[Análisis] ‘Terraria’ (eShop Wii U)
Todo un mundo por descubrir es lo que nos espera en Terraria. Desde el éxito que supuso Minecraft, un juego en el que su principal atractivo reside en la posibilidad de explorar un amplio mundo sin límites, han salido otros juegos que han intentado aproximarse a este concepto pero aportando sus propias diferencias. Terraria tiene su propia identidad dentro de este concepto, donde a pesar de que solo nos movemos en 2D, contamos con un sinfín de ingredientes y recetas que conllevará a un mundo que irá evolucionando a medida que nuestro personaje crezca.
Ya en su momento presentamos un análisis de su versión portátil para la consola Nintendo 3DS, que ya se encuentra disponible tanto en su formato digital como en físico. Pero ahora le llega el turno para la plataforma Wii U, que al contar con mayor capacidad, nos ofrece una mejor experiencia tanto a nivel gráfico como en su sistema y en el tamaño de los mundos.
Tabla de contenidos:
Cada partida es única
Como es normal en este tipo de juegos, cuando comenzamos una partida nueva, aparecemos en un amplio mundo puesto con lo básico, en este caso, comenzamos el juego con una espada corta, una pica y un hacha. Estas tres herramientas supondrán el punto de partida para aprender a desenvolvernos en una extraña tierra, donde no hay dos iguales.
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En cada perfil de usuario, podemos tener hasta un máximo de 16 personajes creados y 16 mundos a explorar. Al crear un mundo se generará una isla totalmente al azar que se compondrá de varios ecosistemas: bosque, desierto, selva, mazmorra… También en el subsuelo habrá varias zonas que solo podremos encontrar si nos adentramos en sus profundidades, hasta llegar al inframundo.
Cada ecosistema cuenta con sus recursos propios, por lo que si necesitamos algún elemento para construir algo, deberemos buscarlo en algún terreno concreto, también encontraremos enemigos únicos en cada zona, mientras que en la zona corrupta podemos toparnos con devoradores de alma o gusanos gigantes, en la selva podemos ver a devoradores de hombres o murciélagos.
Sin embargo, aunque cada mundo tenga un diseño único, hay algunos elementos que sí que comparten todos, como una mazmorra, una zona corrupta o las playas que limitan el mapa.
Aunque nos tengamos que desenvolver solos en nuestra aventura por el mundo que hemos creado, en realidad no estamos solos, contamos con una serie de NPCs con lo que podemos interactuar. Generalmente, son vendedores de diversos materiales, como el minero que vende explosivos, el traficante que facilita la compra de armas o la animadora que vende material de fiesta.
Ante tantos elementos, personajes y posibilidades, será muy frecuente que necesitemos la ayuda de alguna guía o wiki para saber qué hacer, ya que se nos facilitna los materiales, pero en algunas ocasiones nos podemos sentir algo perdidos y no saber qué hacer.
Un multijugador completo pero solitario
Cuando iniciamos una partida, ya sea en un mundo nuevo o no, podemos albergar hasta 7 jugadores invitados para explorar juntos o separados la isla. Por defecto el juego se encuentra en un modo de juego cooperativo, donde nuestros ataque no afectarán a nuestros camaradas (a excepción de las explosiones), sin embargo, en cualquier momento podemos habilitar el modo de juego PVP.
De esta manera, podemos dañar y ser dañados solo por esos jugadores que también tengan activados este modo de juego. A parte, tenemos la posibilidad de asignarnos el color de un equipo, por lo que solo causaremos daño a los jugadores de los colores rivales.
Todo este modo de juego multijugador resulta muy completo ya sea para cooperar junto para hacer frente a un jefe final o a una mazmorra, o para enfrentarse uno a otro ya sea individualmente o por equipos. Sin embargo, para poder jugar a este multijugador, es imprescindible tener a un jugador que posea el juego en la lista de amigos, y que se encuentre conectado en ese momento. En resumidas cuentas, que para jugar al modo multijugador es necesario quedar con un amigo precisamente para jugar.
Gráficos, música y controles
A nivel gráfico nos encontramos con lo que podría ser una de las versiones de Terraria con mejor calidad visual entre todas las plataformas posible (aunque claramente, eso depende de nuestro televisor). El juego cuenta con el modo de juego Off-TV, sin embargo, contamos con algunos problemas respecto al encuadre y uso de las pantallas. El encuadre que se nos muestra en el televisor, es decir, el espacio que podemos llegar a ver, puede resultar algo amplio, por lo que dificulta el reconocimiento de algunos objetos, como las trampas o algunos enemigos que son más pequeños de lo normal, y complica mucho poder acertar con las armas a distancia. Por el otro lado, a través del GamePad, el encuadre resulta demasiado cercano, por lo que usar cualquier arma a distancia o herramienta resulta imposible apuntar con ellas si queremos disparar a una distancia ligeramente larga.
Otro error a nivel visual es el tamaño de los gráficos que indican nuestra vida y maná. Son demasiado pequeños, incluso en el GamePad cuesta bastante fijarse cuánto nos queda más o menos de vida.
Su banda sonora sí que está bien implementada, cada ecosistema tiene su tema propio, aparte de que la música cambia en la superficie dependiendo de si es de noche o de día. Lo único que puede sonar raro es que si está lloviendo, seguimos escuchando la lluvia incluso cuando nos disponemos a descender en el subsuelo y hasta que no bajamos a una profundidad considerable, no paramos de escucharla.
Sus controles aprovechan en su totalidad los botones y la pantalla táctil del GamePad. Los clásicos botones A y B sirven para accionar y saltar respectivamente, el botón X para ver el inventario. Con el stick izquierdo nos moveremos y el mismo tiempo podemos direccionar la acción de nuestro personaje, además si lo pulsamos, nos sirve para saltar también. Mientras con el stick derecho podemos direccionar la acción de nuestro personaje independientemente de la dirección a la que nos movamos o si estamos quietos. Con los botones L y R podemos desplazarnos por la selección de accesos directos. Con el ZR atacaremos o usaremos el objeto seleccionado y finalmente, con ZL nos servirá como acceso directo al gancho si lo tenemos dentro de nuestro inventario. Botón start para ir al menú y el select para abrir el mapa en el gamepad.
Por defecto, la dirección de acción de nuestro personaje es un círculo de referencia que se mueve en el mismo ángulo que nuestro pad, pero a través de nuestra cruceta, disponemos de un control alternativo que es una cruz que nos permite seleccionar el punto exacto donde queremos interactuar, si accionamos el botón de la palanca derecha, alternamos el sistema de control del círculo de referencia al de la cruz, que podemos mover con la misma palanca o con la pantalla táctil.
Cuando empezamos nuestra partida, en el GamePad veremos a nuestro personaje como se vería en el televisor, sin embargo, solo el GamePad es el que cambia si queremos ver nuestro equipo, el mapa o el menú. Salvo si activamos el menú, el juego seguirá fluyendo sin pausa, por lo que tendremos que estar atentos a las dos pantallas, o en caso de jugar con el televisor apagado, asegurarnos de estar en un sitio resguardado.
Comparación entre lasa versiones de Wii U y 3DS
Ahora que ya disponemos de Terraria para las dos principales consolad de Nintendo en estos momentos, podemos echar un vistazo las diferencias que hay entre estas.
En primer lugar salió la versión para Nintendo 3DS. Esta primera edición resultó ser una buena primera toma de contacto del juego teniendo en cuenta que hablamos de una consola portátil que no tiene la misma capacidad que una de sobremesa. En esta nos veíamos limitados a tener como máximo 3 mundos, aunque con las recientes actualizaciones, la cantidad de partidas que podemos crear asciende a 6. Aunque gráficamente no sea tan atractivo, el encuadre de su cámara resulta perfecto teniendo en cuenta la proporción que nos encontramos, además de que la navegación a través del menú gracias a la pantalla táctil de nuestras 3DS lo hace de una edición bastante cómoda de manejar y que no da la posibilidad de estar acompañados en nuestro mundo tanto por multijugador local como online.
Ahora que también contamos con una edición para Wii U, podemos ver que ésta se diferencia sobre todo por el tamaño que puede alcanzar cada mundo, siendo en esta ocasión más extenso que en su edición para Nintendo 3DS. Por supuesto, también se diferencian en el nivel gráfico y en la comodidad que en gran manera supone jugar con un encuadre tan amplio gracias a nuestro televisor, aun suponiendo las complejidad que añade de no poder ver bien del todo algunos elementos. Un problema que sí le atañe a esta versión es su menú de inventario y crafteo, resulta bastante complicado navegar a través de estos, si queremos depositar un objeto en un cofre, debemos primero posicionar el círculo o cruz de acción sobre el cofre, en caso de que haya un personaje cerca, la interacción tendrá prioridad con el personaje. Después, debemos ir arrastrando el objeto uno por uno de nuestro inventario al cofre. En su ventana de crafteo, podemos desplazarnos por varias categorías dependiendo de si queremos crear un mueble, una poción, un arma… pero dentro de estas categorías, lo que resulta complejo es desplazarse por una «ruleta» donde están todas las posibilidades a fabricar, una vez seleccionado el objeto que queremos fabricar, se nos abre otra «ruleta» horizontal con todas las variables. Sin embargo, en esta edición sí que contamos con las mismas posibilidades de configurar el mundo como en la versión original para ordenador.
Conclusión
Terraria para Wii U es un buen candidato dentro del «género Minecraft» que ha sido un éxito desde su lanzamiento, y ahora que ya disponemos de este juego para 3DS y Wii U, sin lugar a dudas puedo recomendar las dos versiones. Pero en caso de que solo os podáis decantar por una, resulta complicado decidirse, ya que depende de qué busquemos.
Si lo que necesitamos es esa portabilidad de poder jugar en cualquier lugar o momento, su edición para 3DS es una candidata perfecta, teniendo en cuenta las capacidades que presta la consola y que esta versión es más fácil de manejar.
Pero pese a las dificultades en el manejo del menú, Terraria para Wii U tiene una experiencia más fiel a su estilo, siendo un juego algo más completo que su predecesora portátil. Tal vez, una opción de compatibilidad entre las dos versiones habría sido una decisión más que acertada.
En resumen, si os planteáis compraros esta edición de Terraria, no os arrepentiréis. Sobre todo, si ya sois conocedores de esta saga y tenéis en cuenta que es un juego que se irá actualizando poco a poco.
Podéis echar un vistazo al análisis de Terraria para 3DS aquí.