[Análisis] ‘Reptilian Rebellion’ (eShop Wii U)
Paz, tranquilidad, el sosiego del día a día, de la monotonía y la rutina… Un momento, ¿qué demonios está pasando? ¿Una invasión de lagartos, dices? ¡Sálvese quien pueda!
Bajo este premisa tan simple, el estudio español indie Herrero nos trae un juego de disparos en el que deberemos hacer frente a esta repentina invasión reptiliana.
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Stop… lizard time!
Que no cunda el pánico, que esta invasión nos la sacamos nosotros de encima en menos que canta un gallo. Primero, deberemos escoger a nuestro poligonal héroe (o heroína, que no se diga). Cada uno de ellos cuenta con una serie de atributos, entre los que se encuentran velocidad, disparo, vidas o tipo de arma. Elegir uno u otro dependerá únicamente de nuestra forma de jugar. Si preferimos, por ejemplo, a un personaje con una sola vida pero con mejor arma o si vamos a lo seguro y cogemos al personaje con tres vidas pero con un arma más normalita.
Una vez tomada esta arriesgada decisión, la mecánica de juego es sencilla a más no poder. Nos moveremos únicamente en vertical mientras por ambos lados de la pantalla nos van saliendo todo tipo de lagartos. A medida que progresamos, los enemigos irán apareciendo con mayor asiduidad y serán más fuertes (algunos se defenderán incluso con escudos y otros contraatacarán). Y ya está, esa es la premisa básica del juego, no hay mucho más detrás.
¡Suéltame, lagarta!
Durante nuestra partida (ya que el juego no se divide en fases, sino simplemente nos reta a ver cuánto aguantamos sin desfallecer), contaremos con una serie de ayudas que nos facilitarán deshacernos de esta terrible amenaza de reptiles. Así, por ejemplo, de cuando en cuando encontraremos, en uno de los dos lados del escenario, cajas con distintos potenciadores: uno que aumenta nuestra capacidad de disparo, otro que aumenta el poder de tiro y otro que nos da temporalmente un simpático robotito que se pondrá a disparar y ayudará a nuestra causa. También hallaremos, de cuando en cuando, una bomba que eliminará al instante a todos los enemigos visibles en pantalla en ese momento.
Eso sí, cuidado al cruzar la carretera para coger los objetos, ya que los coches y camiones no se paran a mirar el paso de cebra y podremos perder una vida atropellados de la manera más tonta. En este sentido, se nota la influencia de juegos clásicos como Frogger, no sólo en este aspecto que he comentado sino en el propio estilo gráfico del juego y su verticalidad.
La Tierra a salvo
Esto es lo que nos ofrece este pequeño estudio español, un juego tremendamente simple (quizá en exceso), de estética poligonal y contenidos escasos. El único motivo que nos puede llevar a seguir intentando superar nuestros récords es ir desbloqueando a más personajes (hasta un total de 10), pero fuera de ello, lo cierto es que el juego termina por cansar pronto, ya que se acaba haciendo algo repetitivo debido a su enorme simpleza.
Tampoco ayuda que el escenario sea constantemente el mismo (no se salva ni con un breve ciclo día-noche), y que los enemigos terminen por repetirse enseguida.
No es un juego terrible, y durante un par de horas logra ser entretenido, pero enseguida cae en la monotonía y se descubren sus puntos débiles. Afortunadamente, su precio está más que ajustado para lo que ofrece, ya que nos podemos hacer con él por sólo 1,99 € en la eShop. No será un dinero terriblemente mal invertido si os interesa, pero hay mejores juegos ahí fuera, incluso del mismo tipo. En vuestras manos queda.