[Análisis] ‘Oddworld: Abe’s Oddysee New ‘n’ Tasty!’ (eShop Wii U)

Una vez más, los clásicos llegan al catálogo de Nintendo ofreciéndonos esta vez el regreso de un gran juego que apareció a finales de los 90. Podemos hablar de que es uno de los juegos de plataformas más conocidos de la época ya sea por su historia, por su dificultad o por ser un icono en su género.

En Oddworld: Abe’s Oddysee New ‘n’ Tasty! nos pondremos en la piel del desdichado mudokon Abe. Esclavizado junto a todo su poblado, descubrirá el malvado plan de la compañía Granjas Hostiles de añadir un nuevo producto a su catálogo de aperitivos, servir a los propios modokon, por lo que el pobre Abe se verá en el deber de huir de la factoría y salvar a la mayor cantidad de sus compañeros posible para evitar que sean servidos como platos de comida precocinada.

Sabiendo que será un largo viaje, ¿para qué sufrir solo?

Uno de los rasgos positivos de este juego es su duración, ante nuestra odisea, escapar de las Granjas Hostiles solo es el primer paso en un largo camino hasta liberar al pueblo mudokon, un gran número desafíos nos darán un sinfín de horas, a lo que sumaremos esos niveles en los que nos quedaremos algo estancados hasta que le cojamos el truco. Su modo aventura cuenta con 3 modos de dificultad: fácil, medio y difícil.

Una de las novedades que incluye Oddworld: Abe’s Oddysee New ‘n’ Tasty! es la posibilidad de un modo de juego multijugador local. En este modo de juego, iremos alternando el mando hasta que fallemos y nos maten. Puede que no sea un modo multi muy intenso, pero por lo menos podremos alternar el juego con otros jugadores y regodearnos de su torpeza.

Una desventura como las de antaño

Puede que nos encontremos ante un remake, pero eso no quita que no haya diferencias respecto a su original. La estructura en la resolución de los niveles sigue siendo la misma, aunque podemos encontrar muchos desafíos extras donde deberemos rescatar a más compañeros mudokon atravesando peligrosas trampas y escapando de un sinfín de guardianes que nos darán caza.

La dificultad para resolver las salas no es excesivamente alta, tanto para los jugadores más noveles como para los que ya jugaron a este juego en su época. Aunque se ha visto algo reducida debido a la mejora en los controles que son más precisos que en su versión original, sigue siendo un buen desafío, sobretodo gracias a la larga duración de este juego incluso si vamos directamente a completar la historia sin preocuparnos lo más mínimo por rescatar al resto de mudokons.

Sus rompezabezas no resultan demasiados complejos,  la coordinación y unos buenos reflejos son la clave para poder avanzar en este juego, y sobretodo saber calcular el espacio, ya que hay muy poco margen entre pisar una bomba o no.

Los Slig, Slog, Paramitas y los Scrab son los principales enemigos que nada más vernos se abalanzaran sobre nosotros matándonos casi al instante, por no mencionar las diversas trampas, como cuchillas, minas entre otros artefactos que sí que nos matarán independientemente de la salud que tengamos.

Una diferencia que podemos destacar respecto a su antecesor es la inclusión de una “barra de vida” que nos permitirá no morir en el primer golpe, aunque el estado de nuestro pobre Abe no se puede saber así como así, tenemos que estar en un sitio seguro y parar a ver si tenemos pajaritos sobre nuestra cabeza (literalmente).

Este juego se encuentra totalmente traducido al castellano, aunque puede que los más veteranos añoren aquel doblaje que tuvo Abe en su momento.

Controles, gráficos y música

Ante los controles, podemos decir que están perfectamente implementados aprovechando cada botón del GamePad, respetándose las mismas acciones que en su primera versión, con los botones A, B, Y y X podremos agacharnos, saltar, accionar y ver nuestra vida respectivamente. Con la cruceta tendremos 4 de las 8 frases con las que interactuaremos con el resto de mudokon, si pulsamos ZR (el gatillo derecho) y le damos a la cruceta, tendremos las otras 4 que se usarán sobretodo como contraseña en muchas ocasiones que encontraréis a lo largo del juego.

Con la palanca izquierda andaremos o correremos según su inclinación o, en caso de preferirlo, podéis activar el modo de control clásico en el que para correr deberemos mantener pulsado el botón ZL (gatillo izquierdo), mientras que con el L haremos que Abe avance cuidadosamente ya sea de pie o agachado, de esta manera conseguiremos no hacer ruido y no seremos detectado por otros enemigos que no nos hayan visto o estén dormidos.

Finalmente, con la palanca derecha apuntaremos y con el R arrojaremos el objeto que tengamos en mano, o en caso de no tener ninguno, lanzaremos una chapa que no servirá para distraer a cualquier enemigo.

A nivel de gráficos, podemos concluir que han hecho un gran trabajo con la calidad de imagen que se nos muestra, se juega mucho con los efectos de iluminación y sombras. Aunque en algunas ocasiones puede que experimentemos alguna bajada de frames que desaparece a los pocos segundos.

Su música juega bastante con el escenario y la situación. Dentro de los balbuceos de los personajes, podemos entender que el juego está doblado al inglés. El único problema que presenta el sonido es que si el personaje que habla está en un segundo plano, este prácticamente no se oye, por lo que dificulta la escucha de algunas contraseñas, aunque estas también son representadas gráficamente con un color.

Conclusión

El juego cuenta con un precio de 19,99 €, más que recomendable si lo comparamos la duración y la calidad que se nos ofrece. Es un clásico muy bien recreado tanto a nivel gráfico como técnico, especialmente lo recomiendo a aquellos jugadores que no pudieron jugarlo porque les pillaba muy chicos, ya que este es uno de esos juegos que marcan una época.