[Análisis] Guilt Battle Arena

Los redactores de esta página—y con redactores me refiero a solo varones; desde luego que animo a cualquier mujer a escribir sobre Mario y sus fruslerías aquí en Nintenderos— no paramos de publicar análisis a diario. Las distribuidoras de videojuegos nos reparten una copia digital o en físico de prácticamente todos los juegos que aparecen en la eShop de Nintendo Switch durante la semana, principalmente el jueves. Otra cosa no, pero debido a tanto trabajo de reseñar videojuegos, nos hemos vuelto unos expertos en la consola híbrida de Nintendo.

No sé si Alberto Millán, Psyko y compañía comparten esta opinión; yo, al menos, estoy enamorado con la máquina. Me asombra la capacidad de hacer que los juegos sean mejores solo por estar en un hardware constantemente portátil que, además, ofrece la posibilidad de jugar con tu círculo de amistades siempre. Escribí hace mucho tiempo ya este análisis de Astro Duel Deluxe —disponible en Nintendo Switch— y, al releerlo, me doy cuenta que tengo poco más que añadir para este análisis que lo que dije en aquel: que las propiedades de la máquina hacen mejor el juego de lo que es.

En aquel análisis decía que Astro Duel Deluxe era un minijuego del tipo que encontrábamos por internet. Guilt Battle Arena es un minijuego también. Y no me gusta la idea de desmerecer un juego por esta catalogación. Que sea pequeño no tiene nada que ver con que sea malo.

¿A qué me refiero con que sea pequeño? Fácil de responder: es corto, tiene poca profundidad, no requiere muchas partidas hacerse con el dominio de los controles y las mecánicas de juego, tiene pocas mecánicas de juego o modos. Algo más me habré dejado, pero creo que queda claro.

Este título de Invincible Cat hay que enmarcarlo en los juegos de lucha en 2D tipo Super Smash Bros., aunque no haya golpes cuerpo a cuerpo. Cuenta con una mecánica muy sencilla: hay que disparar al rival pero el juego solo da una bala al jugador para hacerlo. Si esta falla, este debe ir a buscarla en el suelo, completamente expuesto. Esto es la base.

Evidentemente, esto es muy poco. Por suerte, los desarrolladores dotaron el juego de algo más de profundidad sumando algunos modificadores en las partidas versus —el modo principal— y un modo historia co-op en los que ir disparando a oleadas de enemigos caricaturescos.

Los modificadores tienen una analogía clara con los que tiene el juego de lucha de Nintendo. Los hay de varios tipos: desde dotar de más munición a cada jugador, hasta un Jet-Pack o la invisibilidad del personaje que vaya perdiendo. Algunos hacen incompresible lo que acontece en la pantalla pequeña en la que se desarrolla la acción, especialmente mezclados. A los modificadores hay que sumar algunos modos para contabilizar puntos, desde tener vidas a capturar la bandera.

Por otro lado, no hay modificadores que afecten a un solo jugador para potenciar la estrategia. Algo como objetos que solo afecten al jugador que los coge y un más elaborado control sobre el personaje permitirían que el juego fuera a la vez más divertido y menos azaroso.

Esto es todo. Simplemente quiero recordar que encaja perfectamente en la filosofía Switch: el modo tabletop, con cuatro Joy-Con y listo para jugar anytime, anywhere, with anyone.

Conclusiones

Este título tiene un objetivo muy claro, y este es hacer que múltiples jugadores se reúnan para combatir en partidas rápidas en un alocado juego de lucha/disparos. Sin embargo, solo ofrece modos o variaciones sobre la base inicial para disfrutarlo durante una hora.

Guilt Battle Arena está disponible en la eShop de Nintendo Switch desde el pasado jueves 1 de marzo por 9,99 €. Textos en castellano. El tamaño de descarga es de algo más que 120 MB.