[Análisis] Dragon Ball Fusions

Los amantes del rol japonés tienen nueva cita con un videojuego que moderniza este género legendario. Dragon Ball Fusions salió en España el 17 de febrero y las críticas que ha recibido en los medios sobre videojuegos de todo el mundo han sido más que aceptables. En este análisis veremos qué tiene de innovador esta nueva entrega de un videojuego de la saga que marcó la infancia de tantas generaciones de jóvenes (y no tan jóvenes también). Como anticipo a lo que ampliaremos en el cuerpo del artículo diremos que la novedad respecto a otros juegos de rol es un sistema de combate que encaja perfectamente con los combates de la saga original (en manga o anime): son dinámicos, juegan con el espacio (los luchadores no tienen un sitio fijo en el campo de batalla) e incluyen algunos elementos de los juegos de lucha de Dragon Ball. Los detalles de este sistema de combate y otros aspectos los podréis conocer si continuáis leyendo.

Nueva historia que sabe a vieja

La historia de esta entrega de un videojuego de la saga Dragon Ball no es la del anime o el manga, sino una nueva. En esta, nuestro protagonista Tekka y su amigo/rival Pinich quieren alcanzar el título de mejor luchador del universo. La travesía para conseguir esta meta pasará en un espacio intertemporal en el que se organiza un torneo de artes marciales, todo creado por el Dragón Shenron, en el que se recrearán los escenarios que han formado la saga: desde los lugares de la tierra más comunes a casi todos los planetas que han ido apareciendo. Es por eso que, aunque sea una historia nueva, no deja de ser un nuevo planteamiento a lo que ya conocíamos. Personajes míticos se sumarán a muchos nuevos para enriquecer la sensación de que realmente estamos combatiendo para ser los mejores luchadores del planeta.

Antes de conseguirlo, hay mucho entrenamiento que hacer. Examinemos la progresión de la historia palmo a palmo. Volvamos a Tekka. Este es un personaje personalizado a nuestro gusto. Por supuesto, el nombre y el sexo lo decidimos nosotros. Además, podremos escoger entre 5 especies distintas de luchadores, con sus distintas características de combate. Más adelante explicaremos cómo se encaja la personalización en 5 especies. Una vez personalizado nuestro protagonista, comienza la historia.

Como ya hemos dicho, Shenron nos lleva a un universo paralelo en el que se juntan todos los combatientes de todos los lugares y todas las épocas de Dragon Ball. Pronto descubriremos que los combates en este torneo son de 5 vs. 5, y deberemos formar un equipo. El equipo principal y que protagonizará la narración de la historia estará formado por Trunks, Son Goten, Goku niño y Pan. Sin embargo, para formar nuestro equipo habrá que convencer a muchos otros combatientes de que se unan a nosotros.

Bulma nos ayudará a emprender nuestro viaje regalándonos a Ziku, un aparato animado con forma de DS en el que podremos ver nuestros objetivos, el mapa, organizar nuestro equipo, etc. En él tendremos la información necesaria para entender el rico mundo de Dragon Ball Fusions. Miles son los personajes que se juntan en esta aventura. Para avanzar en ella habrá que ir almacenando nuevos luchadores de cada tipo. Cada uno da un tipo de energía distinta, a saber:

• Terrícolas. Dan energía azul.
• Saiyans. Dan energía roja.
• Namekianos. Dan energía verde.
• Foráneos. Dan energía amarilla.
• Alienígenas. Dan energía morada.

Con este inteligente uso de las energías que otorgan los personajes el diseñador obliga al jugador a aprender todos los detalles del combate. Justamente de este punto hablaremos a continuación.

Estrategia y lucha en un sistema de combate por turnos

Como hemos anticipado, el combate en Dragon Ball Fusions se basa en el del clásico JRPG por turnos, aunque incorpora novedades sustanciales que cualquier amante del género debería probar. Estas mecánicas están en relación con la saga en la que se basa el juego, por lo que también encontramos lógico que un amante de la serie o los juegos de acción de la saga quieran probarlo. Así pues, ¿qué novedades incorpora?

• Espacio de combate. El espacio en el que se combate suele ser circular y con profundidad. Los personajes podrán desplazarse por el campo de batalla para golpear cuerpo a cuerpo a los oponentes o disparar movimientos Ki desde donde nos convenga mejor. ¿Qué se consigue con esta situación de combate? El resultado es un combate dinámico y estratégico que se complementa con los otros elementos que mencionamos a continuación.
• Sistema de turnos por velocidad. Como algunos otros juegos de rol, los turnos los vemos dispuestos en una línea en la parte inferior de la pantalla. En esta se puede saber quién es el siguiente en combatir. Los personajes más veloces tendrán prioridad. Hay que advertir que ciertos ataques o habilidades demorarán a los combatientes, así como una inteligentísima función de «salir del ring», de la que hablamos en el siguiente punto.
• Colisión entre personajes y salida del ring. Los personajes salen impulsados después de ser golpeados. Si golpeamos a un enemigo en el borde del círculo del campo de batalla, este saldrá del ring y volverá a la cola en la línea de los turnos. Si golpeamos hacia otros personajes, ya sean nuestros o del rival, habrá carambolas con golpes que se sumarán al daño final.
• Sistema de piedra, papel y tijera. Habrá combatientes poderosos, equilibrados y veloces. Los primeros aumentarán su ataque contra los segundos; los segundos, contra los terceros y estos, contra los primeros.
• Ataque Zenkai y Fusión Ultra. Estos dos ataques están disponibles si llenamos un medidor de combate. En ambos entraremos en un combate de acción propio de un juego de lucha de Dragon Ball. Será un fragmento muy corto de lucha muy bien implementado. En ambos casos el daño causado será grande.

A todo esto habrá que añadir un sinfín de movimientos característicos de cada personaje, desde ataques c. a c., ataques con Ki o movimientos de ayuda. La complejidad de estos combates se hará notable a medida que avancemos en la historia tanto en su vertiente principal como secundaria. Importante señalar que el espacio de la batalla y el número de los combatientes puede cambiar en algunos combates, hecho que da más versatilidad al título.

Elige una fusión: ¿Goku y Picolo? ¿Krilín y A18? Todo un reto a niveles artísticos

Las fusiones son el alma de este videojuego. De hecho, se nota como el diseño de este gira en torno a la idea principal de conseguir fusiones que todos los fans hubiésemos deseado ver en la saga. El juego tiene un componente de «hazte con todos» propio de la saga Pokémon. Así que, una vez conseguidos los personajes, podremos crear nuevos mediante fusiones EX.

En términos de jugabilidad, las fusiones dan mucha más profundidad al carácter de personalización de nuestra plantilla: podemos hacer nuestro ejército a medida, mezclando los personajes para conseguir los luchadores fusionados que nos interesan.

En términos de diseño artístico, nos encontramos delante de un juego que ha solucionado un problema de una manera muy eficiente. Todos los rasgos de los personajes creados por Akira Toriyama están dispuestos en un sinfín de luchadores que, además, hay que fusionar los unos con los otros. El diseño de las partes es tan bueno que los dibujos que resultan de cualquier combinación son escrupulosamente coherentes con el arte de la saga. ¡Todo un acierto! Aunque, claro está, el fan solo querrá jugar con sus personajes míticos y reprobará hacer combinaciones con nuevos personajes inventados para la ocasión.

Contenido secundario: otras misiones, juego online, etc.

Así como la historia principal tiene un carácter más épico, el humor más característico lo encontraremos en las misiones secundarias. Nos encontraremos personajes icónicos que nos recordarán su papel en la saga: desentonar entre tanta seriedad. Sin ánimo de suponer un spoiler, remarcamos una pequeña misión secundaria en la que habrá que recuperar unas braguitas que Oolong habría robado a una luchadora. De todos modos, habrá de todo: misiones con historias paralelas, algunas con retos de vuelo, de abrir portales tridimensionales, de jugar al pilla a pilla, etc. Sirven como apoyo constante a la historia principal. Además, las misiones secundarias nos recompensarán con experiencia, nuevos personajes, objetos, habilidades, preguntas sobre la serie, etc.

Dragon Ball Fusions cuenta con contenido online. La base de este contenido es el entrenamiento con gente de todo el mundo y, sobre todo, la posibilidad de intercambiar personajes y movimientos que toma mucho tiempo encontrar en el juego. Claro está, este añadido aumenta la duración del título mucho más. por lo que es un elemento positivo a tener en cuenta.

Así pues, entre el contenido principal y secundario, hay que constatar que Dragon Ball Fusion tiene una duración más que decente en su historia principal que, además, se nutre de un componente online que todavía lo alarga más. Estamos hablando de 20 horas de historia principal que, para alguien que lo quiera completar, añadiendo a todos los personajes y completando las misiones secundarias, pueden llegar a ser más de 50.

El sonido acompaña

El tema principal del juego tiene relación directa con la melodía de la saga GT. Sin embargo, dentro del título escucharemos melodías que nos recordarán muchos puntos de la serie. Es una herramienta nostálgica, como no podía ser de otro modo. En términos de calidad, es más que correcta. Una eficiente elaboración musical que nos pone en situación Bola de Dragón.

Conclusiones

Nos encontramos ante un título que mezcla con maestría el rol por turnos y Dragon Ball, sobre todo teniendo en cuenta que incorpora estrategia y lucha en el sistema de combate. Es por esto que los amantes del rol verán en este juego un motivo excelente para jugarlo. Además, incluye un sinfín de personajes que poder fusionar e historias clásicas reelaboradas para que los amantes de la saga tengan un motivo de peso para hacerse con el título.

No obstante, adolece de la repetición en los combates propia del JRPG por turnos. Las nuevas mecánicas más estratégicas puede que no sean suficientes para ser del agrado del público menos paciente. Además, la historia no es para nada comparable al manga, pese a contener tintes de humor clásicos.