Análisis Nintendo 3DS

[Análisis] ‘Monster Hunter Generations’

Tras un descanso en el que guardamos nuestras armas, una nueva temporada de caza se inicia de la mano de Monster Hunter Generations. Después de experimentar durante horas su frenética experiencia hasta quedarnos sin aliento, podemos asegurar sin miedo que nos encontramos ante la entrega más colosal que nos haya ofrecido la franquicia. Decenas de monstruos, multitud de estrategias o la adrenalina de la caza son algunos de los elementos que aderezan este título, el cual se consagra como una de las grandes apuestas para el presente año en Nintendo 3DS, así un como gran exponente del catálogo de la portátil.

Con cuantiosos trofeos a nuestras espaldas, os desgranamos las virtudes  y grandes atractivos que os llevarán centenares de horas en una excitante experiencia a lo largo de Monster Hunter Generations. Prended vuestras armas, comienza la temporada de caza.

Músculo técnico

Uno de los principales atractivos de los que siempre ha gozado la franquicia es la recreación y belleza de sus variados entornos. Lejos de quedarse atrás, Generations nos ofrecerá una amplia paleta de ecosistemas, los cuales derrochan multitud de detalles, pareciendo que nos invaden en cada una de las cacerías que iniciamos. Y es que el entorno es uno de los grandes protagonistas que encontramos en el título. Recogiendo algunos de los presentes en anteriores entregas y sumando nuevas incorporaciones, alcanzamos la friolera de 21 localizaciones diferentes, lo que se traduce en un vasto ecosistema que, además de proporcionarnos decenas de monstruos, también nos brindarán diversas condiciones y adversidades a las que tendremos que enfrentarnos, tales como climas extremos que afectarán a nuestra resistencia.

Podremos movernos libremente por embarradas ciénagas, frondosos bosques o vertiginosas cumbres, demostrando un amplio abanico de lugares donde incluso los sectores que los componen se diferenciarán notablemente entre ellos, ofreciendo zonas con climas diferentes o una vegetación e iluminación muy diferenciados. A su vez, gozarán de un ciclo día-noche que, sin ser dinámico (el momento del día viene determinado en cada misión), afectará, por ejemplo, en la visibilidad que podamos tener a la hora de cazar. Es aquí donde el motor gráfico demuestra gran parte de su potencial, dejando hermosas estampas que nos sorprenderán gratamente, destacando un efectista juego de luces, con ejemplos como rayos de sol filtrándose por los frondosos árboles de un bosque tropical o el reflejo en las cristalinas aguas de un lago, además de citar una elevada tasa de partículas en pantalla que mantiene con fluidez el motor gráfico.

Sin embargo, podemos pensar que este motor puede pecar de conservador o desfasado, siendo heredado de la anterior entrega. Completamente equivocados estábamos al creer que esto lastraría la experiencia. La renovación que ha experimentado el mismo ha dotado de un portentoso apartado técnico a Generations. Con una fluidez pasmosa, incluso con el efecto 3D activado, el juego corre a unos cercanos 60fps, mostrando ligeras caídas en los momentos más frenéticos. Estos resultados serán más evidentes para los poseedores de una New Nintendo 3DS, los cuales son agraciados con una mayor estabilidad o tiempos de carga en ocasiones ridículos al pasar de una zona a otra. El espectacular apartado gráfico del que goza esta entrega la convierte en uno de los pocos títulos de la portátil que consigue explotar al máximo la consola, obteniendo un resultado prácticamente redondo. El apartado sonoro corona una vertiente audiovisual de matrícula, donde los muchos efectos de sonido, entre los que encontramos aquellos protagonizados por el entorno, su reacción ante nuestras acciones, así como los alaridos de los monstruos; consiguen un notable grado de inmersión en cuanto a experiencia.

Aspecto negativo es el más que familiar popping y clipping que nos lleva acompañando desde las anteriores entregas. El popping que hemos experimentado no es escandaloso, donde el número de elementos que aparece súbitamente en pantalla es bajo, dado especialmente cuando surgen monstruos conforme vamos avanzando. Más molesto es el clipping, la posibilidad de poder atravesar ciertos elementos. Continúa el atravesar a los monstruos cuando están muertos, así como ciertos elementos del escenario susceptibles a sufrirlo. Este último es el más incómodo, resultando confuso atravesar monstruos con facilidad que, aunque sea común tras entregas sufriéndolo, es perfectamente corregible o, al menos, minimizable.

Destreza a los mandos

Por muchos es sabido que Monster Hunter es difícil de dominar. En Generations nos encontramos con una entrega más accesible que de costumbre, facilitando la entrada en la saga por parte de nuevos jugadores demostrando un sencillo aprendizaje para nuevas incorporaciones. Sin embargo, estas facilidades no restarán encanto por parte de aquellos que prefieren una más experiencia más desafiante. De esta forma, esta entrega se consagra como una gran oportunidad para adentrarse en la franquicia.

Al igual que el nivel de desafío se mantendrá intacto, también lo harán sus controles, sencillos pero con gran trasfondo. Podremos realizar dos tipos de ataques: débil y fuerte, depositados en los botones «Y» y «A» respectivamente. El encadenarlos correctamente nos permitirá realizar eficaces combos. El tipo de arma que escojamos influirá notablemente, ya que no serán iguales los combos entre armas, los cuales podremos consultar en el menú. Por otra parte, cada tipo de arma dispone de habilidades exclusivas, las cuales se activarán con el botón «R». Así, mientras que las espadas dobles nos permitirán activar un modo que nos convierta en un sanguinario cazador encadenando aterradores golpes, el hacha espada podrá alternar entre sus dos formas disponibles. Junto a los movimientos ofensivos, las esquivas completarán un sistema de combate simple pero profundo.

Estos movimientos variarán en gran medida en función de uno de los cuatro estilos de combate que escojamos, una de las grandes novedades jugables que incorpora Generations. Estos estilos (Gremio, Ariete, Aéreo y Sombra) nos invitarán a tomar diferentes posiciones y afrontar diversas estrategias. Así, mientras que el estilo Gremio nos propone un juego más equilibrado arrastrado de anteriores entregas, el Ariete posee una mayor faceta ofensiva. Los más espectaculares y difíciles de dominar son el Aéreo y el Sombra. Estos se centran más en la movilidad de nuestro personaje, proporcionándole nuevas habilidades efectivas a la par que sorprendentes. De esta forma, el estilo Aéreo nos permitirá saltar sobre los monstruos, cayendo en picado sobre ellos además de recompensarnos con una mayor posibilidad para montarlos. Por otra parte, el estilo Sombra es más defensivo. Siendo el más complejo, idóneo para jugadores avanzados, si esquivamos en el momento justo se desencadenará un poderoso contraataque que dependerá del arma que portemos.

Estos cuatro estilos diferentes son aderezados por las Técnicas de Caza, otra de las novedades a nivel jugable que incorpora Generations. Estos devastadores movimientos nos podrán facilitar la cacería, siendo importante el saber combinarlos y racionarlos ya que cuentan con un tiempo de recarga, diferente en función de la técnica escogida. Nos encontramos con efectivos ataques, así como movimientos evasivos o que nos brindarán ciertas ventajas en combate, como una mayor velocidad de ataque o resistencia a los golpes. Cada uno de ellos ocupará un slot o espacio en el menú, mencionando que, en función del estilo que escojamos, podremos portar más o menos técnicas, con un máximo de tres diferentes. Técnicas y estilos añaden nuevas capas de profundidad al veterano sistema de combate, un soplo fresco que multiplicará las formas en las que podremos encarar cada una de las cacerías.

Estas técnicas, así como la bolsa, el mapeado, la cámara y demás, los podremos manejar desde la pantalla táctil, optando entre dos versiones diferentes que podremos alternar libremente. Cabe mencionar la cámara, la cual reacciona bien ante el frenetismo del combate. Se podrá manejar desde el panel táctil o con el botón deslizante Pro además de centrarla en el personaje, amén del C-Stick de New Nintendo 3DS que facilita en gran medida su control. Sin embargo, en ciertas ocasiones reacciona de forma brusca, perdiendo el objetivo o enfocando con dificultad al personaje, aunque en conjunto responde bien ante nuestras órdenes, siendo esto necesario para no dificultar la partida. Un menú de acceso rápido concluye con las principales herramientas jugables, el cual nos permitirá acceder a provisiones y potenciadores, siendo éstos necesarios para sobrevivir y tener posibilidades en la caza.

Armado hasta los dientes

Un cazador no es nadie sin un buen arsenal. Generations nos proporciona una cantidad ingente de armas y armaduras como nos acostumbra la saga. De esta forma, la personalización posee un papel importante, teniendo completa libertad a la hora de configurar a nuestro héroe.

El arsenal de armas promete expandirse. Con nuevos materiales, el herrero se ha puesto manos a la obra para desarrollar nuevas y poderosas armas, las cuales poseerán cualidades bien diferenciadas. Se distinguirán como nos acostumbran, fundamentándose cada arma en ciertas cualidades comunes (poder, probabilidad de críticos, afilado) así como otras exclusivas en algunas clases. Encontramos entonces una amplia variedad entre cada uno de los tipos, con un total de 14 clases diferentes divididas en dos subclases: 11 de espadachín y 3 de artillero. Estas clases son arrastradas en su totalidad de Monster Hunter 4 Ultimate, sin presentar la incursión de ningún tipo nuevo a favor de revitalizar el número de existencias en cada uno de ellos. Esto puede invitarnos a pensar que la falta de nuevos tipos restarán novedad respecto a la anterior entrega, aunque los estilos de combate promueven nuevos usos, otorgando dimensiones nuevas a cada arma de forma exitosa. A su vez, podremos subirlas de nivel aumentando así su poder, además de mencionar que en ciertos niveles podremos transformar un arma dada en otra completamente distinta si disponemos de los materiales necesarios.

Las armaduras tampoco sufren cambios. Conservan las cualidades de anteriores entregas, así como una división en cinco partes diferentes que podremos conjuntar a nuestro gusto. Estas armaduras nos premiarán con resistencias a ciertos elementos, así como pueden sufrir debilidades a cambio de estas fortalezas. También contarán con la posibilidad de incorporar adornos. Una vez confeccionados estos adornos, podremos incorporarlos a nuestras armaduras, las cuales tendrán un número limitado de huecos donde ponerlos, para recibir bonificaciones de habilidad que se sumarán a las predeterminadas en cada pieza. De esta forma, podremos construir un equipo más versátil que se ajuste a un mayor número de situaciones. Al igual que con las armas, también pueden subir de nivel, incrementando así sus puntos de defensa.

Las mencionadas habilidades juegan un papel importante en la personalización del personaje. Éstas las podemos encontrar en armas y armaduras, las cuales se activarán al conseguir el conjunto completo. El abanico es amplio, contando con habilidades destinadas a potenciar ciertos puntos como el ataque o la defensa, mientras que podemos distinguir otras dadas a labores como la recogida de recursos o una mayor duración del afilado del arma. Por otra parte, los adornos previamente mencionados también nos permitirán ampliar el abanico de habilidades a disponer aunque de forma diferente. Éstos nos proporcionarán puntos de habilidad, los cuales si suman una cantidad determinada activarán la habilidad que representan. Acompañándoles encontramos los talismanes. Estos objetos forman parte del equipo del cazador junto la armadura, por lo que únicamente podremos tener uno activo. A diferencia de los adornos, podremos combinarlos, lo que resultará en otros más efectivos o con varias habilidades.

La cacería no puede comenzar sin armadura, pero menos aún sin unos suministros. A nuestra disposición encontraremos infinidad de objetos que podemos obtener del escenario, los cuales nos permitirán confeccionar desde recursos para sobrevivir hasta munición para ciertas armas. Cualquier elemento distinguible nos premiará con estos recursos, a destacar los monstruos que abundan, los cuales nos darán tras matarlos elementos de lo más útiles. Estos monstruos se distinguen entre pequeños y grandes, alcanzando más del centenar de bestias que componen el mayor número que encontramos hasta ahora en una entrega de la franquicia. Entre ellos, se juntan tanto monstruos de anteriores entregas como nuevas incorporaciones además de mutaciones de ellos, siendo 20 los monstruos que conoceremos por primera vez en Generations.

Su comportamiento será variado, desde pacíficas bestias que no intentarán asustarnos hasta ariscos monstruos que se lancen contra nosotros a las primeras de cambio. Muy diferentes entre sí, las grandes bestias son sin duda las más imponentes. Su actitud en combate es desafiante, siendo difícil plantarles cara si no contamos con el conocimiento previo sobre cada una de ellas además de un arsenal indicado para hacerles frente. Será fundamental descifrar sus patrones de movimiento y acciones para defenderse, así como detectar cuándo está fatigada para darle el último golpe, evitando ante todo que marche a dormir o a alimentarse, ya que esto les recuperará de las heridas realizadas. Sin duda, son los grandes protagonistas donde, a pesar de contar con una IA un tanto irregular en ciertas ocasiones, los combates se sienten apasionantes y desafiantes. Entre ellos destacan claramente los bautizados como Cuatro Condenados, monstruos insignia de Generations, que aterrorizan a los habitantes de las aldeas amenazadas. Supondrán el mayor desafío posible y derrotarlos no será tarea fácil, demostrando por su parte una gran pericia en combate que tendrá que ser respondida con unos movimientos certeros si queremos salir airosos.

Espíritu Felyne

Conocemos ya cómo lanzarnos al combate, ¿pero iremos solos? ¡Claro que no, sería un disparate! Serán de nuevo los fieles Felynes quienes nos acompañen en cada una de las cacerías que iniciemos. Felinos astutos y habilidosos con las armas, los conocemos de anteriores entregas. Sin embargo, la iniciativa que tienen en Generations supera con creces la vista anteriormente, demostrando unas mayores así como grado de personalización mayores. De esta forma, estos adorables gatos dispondrán de multitud de habilidades y movimientos, así como diversas clases que nos permitirán escoger entre aquellos más útiles para nuestros propósitos.

Estas clases pueden optar por posiciones más ofensivas, así como otras dedicadas más al apoyo. Entre ellas podemos tener el bombardero, especializado en el lanzamiento de objetos explosivos; el asistente, el cual nos facilitará en gran medida la caza con sus artilugios; o el recogedor, especializado en escarbar en busca de cualquier recurso útil. Finalmente, nos encontramos con un buen puñado de roles bastante útiles en combate. Otras cualidades distinguirán a un Felyne de otro, como pueden ser sus puntos de salud, así como su ataque y defensa, sus objetivos preferidos además del entusiasmo que pueda tener, punto a tener en cuenta ya que nos indicará el ánimo que dispone para afrontar una misión.

Los Felynes no se limitarán únicamente a pegar mamporros sin sentido alguno. También disponen de movimientos que podremos configurar, un amplio abanico de ataques tanto ofensivos como de apoyo útiles en combate. A esto se sumarán las habilidades, diferentes en función de la clase escogida, las cuales premiarán al Felyne con ciertas ventajas. Iremos desbloqueando ambos conforme vayan subiendo de nivel, por lo que entrenarlos será fundamental si queremos disponer de un compañero útil contra las presas más amenazantes.

Para realizar estos movimientos, muchos pensarán que con sus afiladas garras bastará. Sim embargo, al igual que sus amos, los Felynes están dispuestos a armarse por tal de ser lo más útiles posible. De esta forma, podrán portar armas de dos tipos, de corte o de impacto, habiendo una gran variedad entre las mismas. También tendrán armaduras, divididas en yelmo y tronco. Estas piezas, a diferencia de las del cazador, se fabrican de forma distinta. Empleando restos, el armero Felyne hará las delicias de cada uno de los felinos. Estos restos los podremos obtener como residuo al construir una armadura para nuestro cazador, así como reciclar partes de monstruos para obtenerlos. Cabe mencionar el futuro contenido gratuito que recibirán, a destacar los disfraces de personajes de otras franquicias que, al igual que los que reciba el cazador, podrán vestir.

Las virtudes de los Felynes no se limitarán únicamente al combate. Los mañosos gatos podrán afrontar otras obligaciones, entre ellas el heredado Cazamiaunstruos, aunque con una mecánica diferente a la vista en 4 Ultimate. En este minijuego, los Felynes, en grupos de cuatro integrantes máximo, los lanzaremos a algunas zonas en busca de recursos que podremos emplear posteriormente para hacer armas, armaduras u obtener recursos para nuestro personaje. A su vez, también podrán emprender tareas de recolección de elementos determinados tales como hierbas o bayas. En el descanso entre una labor y otra, los felinos podrán entrenar en el Dojo para perfeccionar sus habilidades, conseguir nuevas además de tomarse un respiro para reponer fuerzas. Nos encontramos ante un amplio abanico de personalización y actividades para los Felynes, siendo prácticamente otro personaje a tener muy en cuenta de cara a iniciar una cacería.

Una vez conocemos todas sus virtudes, ¿no falta una base de operaciones donde gestionarlo todo? Si bien podemos acceder a un tablón en nuestra casa, los Felynes dispondrán de su lugar de encuentro, el rancho. Los felinos se han mudado de la tropical Isla Sunsnug a este emplazamiento entre las montañas, lugar donde gestionaremos todo lo relacionado con ellos. ¿Deseas tener nuevos camaradas en tu equipo? No te preocupes, podrás conseguirlos tal y como los desees, escogiendo entre una gran variedad de los mismo, así como uno personalizado con el pelaje, clase o gustos que prefieras. ¿Quieres entrenarlos hasta la extenuación? El Dojo anteriormente mencionado tendrá aquí una entrada para que se dejen la piel entrenando. Más serán los emplazamientos además de camaradas especiales que nos brindarán más posibilidades en el Rancho, siendo un gran punto de encuentro entre los Felynes habitantes en la región.

No podemos concluir este apartado sin una de las grandes incorporaciones en Generations. El Modo Gatador, que tanto furor ha causado en Japón, nos permitirá meternos en la piel de uno de nuestros Felynes para emprender las muchas misiones que inundan el juego. Siendo un modo sencillo para los novatos, éste nos permitirá recurrir a las habilidades y movimientos de nuestros camaradas, teniendo un sistema un tanto diferente al del cazador, donde en lugar del uso de recursos iremos utilizando los ataques especiales que previamente hayamos designado al felino en el que hemos querido encarnarnos. Este modo, lejos de ser un mero añadido, es sin lugar a duda una de las grandes novedades que incorpora la nueva entrega, proporcionando una nueva dimensión al combate, los cuales se sienten diferentes en los ojos de los Felynes, así como más desenfadados y divertidos.

Cacería en equipo

Conocemos ya lo que todo cazador necesita saber pero, al igual que los Felynes, necesitamos una base de operaciones. En Generations dispondremos de una aldea inicial, Bherna, aunque en nuestro afán de conocer mundo y movidos por el jefe de ésta, nos asentaremos también en otras tres aldeas más sacadas de anteriores entregas: Kokoto, Pokke y Yukumo. En ellas tendremos a nuestra disposición a armeros, comerciantes así como a sus hospitalarios habitantes, los cuales no dudarán en hacernos algunas peticiones, las cuales nos recompensarán con recursos o ingredientes, estos últimos útiles para la elaboración de platos de la mano del Chef Felyne, los cuales, al ser consumidos, nos darán ciertas ventajas temporales en cada cacería que emprendamos. No podemos olvidarnos de que estas aldeas serán el lugar en el que escogeremos cada una de las misiones que afrontemos, ya que no dejaremos de visitar a las asistentas residentes en cada aldea que nos recomendarán las misiones a emprender.

Estas misiones se dividirán en función de su dificultad, así como el tipo de cada una. Mientras que la dificultad varía en función del número de estrellas, siendo este creciente, los tipos se dividirán en tres diferentes: recogida, batida o cacería y captura. La primera de ellas nos invitará a indagar por cada uno de los entornos en busca de ciertos recursos, mientras que las dos últimas están mayormente relacionadas con los monstruos. Mientras que en batida tendremos que derrotar a un número determinado de monstruos que, en cacería, se reduce a uno de los grandes, más amenazantes y desafiantes; la captura nos obliga a mantenerlo con vida con el fin de capturarlo utilizando recursos como tranquilizantes o redes. Encontraremos en cada una de ellas un objetivo principal, el cual al ser cumplido completa automáticamente la misión, además de un objetivo secundario que nos otorgará ciertas recompensas. Con una cantidad ingente de misiones, entre ellas destacan las de carácter urgente, designadas por los jefes de las aldeas y las cuales nos abrirán las puertas de nuevas misiones, más desafiantes, protagonizadas por los monstruos más peligrosos. Estas misiones nos recompensarán con dinero, así como puntos de Wycademia que podremos emplear a parte para la compra de objetos especiales.

Estas misiones las podremos realizar en solitario acompañados por nuestros camaradas. Sin embargo, jugarlas en compañía es lo más recomendable. Uno de los pilares fundamentales de la franquicia Monster Hunter, el multijugador, retorna manteniendo la misma fórmula, aunque continúa proporcionando las elevadas cotas de diversión a las que nos acostumbra. Podremos organizar grupos tanto a nivel local como en línea, estando compuestos por cuatro integrantes. Para poder emprender estas misiones, se ha construido el campamento, lugar provisto de los mismos puntos de interés que encontramos en cada aldea además de un centro de entrenamiento para los novatos. Sin embargo, el sistema de misiones es ligeramente diferente. Al igual que individualmente, podremos afrontar la amplia mayoría de las misiones, las cuales están enfocadas principalmente en la derrota de los grandes monstruos. Estas misiones también están organizadas por nivel de dificultad, aunque no se rigen por sus estrellas, sino por el rango RC.

El rango RC aumenta conforme vamos completando las misiones urgentes. Estas misiones las desbloquearemos al hacer unas determinadas disponibles para cada rango, abriendo así las puertas a una nueva oleada más difícil. Junto a estas misiones urgentes, destacan las de evento, las cuales se irán obteniendo poco a poco gracias al contenido adicional que se vaya publicando tras el lanzamiento. La forma de superar cada misión es la misma que de forma individual, teniendo que cumplir con el objetivo principal, además de mencionar que el dinero remunerado por la misma se reducirá en gran medida con cada baja en el equipo, aspecto a tener en cuenta para obtener el mayor beneficio posible. Puesto que la comunicación es importante, podremos comunicarnos con nuestros compañeros gracias a un chat con opciones predeterminadas, teniendo la posibilidad de acceder a un chat con teclado cuando nos encontremos en el campamento.

Hasta ahora, hemos disfrutado sin caídas del juego en línea, así como una fluidez exquisita en la que no hemos apreciado ralentización alguna. Gracias a ello y añadido al juego en grupo, las cotas de diversión aumentan en gran medida, siendo el multijugador una gran baza que perpetúa hasta centenares de horas la duración del juego. Monster Hunter es juego en equipo y lo demuestra en gran medida con un multijugador cuidado que mantiene la misma fórmula con éxito, sin necesidad de aportar cambios a algo que de por sí funciona a la perfección.

Monster Hunter Generations se convierte en el título más imponente dentro de la franquicia, así como de los más importantes en el catálogo de Nintendo 3DS. Con una ejecución soberbia, exprime al máximo las capacidades de la portátil, aportando unos entornos impresionantes gracias al depurado motor grfico que le confiere una pasmosa fluidez y ejecución de los mismos, convirtiéndose en una de las experiencias a nivel audiovisual más potentes que hayamos visto en la consola. La profundidad jugable, a destacar la incursión de los estilos de combate y las Técnicas de Caza combinados con la vasta combinación de armas y armaduras que puede portar nuestro personaje, dan lugar a múltiples estrategias en título que aúna la mayor posibilidad de personalización jamás vista en la franquicia.

Novedades como las mencionadas, así como el Modo Gatador o la incursión de nuevas criaturas otorgan un soplo de aire a un título que aporta novedades significativas tras lastrar unas conservadoras mecánicas que siguen funcionando en una experiencia más accesible, lo que permitirá atraer a nuevos jugadores sin quitar la mirada a aquellos acostumbrados al desafío aportado como de costumbre. Con todo ello, Monster Hunter Generations se convierte en una preciada pieza del vasto catálogo de Nintendo 3DS, una bestia que nos ha sorprendido con creces.

9.5

[Análisis] ‘Monster Hunter Generations’

Puntuación Nintenderos: Imprescindible

  • Historia:
  • Jugabilidad:
  • Gráficos:
  • Sonido:
  • Duración:
  • Multijugador:
Destaca en:
  • Los estilos y las Técnicas de Caza refrescan las mecánicas jugables, grata sorpresa del Modo Gatador.
  • Potente experiencia audiovisual acompañada de un sólido multijugador.
Flojea en:
  • Arrastra algunos errores gráficos anteriores, la cámara en alguna ocasión puede frustrar.