[Artículo] La importancia de la inmersión en los videojuegos

La industria del videojuego nos ha sorprendido con las diferentes formas que ha adaptado a lo largo de los años, desde la reciente realidad virtual que todavía intenta encontrar maneras de ser accesible a una mayor población, hasta el fenómeno del juego competitivo que le da la bienvenida a todo el público como participantes o espectadores.

Nintendo Switch también le dio un nuevo enfoque a la industria, la idea de jugar lo que sea en donde sea, lo que suena increíble como concepto y parece estar dando buenos resultados en todo el mundo, si las ventas de unidades significan algo. Sin embargo, la plataforma ha sido juzgada tal y como su antecesora por la falta de poder técnico en comparación con sus competidoras.

La comunidad tiene tendencia a elegir una consola con potencia, no solo porque los juegos se ven mejor, sino también por la seguridad de que seguirán recibiendo lanzamientos durante suficientes años como para que valga la pena el dinero invertido en la plataforma. Esto se debe a que las desarrolladoras no suelen tener piedad con las consolas de bajo rendimiento; cuando quieren esforzarse en el aspecto técnico, normalmente eligen las plataformas a la altura de las exigencias, lo que limita el catálogo de juegos que estaría recibiendo Switch.

Pero la comunidad no es la única que pierde en esta situación. A pesar de que llevar un juego a otra plataforma involucra un gasto adicional, también significa un mercado completamente nuevo para un juego que de todas formas se tiene pensado hacer, lo que al final del día traerá ganancias a la empresa desarrolladora. Si esto es así, ¿entonces por qué no vemos juegos con mayores exigencias gráficas siendo portados o anunciados para Nintendo Switch?

Es una pregunta compleja que solo puede ser respondida con una explicación compleja de los muchos factores que intervienen en la decisión de desarrollar un juego o no en determinadas plataformas, que involucran desde el trabajo adicional que requiere hacer correr un título potente en una plataforma de gama media, hasta encuestas que revelan el interés del público en un determinado juego. Sin embargo, el punto más importante probablemente sea la inmersión del jugador.

Es verdad que gran parte de los fans de Nintendo no compran juegos basados en su calidad gráfica. De hecho, diferentes títulos a lo largo de los últimos años nos han demostrado que hay muchas formas de contar una buena historia, de emocionar al usuario y de disfrutar una experiencia en general, sin importar el género.

Llegados a este punto, también hay que tener en cuenta que así como hay juegos que fueron creados para entretener con divertidas aventuras y mecánicas de juego, otros son creados directamente para deslumbrar al jugador con explosiones y efectos visuales, y en esta clase de títulos, no se puede escatimar en especificaciones.

Ubisoft recientemente trabajó en el popular Mario + Rabbids Kingdom Battle, un juego que ha dejado a la compañía muy satisfecha en lo que se refiere a ventas, y la ha motivado a seguir desarrollando juegos para la plataforma. Todavía es muy temprano para decir qué otros proyectos tiene la productora francesa bajo la manga para Switch, pero es difícil pensar que, por ejemplo, un juego como The Division 2 llegue a una plataforma que no podrá mostrar sus elementos más llamativos, como los efectos especiales que saltan en pantalla durante los enfrentamientos. De hecho, la entrega original de The Division es una prueba de un título con una jugabilidad que busca entretener, mas no divertir, debido a que los desarrolladores pusieron todo su esfuerzo en crear una experiencia que atrape al jugador.

Montones de juegos en la industria moderna están pensados con la “inmersión” como idea principal; es decir, hacer que el jugador se sienta dentro del juego, poniendo toda su atención en éste por un determinado tiempo. No es una tarea que se consiga fácilmente, ya que no basta con efectos visuales bien trabajados para conseguir que el jugador se sienta inmerso dentro del juego; para esto hace falta una coherencia perfecta entre la ambientación, la banda sonora, el desarrollo de la trama, los efectos visuales, los efectos sonoros, la música, las mecánicas de juego, la interfaz de usuario y otros elementos relacionados. Esto sin mencionar que otros factores externos al título también pueden afectar a la inmersión del jugador, desde la calidad de los audífonos que se estén usando, hasta el estado de ánimo en el momento.

Es precisamente por esta razón que gran parte de los juegos que se centran en la inmersión del juego, es entretener, pero no precisamente divertir, como lo hacen otros juegos con menos calidad gráfica pero experiencias más agradables o satisfactorias; muchas veces se debe sacrificar un aspecto por el otro. Ninguno de estos juegos es más valioso por ello, solo están dirigidos a cumplir las diferentes necesidades de la comunidad, y es algo que los fans agradecen, aunque signifique dejar de ver algunos juegos en ciertas plataformas.

Si bien muchos de vosotros podréis ser fans de juegos como The Division o Beyond Good & Evil 2, es necesario tomar en cuenta que estos juegos podrían depender de su calidad visual, por lo que no tendría mucho sentido que se desarrolle una versión de estos juegos en la que se deba atacar el aspecto que probablemente más valor tiene para los creadores del título, afectando la experiencia general de los jugadores, aumentando el número de críticas y creando más jugadores inconformes.

Muchos gamers toman la inmersión como prioridad en la mayoría de sus aventuras, por lo que prefieren armarse con mejores mandos, sillas, pantallas, audífonos y por supuesto, consolas. Eso está perfectamente bien, porque crea una comunidad más diversa, y permite al mercado seguir recibiendo joyas de los videojuegos que continúan deslumbrando a cada generación con sus impresionantes innovaciones técnicas.

Por su parte, otros jugadores pueden sumergirse en cualquier juego sin importar las gráficas ni el periférico, y también debemos estar feliz por ellos, porque permiten a los desarrolladores crear títulos cómodos y muy divertidos invirtiendo en jugabilidad en lugar de cinemáticas, animaciones y un excesivo modelado. Gracias a todos, tenemos una industria de videojuegos que sigue menjorando y nos sorprende día a día.

¿Vosotros preferís la inmersión extrema, una diversión sin límites o una mezcla de ambos?