[Análisis] ‘Mi osito y yo

¿Quién no ha tenido nunca un oso de peluche?nbsp;Estoy completamente seguro de que la mayoría de nosotros, en nuestra infancia por lo menos, hemos tenido algún esponjoso osito de peluche.

Esta vez nos toca modernizarnos un poco, ya que un oso de peluche se cuela en nuestra consola portátil para que tengamos que cuidarlo. Para ello, tendremos que hacer una serie de simples tareas cotidianas como; preparar la comida, darle de comer, acariciarle, hablar con él, plantar semillas en el jardín…

Por supuesto, este juego está desarrollado para los más pequeños de la casa, aunque si os gustan este tipo de juegos «kawaii» (parecidos a Nintendogs), no dudéis en echarle un vistazo. Puede que os cautive como a mucha gente ha hecho.

Desarrollado a manos de Arika y distribuido por Bandai Namco, nos llega este inocente título para Nintendo 3DS al que damos paso con este análisis.

Un paquete de camino

Un día cualquiera, llaman a la puerta de nuestra casa. Es el cartero, y por lo que se ve trae un paquete enorme. Lo abrimos y de él aparece un oso con vida propia. Aquí es donde comienza Mi osito y yo o Teddy Together en inglés. Lo primero es darle nombre a nuestro nuevo amigo parlanchín. Al no tener género, podemos decidir si es chico o chica. Nuestro oso no recuerda absolutamente nada; sabe hablar pero no tiene recuerdos desde antes de que abriéramos su caja. Como dato curioso, el oso nos hablará con una voz parecida a las de Tomodachi Life, voz que no llega a encajarle del todo. Por suerte, podemos silenciarlo completamente desde el apartado de ajustes.

No lo piensa dos veces y se instala en nuestra casa a vivir. Ahora nos toca a nosotros; tenemos que cuidar de nuestro compañero como a uno más de la familia. Cabe destacar que es un oso con mucha personalidad; si algo le gusta te lo dirá y si no le gusta, también. Por desgracia, no encuentra más ositos vivos como él y se entristece al creer que va a estar solo para siempre, cosa que provoca mucha ternura. Pero, ¿qué mejor que nosotros para animarle y sacarle una sonrisa?

El juego se basa en completar acciones y llenar el corazón del oso para así, al llenarlo 10 veces subir de nivel. Hay muchos tipos de acciones que más adelante detallaremos. Por cada vez que llenemos un corazón, éste nos hará una pregunta relacionada con nuestra vida. Literalmente, nos puede preguntar cualquier cosa; dónde vivimos, cantante favorito, dónde estudiamos, el nombre de nuestros padres, dibujo animado favorito, comida preferida… Recomendamos no dar muchos detalles en estas respuestas, pues nunca se sabe adónde o a quién pueden llegar. También, otro aspecto a tener en cuenta, es que nuestro osito nos hablará con las respuestas que le dimos previamente. Es decir, si elegimos a «Katy Perry» como cantante favorita, y «jugar videojuegos» como pasatiempo, no parará de decirnos que se muere de ganar por jugar a videojuegos con Katy Perry y muchas más respuestas del estilo.

Cuidando de nuestro oso

En el menú principal contamos con 6 opciones básicas para cuidar perfectamente de nuestro nuevo compañero.

La primera; el baño. En esta estancia de la casa bañaremos a nuestro oso. Para ello, con ayuda del lápiz táctil frotaremos con una esponja al osito. Es muy importante mantener limpio al oso, ya que de lo contrario no se llenará del todo el corazón.

La segunda estancia; la cocina al igual que el baño, es importante. Si nuestro oso tiene hambre no podremos llenar el corazón y optar por responder una pregunta. En la cocina prepararemos todo tipo de comidas; desde tortillas y hamburguesas hasta estofados de ternera. Aunque al principio tengamos muy pocos platos a nuestra disposición, mientras más vayamos cocinando más recetas iremos desbloqueando. Las animaciones que acompañan a la preparación de los platos son buenísimas; comidas muy bien desarrolladas; ninguna se cocina igual que otra. El táctil a veces puede fallar un poco; hay que pillarle el truco a la cocina y ser bastante precisos.

El tercer lugar de la casa es el armario. Aquí podremos cambiar de ropa al osito, e incluso de color. La ropa es tanto de chico como de chica, por el motivo de que nuestro oso no tiene género. Echamos en falta alguna personalización más, como el tono de voz, los ojos, la forma…

La cuarta opción es el barrio. Al salir de casa tendremos tres lugares disponibles: las tiendas (que son tres), la estación y el jardín. No os preocupéis si tenéis únicamente dos, el tercero lo desbloquearéis jugando. En las tiendas podremos visitar Chuchelandia, la tienda de piruletas. Limitadas a la compra de 3 piruletas diarias, harán muy feliz a nuestro oso y llenarán muy rápido su corazón. La tienda de moda Peluchic tiene a nuestra disposición una enorme cantidad de ropa. Hay ropa diferente para el torso, piernas, cabeza, pies, cuello y orejas. Además, hay ropa limitada que únicamente la conseguiremos acudiendo cada mes. Por último, terminando con las tiendas, tenemos la floristería Florosa. Aquí compraremos las semillas para cultivar en nuestro jardín. Y es que, el segundo lugar del barrio es el jardín. En este minimalista jardín de 9 parterres sembraremos las semillas. En cada parterre se pueden colocar hasta 3 semillas, por lo que si las mezclamos conseguiremos flores más raras. Para terminar con el barrio tenemos la estación. Si vestimos a nuestro oso de un tema completo, podremos viajar a ese lugar. Por ejemplo; si lo vestimos de vaquero iremos al salvaje oeste de excursión.

El quinto lugar corresponde a la opción hablar. Aquí podremos acariciar a nuestro oso, hablar con él e incluso darle las piruletas que hayamos comprado en el barrio. Esta es una forma rápida de llenar el corazón, ya que el osito adora hablar.

Por último, tenemos la opción cuadernos. Dentro de ésta se encuentran las notas y los recuerdos. En las notas podremos ver el estado de nuestro oso; si tiene hambre o no, su felicidad… También quedarán registradas las colecciones de objetos que hayamos conseguido hasta el momento, e incluso las respuestas que le dimos cuando llenamos su corazón, donde podremos cambiarlas si nos equivocamos en algo. En los recuerdos quedarán guardados los vídeos y las fotos de los lugares que visitemos desde la estación.

Conclusión final

Mi osito y yo ha llegado para ser adorado por los más pequeños… y los no tan pequeños. Dentro del género, es muy innovador que un oso de peluche cobre vida y se haga nuestro «compi» de la noche a la mañana. En resumen; este simulador ha dado el primer paso con mucha fuerza.

Yéndonos al apartado técnico, los gráficos son bonitos y coloridos; perfectamente acertados con la temática del videojuego. En el apartado de la música, aunque no haya demasiada variedad no se hace ni repetitiva ni molesta. El oso viene con una voz un tanto desentonada; probablemente no agrade a muchos jugadores, aunque siempre está la opción de desactivarla. La jugabilidad es muy extensa; hay una gran cantidad de recetas, ropa, la opción de sembrar y cultivar nuestras plantas, los viajes de la estación… La duración no será un problema; conseguir todos los objetos os llevará muchas horas. Además, al subir únicamente un nivel por día, el juego nos animará a jugarlo a diario.

Algo a destacar también, es la compatibilidad con amiibo. Todos los amiibo son compatibles, los cuales te darán puntos para conseguir colores nuevos con los que pintar al oso.

En conclusión, si estáis buscando un juego muy adorable, o simplemente queréis regalárselo a algún familiar o amigo vuestro, estáis ante el título perfecto. Es divertido, dulce y además… ¡Es un oso que habla!