[Análisis] NBA Playgrounds
Desarrollado por Saber Interactive, NBA Playgrounds es un arcade de baloncesto, donde impera la diversión por encima de todo. Con este título llegan los partidos callejeros a Nintendo Switch.
Es fácil recordar a NBA Jam en cuanto arranca el juego. A ciencia cierta, NBA Playgrounds bebe un poco de aquella filosofía, al igual que NBA Street, ya que existe un nicho de jugadores que disfrutan con este subgénero dentro de los juegos deportivos que se centran en la jugabilidad, el surrealismo y la imaginación por encima de la simulación.
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Lo primero que debemos decir, es que los partidos son 2 vs 2 y que cuenta con la licencia de la NBA. Esto es un punto importante ya que podemos seleccionar jugadores de diferentes equipos o épocas. Hay jugadores destacados actuales y jugadores legendarios. Todos ellos cuentan con sus diferentes características y un buen parecido conseguido al más puro estilo cartoon. Hasta este día, son un total de 150 jugadores repartidos entre unos 30 equipos diferentes de la NBA y aunque se echa en falta alguna que otra estrella por problemas de licencias, la cantidad se hace más que aceptable.
¿Te hace un partidito?
Como ya hemos dicho anteriormente, los partidos son enfrentamientos entre equipos formados por dos jugadores en canchas de baloncesto de barrio de diferentes ciudades del mundo, como Nueva York o Tokio. Al ser partidos callejeros, no os imaginéis grandes estadios ni un público entregado. Al contrario, en muchos de ellos solo hay un par de espectadores curiosos. Eso no impide que los escenarios no se hayan realizado con un gran cuidado, luciendo todo tipo de detalles dentro de la estética general. Y si casi no hay espectadores, mucho menos un árbitro. Por esa razón en NBA Playgrounds, sólo hay un par de reglas sencillas (12 segundos de posesión y 3 minutos por partido) por esa razón puedes empujar y golpear al contrario cuando te plazca aunque no esté en posesión del balón. Recordad este punto ya que nadie os va a pitar falta y os vendrá muy bien para las contras y remontar los partidos.
Por otro lado, en lo que respecta a modos de juego y personalización anda un poco escaso. El juego se centra en el modo torneo, en el que viajaremos a lo largo del mundo por diferentes copas donde tenemos que cumplir unos objetivos para conseguir el oro. La dificultad va en una progresión un tanto extrema, ya que los primeros partidos nos resultarán muy fáciles a diferencia de los últimos que serán realmente complicados.
A medida que jugamos, vamos ganando puntos de experiencia y vamos subiendo de nivel a nuestros jugadores. Esto nos da la posibilidad de ganar más «sobres de cromos» donde encontraremos 5 jugadores nuevos en cada uno de ellos y así iremos desbloqueando a los 150 que existen actualmente. Una vez se sumen a nuestra colección, podemos elegirlos para nuestros equipos y aumentar sus habilidades y movimientos.
Cabe decir que hay diferentes categorías de jugadores. Las posibilidades de que nos toque cierto jugador son aleatorias dentro de las categorías que existen. Los sobres plateados son los más habituales y desbloquean a una buena parte de los jugadores. En cambio, los sobres oro nos otorgan jugadores de la historia de la NBA, los cuales muchos de ellos ya están retirados.
El modo exhibición nos permite jugar hasta con cuatro amigos y personalizar limitadamente los partidos. Podemos elegir su duración, dificultad o un máximo de puntuación. Saber Interactive podía haber dado mayores opciones de personalización en este aspecto. Eso no desviste la posibilidad de jugar hasta con cuatro amigos en modo local en nuestra Nintendo Switch, posiblemente la mejor opción dentro de este título.
Con respecto a las opciones online, como torneos o partido en línea, aún tenemos que esperar a la actualización para poder disfrutar de estos modos en la plataforma de Nintendo. La propia desarrolladora lanzó un comunicado diciendo que estaría disponible la actualización pocos días después del lanzamiento para Switch y más tarde se implementarían los torneos en línea para todas las plataformas incluída la de Nintendo.
Jugabilidad e inteligencia artificial
Lo más llamativo de NBA Playgrounds son sus espectaculares movimientos, con mates que nos cortarán el hipo, llenos de efectos de luz que dejarán la canasta tiritando en más de una ocasión. El HUD cuenta con dos barras, una a los pies del personaje y otra arriba en la pantalla.
La primera de ella mide el esfuerzo del jugador. Cuanto más corra o realice movimientos especiales, gastará parte de la barra. Una vez agotada, el personaje quedará exhausto, teniendo que esperar unos segundos a que se recupere. El Joy-Con vibrará para avisarnos de que ese jugador a llegado a su límite. Esto aporta un toque de estrategia a la hora de tomar un papel defensivo.
La segunda barra se irá llenando a medida que vamos haciendo bloqueos, mates o anotando puntos. Una vez completa, pasarán diferentes opciones a modo de power-ups que nos darán cierta ventaja momentánea en el partido. Son muy variadas y su aparición es completamente aleatoria. Por eso es importante familiarizarnos con ellas rápidamente ya que habrá partidos en los que dependamos de estas habilidades, sobre todo en los niveles más difíciles.
Con respecto a las animaciones y a las físicas, no se busca con ellas la naturalidad de movimiento como podemos esperar. Más bien los jugadores parecen incluso «flotar» en lugar de correr por la cancha, pero este punto no ensombrece el título, ya que intenta alejarse del realismo para ofrecer una experiencia diferente de juego. Lo que si resta jugabilidad es la inteligencia artificial durante los partidos. En los niveles más fáciles, los contrarios no fuerzan ir a la contra y en muchas ocasiones, puedes ver como el balón les pasa por delante y no intentan cogerlo. En cambio, en los niveles más elevados, los contrarios se convierten en «armas mortales» de sumar puntos y puede resultar incluso frustrante para el jugador.
Conclusiones
NBA Playgrounds es un juego con poco contenido, limitado en opciones de juego y con un arco de aprendizaje algo exigente. A nivel gráfico es bonito y las melodías acompañan bien a la acción durante el juego. Si eres muy aficionado al basket y te apetece jugar con tus amigos en cualquier lugar, NBA Playgrounds es la única opción que tienes en el actual catálogo de Nintendo Switch, hasta la llegada de NBA 2K18. Aunque eso sí, tenéis que tener en mente que son títulos completamente diferentes que buscan experiencias de juego muy alejadas la una de la otra, por lo que realmente no son comparables. Además, su precio (19,99€/19,99$) lo hace más llamativo para la gente que disfruta de una partida arcade o jugaron en su día a NBA Jam.