querrás ver a tu personaje cada vez más y más fuerte, sin embargo a la larga se vuelve algo monótono y la banda sonora no ayuda a que te veas atrapado por el juego.

Por otro lado si os gusta esta estética y los juegos de gestión, no dudéis en darle una oportunidad porque os dará unas buenas horas de diversión.

Tenéis el juego en la eShop de switch por 14,99€ y tendréis que tener en vuestras consolas 331 MB para poder descargarlo.