Splatoon 2: Ya disponible el séptimo y último capítulo de la historia de las Calamarciñas
Un día más, aquí os traemos un nuevo capítulo de la historia de las Calamarciñas después del último Splatfest para Splatoon 2. Tras el suspense que nos dejó el sexto capítulo, este sin duda también os resultará interesante.
Se trata del séptimo y último capítulo que publicará Nintendo. Os lo dejamos a continuación:
Tan pronto como pudo, Tina llegó al Distrito Pulpo. La choza del Capitán Jibión estaba completamente desierta. La cabaña en sí estaba intacta, pero la bola de nieve que había al lado de ella junto a un destrozado cacho de vidrio llenaba paisaje. Mar no se encontraba por ninguna parte y la escena no ofreció pistas. Con una punzada en el corazón, Tina regresó a Cromópolis.
La ciudad estaba llena de noticias increíbles. ¡El Gran Siluro había desaparecido! Había desaparecido una vez antes, pero reapareció poco después. La gente de la ciudad se consoló, diciendo: “¡Tranquilidad, tampoco tardará mucho en regresar!”
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Sólo Tina temblaba de miedo. – ¿Podría haber vuelto a hacerlo?
Tina decidió llegar al fondo de esto.
Pero si su adversario era quien ella sospechaba, este problema no tendría solución rápida y fácil. El Capitán Jibión no estaba para ayudarla esta vez. Su preocupación por Mar eclipsó todo y, en poco tiempo, los ciudadanos de Cromópolis comenzaron a notar la ausencia de Mar. Si Tina también desaparecía en un momento como este sólo aumentaría el caos. ¿Pero qué otra cosa podía hacer? No había otra opción que buscar ayuda y rápidamente.
Justo como el Capitán Jibión le había hecho antes, tendría que reclutar a alguien valiente para ayudar a investigar las profundidades de la base subterránea de los Octarianos. Sin embargo, gracias a su fama, Tina destacó como un tentáculo en Cromópolis. Tenía que mantener el mínimo el número de personas que sabían de la nueva amenaza. El secreto y la discreción eran, después de todo, de la mayor importancia cuando se trataba de operaciones de este tipo.
De repente, la conversación que había tenido con Mar en la Plazuela del Calamar le vino a la mente. Por todos era sabido que los Inklings más guays estaban en el césped de una nueva parte de la ciudad. Seguramente podría encontrar a alguien allí con la mezcla perfecta de talento y valentía que exigía esta atrevida tarea.
Había tenido una buena idea. Tina fijó sus vistas en el nuevo centro de la cultura de los Inklings más jóvenes: ¡la Inkopolis Square!
¿Qué os ha parecido? Podéis encontrar más los anteriores capítulos en este enlace.