[Crónica] Juego de escape real Defensores de la Trifuerza en Barcelona
El domingo 2 julio tuvimos la enorme suerte de asistir al juego de escape real Defensores de la Trifuerza. Se trata de una propuesta muy interesante ambientada en el universo de The Legend of Zelda en la que tenemos que resolver una serie de pruebas de inteligencia, habilidad y coraje para lograr recuperar la Trifuerza y salvar el Reino de Hyrule.
El funcionamiento es muy sencillo y es similar a los famosos Escape Room que se están haciendo tan populares en todo el mundo. En este caso, todos los grupos que participan entran dentro de una carpa y ocupan una de las múltiples mesas. Pero no quiere decir que sea un juego estático. Pese a que la mayor parte del juego estaremos sentados, pensando la solución de los enigmas, también tendremos que movernos por todo el recinto para encontrar y recoger pistas y nueva información, como en cualquier Escape Room.
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Los héroes de la Trifuerza
Ángel, Marina, Ylenia y un servidor llegamos a la puerta del Poble Espanyol como cuatro fans de Zelda que se disponen a disfrutar de un juego que promete mucho. Todas las dudas y preguntas comienzan a surgir; ¿cómo lo organizarán? ¿Qué tendremos que hacer? ¿Cómo será el recinto? Y lo más importante, ¿lograremos completar el juego?
Una vez dentro las dudas se desvanecen y dejan paso a las sonrisas por lo detallado de la ambientación y los recuerdos que la música de ambiente despierta en nosotros. La magia, la curiosidad y el amor por una saga de nuestro pasado y presente se respira en el ambiente. Pero lo mejor, todavía está por llegar.
Empieza la historia, empieza el juego, empieza el reto. En este momento dejamos de ser meros fans para convertirnos en verdaderos héroes. Hay una serie de elementos en la organización del juego que están destinados exclusivamente a que creas que eres realmente un héroe de Hyrule.
Eso es precisamente lo que se consigue en esta experiencia única. No importa que entres como fan en busca de recuerdos, o como jugador ávido de diversión, cuando coges el ritmo del juego olvidas completamente que estás en una carpa, rodeado de equipos y que todo acaba en menos de una hora.
Varios de los participantes coincidíamos en que es realmente espectacular cómo pese a ser un juego que se monta y se desmonta el mismo día, la ambientación está muy trabajada y es de lo más curiosa. Obviamente no puede competir con la de juegos de escape que están instalados en un local, con mecanismos electrónicos, puesto que estamos hablando de un escape masivo e itinerante.
Desde el punto de vista de un escapista
Desde que probé los Escape Room hace poco más de un año, me he convertido en un adicto a este tipo de juegos. Siempre que puedo, reúno un equipo de cuatro personas y recorremos la distancia que haga falta para probar aquellos que mejores opiniones tienen. Por eso me gustaría dar una opinión personal de esta experiencia como jugador asiduo.
Además de la ambientación y el argumento del juego (que sin duda son importantes) lo esencial es la calidad de los enigmas. No pueden ser ni demasiado difíciles, ni demasiado fáciles. Si pecan de sencillo, acabas por salir con un «¿y ya está?» en la cabeza. Si son demasiado difíciles, la angustia por verte sin salida acaba por fastidiar la buena experiencia del juego.
Así que olvidemos por un momento la banda sonora de Zelda y los decorados para hablar de los juegos en sí. Los Defensores de la Trifuerza propone una serie de enigmas que son esencialmente divertidos de resolver. No son muy difíciles en su resolución, pero sí son muy interesantes porque requieren de la imaginación y la creatividad de los jugadores.
Además muchos de los equipos que han asistido se han formado mediante personas que no se conocían y este sistema de enigmas, da juego a muchísimas situaciones equívocas y divertidas que ayudan a relajar el ambiente. Sin ir más lejos, creo que nosotros hemos entrado como un equipo de cuatro fans desconocidos y hemos salido como un grupo de amigos. Es la magia de la Trifuerza
Por el momento SCRAP sólo tiene programado llevar el juego a Londres, París y Colonia. No sabemos si volveremos a verlos por nuestro país aunque ya nos han confesado que todo dependerá del éxito que coseche y de la rentabilidad del proyecto. Dado que más de una sesión ha llegado a completar el aforo, hay razones para tener esperanza en volver a ver a Defensores de la Trifuerza en nuestro país.