[Artículo] E3 2015, la gran decepción

La decepción inunda miles de sitios web. Los fans, con justificados berridos, sacuden a golpe de teclado una de las empresas más importante del mundo de los videojuegos. Después de una nefasta conferencia, la compañía nipona sigue sumida en el letargo.

Conocíamos ya de sobra que Nintendo sabe como jugar con sus adeptos. Pero se ha dado de bruces contra la crítica colectiva y, de momento, parece seguir por el mismo camino. Star Fox Zero fue, simplemente, insulso. Un juego de batallas intergalácticas con gráficos poco pulidos en el que nuestra nave favorita se transforma en una especie de gallinácea metálica. Supone así lo presentado un derroche de originalidad abrumador.

Bowser y Donkey Kong, se transforman en Skylanders para la nueva entrega de la saga. Nintendo guiña el ojo a Activision, no sabemos con que propósito.Dos simples figuritas con vehículos propios. Bowser luce una simple armadura y Donkey Kong se enfunda un traje ochentero que roza el horterismo.

Cuando le toca el turno a Zelda, el esperado título de Wii U es la gran ausencia. Se queda el cabalgar a lomos de Epona por un entorno abierto en una fantasía. En su lugar The Legend Of Zelda: Triforce Heroes es el juego presentado, para la consola portátil. En el manejaremos a nuestro espadachín favorito por niveles que no suponen ninguna innovación técnica. Por último Hyrule Warriors: Legends llega también a 3DS. Para que no todo sean críticas, hay que decir que este port de Wii U a 3DS es una idea excelente.

Omitiendo el nuevo RPG de Mario y la entrega de Fire Emblem, llega el momento en el que Nintendo decide defecar sobre una de sus sagas más queridas. Presentan así Metroid Prime: Federation Force. De Metroid tiene poco y de creatividad también. Es un shooter supuestamente basado en el universo de la cazarrecompensas que acaba por convertirse en una burda parodia. Los protagonistas del juego son unos robots simplones que además de derrotar a seres alienígenas, juegan a una especie de fútbol sideral en sus ratos libres. Sí, no hay duda de que será un superventas.

El ya conocido Animal Crossing: Happy Home Designer pretende que paguemos de nuevo para adquirir un juego que, en realidad, parece un simple contenido que el anterior título de la serie debería haber incorporado. ¿Tanto costaba lanzar una actualización gratuita y contentar a los fans de Animal Crossing? Sí, y para rematar llegan unas tarjetitas que vienen a ser lo mismo que los amiibo.

Para terminar de aguar la fiesta, llega Animal Crossing: amiibo Festival. No tenían suficiente con la intencionada y caótica gestión de su stock de figuras. Ahora Tom Nook y compañía quedan inmortalizados en plástico para tomar parte en un clon de Mario Party. La esperada entrega de la serie para nuestra consola de sobremesa parece no estar en los planes de Nintendo. En su lugar nos ofrecen una auténtica bazofia cuyo objetivo es humillar la esencia de Animal Crossing, pervirtiéndolo y transformándolo en un refrito barato que pretende venderse gracias al éxito de los amiibo.

Pasa, sin pena ni gloria, Mario Tennis: Ultra Smash. Mario y sus amigos continúan paseándose por todo tipo de actividades deportivas. Xenoblade Chronicles X es el único aliciente por el que hubiera merecido la pena ir al evento.

Termina así un show peripatético que bien podría encuadrarse en el género del astracán. No sabemos si la gran N ha decidido cavar su propia tumba, pero sin duda se ha echado encima un buen puñado de fango.