[Opinión] Porque nunca está de más
De tropiezo en tropiezo vamos día a día, a veces intencionalmente. Incluso aquellos que se enorgullecen de cada paso que dan, tienen en sus espaldas restos de tierra y más de una historia que contar. Antes de seguir me dirigiré a ti, quien atentamente estás leyendo esta entrada, para advertirte que no deberías seguir haciéndolo si no estás dispuesto a terminarla o no dispones del tiempo necesario para hacerlo en esta oportunidad. De darse este último caso, mi recomendación es que cierres la página y vuelvas después. También agregar que Nintenderos.com no se hace responsable del directo y, en mi opinión, necesario mensaje contenido en este artículo.
Hago hincapié en lo último ya que esta vez no os traigo un tema interesante sobre las últimas noticias de Nintendo, no os costaré mi opinión acerca de la explotación del consumismo ni vengo a sumarme al odio por el rumbo de la industria. Quien venga por información, probablemente no encuentre aquí nada nuevo. Todo lo contrario. Tomé la poca fuerza que me queda después de una extensa y agotadora vida para cometer el sinsentido de deciros algo que probablemente ya sabéis. Seguramente lo habréis leído por ahí en algún tweet o en cualquier periódico que se permita este tipo de libertades. No seré yo el primero en mencionarlo. Más allá de eso, podría dar como un hecho que ante la irremediable certeza de esta situación, muchos de vosotros le habéis restado importancia.
A pesar de lo comentado al principio, me tomaré el atrevimiento de hablar por mis queridos compañeros redactores, porque tengo la seguridad de que estarán de acuerdo conmigo dado que todos nos regimos por el mismo principio básico. Y cuando digo todos, incluyo desde el más minucioso que añade un valor especial a cada recurso literario utilizado, hasta el más extrovertido que nos desconecta por unos segundos de todo lo que no esté relacionado con sus noticias. Incluso agrego aquí a aquellos que fueron juzgados sin piedad en repetidas ocasiones por algún error gramatical, información errada o por no cumplir cualquiera de los requisitos exigidos por los altos estándares del lector. Sin ánimos de justificar siquiera la más mínima de nuestras fallas, he de decir que es mucha presión y responsabilidad la que recae en nuestros hombros. Después de todo, todos hemos tenido tropiezos.
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Así que sin darle más vueltas al motivo de esta entrada, retomaré la segunda persona del singular para dirigirme nuevamente a ti, quien atentamente has continuado leyendo este artículo aún teniendo otras cosas más importantes que hacer, para recordarte algo que ya sabías. Algo que habías olvidado o no tienes en cuenta. Algo que anunciaré sin que me quede nada por dentro. Y lo diré sin adornos y como fui educado, de la forma más sencilla posible. Aunque no te conocemos, aunque no sabemos nada de ti, aunque estemos separados a millas de distancia al otro lado del mundo, eres la razón por la que a diario pasamos gran parte del día frente al ordenador; a veces también teniendo otras cosas que hacer. Es por ello que desde mi humilde posición me veo obligado a darte mi más sincero agradecimiento y esperar que, al menos por un momento, puedas imaginarte lo importante que eres para nosotros. También disculparme por los incesantes errores y molestias que hayamos podido ocasionar, seguramente nada ha sido intencional. Nuestro compromiso nunca ha sido estar exentos de fallas, sino aprender de éstas para no repetirlas en el futuro; algo que no habría sido posible sin cada consejo que hemos recibido a lo largo de estos años.
Pero para quienes queríais algo nuevo, os contaré que nuestro aporte no es algo fácil de realizar. Un promedio de 50 noticias sobre Nintendo atraviesan la red a diario y la presión de ser los primeros en traéroslas es indescriptible. Sumando traducciones, trabajado de imágenes, verificación de la fuente, redacción y otras cosas aburridas pero necesarias, terminamos involucrando muchas horas de intenso esfuerzo, dolores de cabeza y tiempo personal; a la vez que mantenemos impecablemente nuestros trabajos reales, universidades y otros compromisos. Pero tampoco os confundáis. Mi intención aquí no es daros pena, sino traer a escena al telonero, al dato más ignorado de la operación, a la vaga idea de que detrás de cada noticia hay una persona real que se nutre de vuestros comentarios. Cada crítica, cada queja, cada exigencia nos ha hecho mejores. Pero más allá de eso e incluso más importante, cada comentario positivo nos ha motivado a seguir aquí, por vosotros, por ti.
Dicho esto, me gustaría invitarte a no solo tomar el teclado al detectar algún error, sino también al quedar satisfecho con el trabajo de los demás. No te hará menos que nadie y seguro se traducirá en un contenido de mayor calidad en el futuro. Y dejo claro que no comparto esta iniciativa por mí. Honestamente, no recuerdo cuándo fue la última vez que redacté una noticia. Lo hago por quienes están ahí a diario con nosotros, aunque a veces se nos olvide. Y principalmente porque, aunque éstas han sido unas semanas de tropiezos, sé que la mayoría de vosotros estaréis ahí al levantarnos.
¡Un saludo y, porque nunca está de más, muchísimas gracias!