[Análisis] Syberia

Jugar a una aventura gráfica antigua (sobre todo si es en 3 dimensiones) puede hacer daño a los ojos, problema que no tienen clásicos atemporales como Monkey Island 2 o Day of the Tentacle (y os hablo de las versiones pixeladas, no de sus nuevas versiones), pues la estética píxel se lleva en los últimos tiempos (ayudada, en parte, por el lanzamiento del genial Thimbleweed Park).

Hace nada más y nada menos que 15 años, allá por 2002, Benoît Sokal creaba una aventura gráfica recordada con cariño por muchos amantes del género: Syberia. Con unos escenarios prerenderizados, y un control de personaje que recuerda un poco a los Resident Evil originales, nos poníamos en la piel de Kate Walker, una abogada neoyorquina que debía cerrar lo que parecía un sencillo acuerdo para adquirir una fábrica de autómatas.

En su momento, el título cosechó auténticas notazas, y fue un éxito, tanto para fans como para la crítica.

La pregunta que os estaréis haciendo es: “¿Ha envejecido bien? ¿Es un buen añadido al catálogo de Switch?”. Seguid leyendo si queréis enteraros.

Jugabilidad

Moveremos a Kate usando el stick derecho, el derecho o el pad direccional. Con el botón Y, abriremos nuestro inventario, en el que podremos comprobar los objetos que ya hemos encontrado. Con el botón X, veremos las tareas que tenemos que hacer, y con el botón A, interaccionaremos con los diferentes elementos del escenario. Si mantenemos pulsados ZL, ZR o R, Kate correrá, y con L, accederemos a nuestro teléfono móvil, con el que podremos llamar a varios números.

Con el botón +, accederemos al menú de pausa, y con el botón B, cancelaremos una acción.

El objetivo del juego es cumplir las diferentes tareas, siendo la primera conseguir firmar el acuerdo por la compra de la fábrica. Para cumplir dichas tareas, deberemos recoger objetos, usarlos cuando haga falta, hablar con los diferentes personajes que iremos encontrando y, en definitiva, interaccionar con el escenario.

Podría parecer que los controles del juego han quedado “anticuados” (recordemos que estamos hablando de un título de 2002), pero nada más lejos de la realidad, pues el trabajo de mapeado de botones para Nintendo Switch ha sido perfecto, y se sienten genial y muy fluidos. Los puzles del juego son muy buenos, y todo puede sacarse usando la lógica, si bien hay algunos más complicados que supondrán un reto incluso para los más veteranos del género. 

Gráficos y sonido

Para ser un juego de hace 15 años, se ha conservado sorprendentemente bien. El hecho de que sus escenarios sean prerenderizados y estén tan bien hechos hace que no se vean demasiado mal, y los diferentes personajes del juego cuentan con modelos más que decentes. Lo único que si que se nota “algo pasado de fecha” son las cinemáticas, aunque tampoco es algo especialmente grave.

Quizá uno de los aspectos en los que flaquee Syberia sea en sus menús de fuera del juego (es decir, el principal y el menú de pausa), bastante toscos y lentos. El juego permite jugarlo en su resolución original de 4:3, o una resolución de pantalla completa, que se adapta a la gran mayoría de monitores actuales, si bien deforma la imagen.

Su sonido es brillante, con algunos temas muy buenos que acompañan a la acción, y unos efectos de sonido sin fallos. Podemos controlar el nivel de audio (de voces, músicas, vídeos y efectos) en los menús, y el juego añade una opción más en su menú principal, bonus, en la que podremos ver diferentes bocetos del juego (se desbloquearán conforme avancemos en la historia y cumplamos ciertos requisitos).

El diseño de personajes sigue siendo una de las bazas más importantes de este título, con nombres que sonarán a los veteranos de la saga. Personajes como Óscar o Kate son un ejemplo claro de que hay grandes guionistas dentro del mundo de los videojuegos, pues su complejidad y riqueza sigue sorprendiendo a día de hoy.

Hay que destacar que Microïds, la desarrolladora original del juego, ha añadido más carga poligonal y resolución a los personajes, hecho que se nota si lo comparamos con la versión original de PC. Como colofón final, el juego viene completamente en castellano, tanto en sus textos como en el doblaje.

Duración

Completar este título te llevará unas 14-15 horas, más o menos. Debo decir que el juego no es demasiado rejugable, sin embargo, si nunca has jugado a esta obra de arte, disfrutarás de cada hora de juego, aunque tiene algunos detalles que lastran un poco la experiencia de juego, sobre todo la cantidad de paseos que hay que pegarse entre los distintos escenarios y que llegan a ser algo pesados para el jugador.

Su historia, eso si, queda fuera de toda discusión y es una de las mejores que se recuerdan en una aventura gráfica. Consigue atrapar desde que comienzas a darte cuenta de que la venta de la fábrica no será tan sencilla como pensamos en un primer momento.

Conclusión

Benoît Sokol hizo una de las mejores aventuras gráficas en tres dimensiones jamás creadas hace ya 15 años. Hoy, tenemos una versión más que decente para la nueva plataforma de Nintendo, versión que cuenta con una leve mejora gráfica y un control perfecto que se adapta perfectamente a Switch.

Si aún no has jugado a Syberia, esta es una oportunidad de oro para que conozcas la saga, pues si te gustan las aventuras gráficas, el título de atrapará en sus primeros compases y no lo soltarás hasta conocer el desenlace de su historia. La única pega que puedes tener al jugarlo en Switch es su precio, que puede asustar a más de uno.

Podéis encontrar Syberia en la eShop de Nintendo Switch a un precio de 29,99€ y necesitaréis un espacio libre de 1391,46 MB para poder descargarlo.