Escándalo por el Mario Bumerán de los Happy Meals: «Parece que está haciendo un acto sexual»

Tal y como lo leéis, esas fueron las palabras que ha compartido el medio inglés Daily Mirror como titular en una de sus más recientes entradas. Según el medio, son las declaraciones de un padre después de que su hija recibiera en un establecimiento de McDonald’s la figura de Mario Bumerán distribuida con los juguetes de la serie Super Mario incluidos en los Happy Meals. Como podéis suponer, el tema se ha hecho viral en apenas un par de días al haber sido publicado por este conocido medio informativo, que es una de las webs más visitadas del mundo.

Según la página, el padre, de 25 años y procedente de Plymouth, señaló que el juguete mueve el brazo hacia arriba y hacia abajo. Normalmente la figura cuenta con un bumerán, pero cuando se retira, queda un hueco en la mano de Mario que «imita a un acto sexual».

«Estaba muy preocupado por que se veía completamente inadecuado, no me gustó nada», afirmó supuestamente el padre. «No deberían dar juguetes como esos, mis hijos comenzaron a mover el brazo de arriba a abajo y ese acto es muy inapropiado. Le confisqué el juguete a mi hija y ésta se enfado, pero sin el bumerán, no se ve bien», podemos leer en la web.

El Daily Mirror también afirma que, tras la protesta realizada hacia McDonald’s por distribuir este tipo de juguetes, un representante de la cadena de comida rápida emitió estas declaraciones en respuesta: «Los juguetes de Super Mario son unos de los más exitosos de nuestras promociones de Happy Meal. Han estado disponibles por todo el mundo desde 2014 y nadie se ha quejado. Esperamos que la amplia mayoría de consumidores que no han encontrado ofensivo el juguete continúen disfrutando de estos productos».

Como os comentábamos, el escándalo se ha extendido a través de Internet como la espuma. Sin embargo, la historia no es tal como se narra en el Daily Mirror, una versión que ha hecho que este supuesto escándalo se extienda aún más rápido.

Al parecer, se trata de un error del Daily Mirror, que publicó la entrada sin tener una base fiable. Hablando con el periódico de Plymouth, el padre real ha confirmado que en ningún momento retiró el juguete a su hija y que no pronunció esas palabras compartidas por el medio inglés.

Lo que parece haber pasado es que un amigo del padre le ha gastado una broma bastante pesada, iniciando así un rumor que ha provocado un escándalo que ya ha alcanzado a millones de personas y que ha sido compartido miles de veces desde el Daily Mirror.