[Análisis] Affordable Space Adventures (eshop WiiU)
Es innegable. El panorama indie en la consola de sobremesa de Nintendo está en plena ebullición. La eshop de Wii U está a rebosar de magníficos títulos creados por equipos de desarrollo más bien con presupuestos humildes y pocos trabajadores, lo que conlleva un extra de mérito para estas pequeñas compañías que gracias a un gran saber hacer se abren hueco en el mercado y, sobre todo, en la crítica en general.
La útima joya que está a punto de aterrizar en la tienda virtual es Affordable Space Adventures, creado por los chicos de KnapNok Games y el equipo de Nifflas’ Games. Después de varios días probándolo a fondo no podemos más que quitarnos el sombrero ante un juego que va a sorprender muy gratamente a los amantes del género de puzles, tanto a nivel técnico como jugable. Pero si hay algo que destaca por encima de toda su realización es, sin lugar a dudas, el ingenioso e intenso uso que le han dado al GamePad. ¿Preparados para la inmersión en el misterioso mundo de la exploración espacial?
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Viaje al centro del espectáculo
«¡Puedes ser explorador espacial profesional! Uexplore te ofrece una nave espacial barata pero funcional, equipada con todo lo necesario para el mundo alienígena. Se llama Small Craft.»
Así empieza todo, a través de un peculiar anuncio de televisión al estilo Teletienda, pero bien hecho, donde la compañía Uexplore, innovadora en investigación y tecnología espacial, nos ofrece la oportunidad de convertirnos en profesionales de la exploración de otros planetas. ¿Cómo? Muy sencillo: ellos ponen todos los medios y tu… a ti mismo y un buen puñado de billetes, claro. El objetivo es investigar un planeta al que han bautizado con el ocurrente nombre de Spectaculon y ¿qué mejor forma de rentabilizar un proyecto de tal magnitud que vendiendo una oportunidad a cualquier persona? Así es, ellos alquilan la nave, creada con lo último en tecnología puntera y te desplazan hasta el lugar en cuestión ofreciéndote todo el lujo y seguridad posible, cuya estadística es del cero por ciento en accidentes desde hace varios años. ¡Ah! y si a eso le añadimos que las primeras cien llamadas tras la emisión del anuncio se les hace un diez por ciento de descuento sobre el presupuesto final, ¿a que es imposible resistirse a la ‘llamada’ de la aventura?
Ante un desastre, que cunda el buen Karma
Todo es tan bonito en un anuncio, ¿verdad? Lo pintan idílico, practicamente el paraíso por explorar, con sus verdes praderas, quizás habitadas de bellas criaturas que fotografiar, imponentes y profundos lagos para sumergirse, extravagantes cuevas, gigantescas formaciones rocosas que serpentear… y todo a disposición de cualquiera sin necesidad de tener experiencia en este campo. La Small Craft es el sitio más seguro que pueda haber tras salir de la Tierra y permanecer en su interior es tan protector como cubrirnos con las sábanas de nuestra cama tras el inminente ataque de un fantasma o espíritu malhumorado: nada atravesará esa capa mágica y protectora cuya aleación es un secreto industrial de Uexplore.
Del planeta Spectaculon solo se conoce un 1%, que es donde se ha establecido la base principal de la compañía. El 99% es desconocido y quien consiga acotar una zona se le agencia como descubridor. Sí se sabe que alrededor de un siglo atrás se estrelló un enorme crucero espacial cuyos restos se esparcieron a tanta distancia a la redonda del lugar de impacto que no saben hasta dónde pueden encontrarse. Desde la base han descubierto numerosos artefactos que, curiosamente, parecen estar vivos, aunque desorientados. Y es precisamente una norma esencial en el contrato no establecer ningún tipo de contacto o interacción con dichos mecanismos, de lo contrario se incurriría en una grave penalización. Todo sea por preservar la integridad física del aventurero.
Pero a veces el destino no es favorable y desgraciadamente, la nave nodriza de la Uexplore que transporta todas las naves de viajeros, ansiados por descubrir nuevas zonas, tiene un misterioso accidente que provoca una inminente caída. Tras eso, el silencio y la confusión dan la bienvenida a los turistas interplanetarios.
Parajes escalofriantemente bellos
El accidente resulta ser debastador. Al despertarnos somos la única nave que parece estar en esa zona. Nuestra Small Craft cuelga del cable de seguridad. Vemos que nuestro visor inferior (el GamePad de la Wii U) nos indica un desastre total en el sistema aunque por suerte el nuevo software integrado tiene una función de autoreparación, así que es cuestión de tiempo que las diferentes partes afectadas se vayan solucionando por si mismas.
Lo primero que se torna operativo es el escáner y su función de linterna. Bien, basta con pulsar en el visor para encenderlo… tras lo cual se hizo la luz, y con ello se viene abajo el bucólico edén que tanto se esperaba uno. Fuego, terreno abrupto, atmósfera sobrecogedora, cielos cabreados relampagueando como si fuera el juicio final, espesa niebla… Tras aquel espanto, recibimos el aviso que el motor de combustible está activo y funcional. ¡Hora de irse! A duras penas arranca y mediante un forcejeo conseguimos zafarnos del cable que nos mantenía unidos al contenedor de transporte.
¿Y ahora qué? ¿Hacia dónde se supone que deberíamos dirigirnos? La Small Craft se desplazaba con un tembloroso movimiento, como si el vehículo tuviera espasmos. La única esperanza era continuar hacia adelante en busca de una cápsula de comunicación, de las cuales Uexplore habría dispersado por la zona más de 49 unidades. Gracias a ello sería posible entablar una vía de emergencia con la compañía. Puede que ya supieran del accidente pero por si acaso, era mejor no quedarse parado.
La biodiversión de Spectaculon
Affordable Space Adventures posee unos escenarios estupendamente bien realizados. Lucen de maravilla gracias a unas texturas muy realistas y detalladas que resplandecen aún más por la linterna de la Small Craft. A su vez, la atmósfera que han conseguido implementar encaja a la perfección ofreciendo al jugador una experiencia y sensación únicas mientras nos desplazamos por la biodiversidad de un planeta más inhóspito que paraje del edén. La combinación de apartado gráfico junto a los efectos de sonido dejan entrever el cariño con el cual han tratado cada parte del juego. Se nota que deseaban crear un mundo creíble y poco hospitalario, y lo han conseguido con creces.
El diseño de los niveles también es fantástico, no solo en el plano artístico, sino en cuanto a la integración de los puzles en el medio ambiente del planeta. Cada fase en el juego corresponde a una zona en el mapa y de una forma bastante lógica vamos avanzando a través de unos escenarios que nos van a sobrecoger constantemente. Lo bueno es que no resultan más grandes a medida que progresamos sino que tan pronto estamos en una zona amplia como en otra casi claustofóbica pero con un puzle de esos que te refríen las neuronas. Todo es imprevisible y lo siguiente que puedas encontrarte es posible que te deje más boquiabierto que hace un momento.
Si hay unos elementos que destacan por su gran presencia, son los artefactos alienígenas con los cuales Uexplore nos tiene terminantemente prohibido entrar en contacto. Y si lo tomáis como un dogma, mejor aún, porque estos aparatos no se andan por las ramas y si os detectan se creerán que sois una lata de mejillones pero, ¿cuál es el problema? que solo saben abrir las cosas a balazos así que, visto la situación, no resulta muy práctico, sobre todo para nosotros.
Aquí es donde se introduce uno de los elementos puzle más extendidos por todo el juego y que tan bien han sabido diseñar: pasar desapercibidos de cuanto artefacto electrónicamente vivo nos topemos por el camino. Para ello debemos tener en cuenta dos aspectos fundamentales. El primero es su rango de detección, que aparecerá en pantalla si escaneamos al sujeto en cuestión con el sensor de rayo azul; en este punto nos sería posible esquivarlo, pasar de largo y quedarnos tan anchos si nos mantenemos alejados de su radio de visión. De lo contrario, si no hubiera más remedio que atravesar su campo -no todo iba a ser tan fácil-, es entonces cuando hay que tener muy en cuenta los tres medidores de salida, bien posicionados en nuestro GamePad, y que indican el sonido que emite nuestra nave, el calor que genera y la electricidad que produce, ya que dichos artefactos son capaces de detectar nuestra presencia a través de cierto nivel elevado en alguno de los tres indicadores.
Así pues, saber mantener a ‘raya’ estos tres medidores es un punto clave para nuestra superviviencia. Al escanear un artefacto se nos mostrará una franja anaranjada en el medidor de salida que éste es capaz de detectar, lo cual debemos actuar en consecuencia para modificar los parámetros de configuración en los sistemas de la Small Craft e intentar mantener la aguja por debajo de ese nivel. Y es en este sentido donde se han lucido con un gran e ingenioso sistema de puzles en el cual deberemos ir experimentando con toda la gama de combinaciones de nuestra nave espacial hasta dar con la forma de mantener los medidores justo para seguir hacia el siguiente nivel. Algunas situaciones serán fáciles, otras requieren de un cierto razonamiento y el resto son delirantes momentos de locura cuando por más que modifiquemos los sistemas no consigamos mantener el medidor por debajo de la mortal franja naranja. Sin lugar a dudas el juego es, en muchos puntos, un auténtico reto a nuestra capacidad de lógica resolutiva.
Otros tipos de puzles que deberemos sortear son, por ejemplo, la activación de botones para abrir puertas, mover contenedores, atravesar rayos láser o teletransportarnos a diferentes posiciones dentro de un mismo nivel. La variedad hace que no sintamos ninguna sensación de monotonía púzlica, sobre todo porque el plantemaiento nos obliga a usar al completo lo que la Small Craft es capaz de hacer de una forma inteligente, compleja, amena y ante todo muy dispar.
Como dijo Jack el Destripador, vayamos por partes
Las posibilidades de nuestra nave Small Craft están más que bien pensadas. Desde el principio y hasta haber avanzado lo suyo en el desarrollo del juego, se nos irán desbloqueando las diferentes partes, que a su vez es una estupenda forma de introducir al jugador con los puzles exclusivos para esa nueva opción operativa que deberemos resolver en dicha fase, lo cual nos va preparando, a través de una regulada curva de dificultad, para que nos hagamos una idea de sus facultades tecnolgicas.
Cualquier elemento de la nave se controla a través del GamePad, y es aquí donde hay que aplaudir al equipo de KnapNok por haber implementado un excelente uso del mando de Wii U. Puede parecer obvio pero hasta que no se comprueba por uno mismo no se comprende el grado de integración. Los botones sirven para tener un acceso directo a las distintas opciones pero es en la pantalla táctil donde vamos a disfrutar de lo lindo pues no solo se nos mostrará la interfaz principal de los mandos de control, sino que cualquier mensaje o problema que ocurra será visible de una forma un tanto peculiar y divertida. En cuanto a qué ofrece la nave en si misma, vayamos por partes para desgranarla y poder hacerse una sutil idea.
Lo principal, como en todo aparato de vuelo, es el motor. En nuestro caso disponemos de dos: el de combustible y el eléctrico. El primero que se ‘arregla’ es el motor de combustible, el cual dispone de tres subsistemas para una mayor configuración: el sistema de propulsión, que nos permite ajustar la potencia y velocidad de vuelo; el estabilizador, clave para mantener un nulo balanceo mientras nos desplazamos, y el generador de masa, que nos posibilita modificar, según las necesidades del momento, el peso del vehículo, ideal para vencer o aprovecharnos de la fuerza de gravedad. En cuanto al motor eléctrico, están el sistema de propulsión, de igual uso que el caso anterior; la anti-gravedad, algo parecido al generado de masa, y el decelerador, ideal para ir con menos ansia porque si algo tiene el motor eléctrico es su capacidad de ir ‘volao’, y nunca mejor dicho, algo necesario en determinadas ocasiones pero que puede trastocarse en un serio problema si necesitamos andarnos con pies de diente de león.
Los obturadores térmicos son unos indicadores, situados por debajo de los tres medidores de salida que ya hemos comentado en el apartado anterior, que nos permite mantener a raja tabla la calor que produce nuestra nave, gracias a un sistema de ventilación entre su interior y el exterior. Su función es realmente útil ya que si usamos un nivel alto del propulsor de combustión, por ejemplo, la Small Craft va a empezar a arder en cero coma, algo que podemos evitar mediante ello. Y si por alguna extraña razón un generador alienígena malignótrico nos inutiliza toda la nave, disponemos de un sistema de operatividad independiente: el impulsor. No es muy recomendable usarlo dentro del rango de detección de un artefacto ya que mientras se carga la batería los tres medidores se ‘disparan’, lo mismo que hará dicho artefacto…
Pero aún hay más. Dispone de dos tipos de escáner, uno de luz amarilla, la linterna, para alumbrar la zona por donde nos vayamos moviendo, y otro de luz azul, el sensor. A su vez dispone de bengalas que, aunque su principal uso sea la de marcar la posición, en nuestra aventura le daremos una utilidad más bien distinta y divertida. En cuanto al tren de aterrizaje, la Small Craft está condicionada con hasta tres tipos distintos: el suave, que tiene un práctico sistema de amortiguación que nos evita darnos un mamporrazo contra cualquier superficie; el adherente, ideal para ‘engancharnos’ a determinadas superficies, y el deslizante, una especie de palos de esquiar que concede el don del deslizamiento por rampas. Y por si esto no fuera poco, la nave también está equipada con un práctico sistema de ayuda y un fantástico diario de navegación en el cual se registrará albsolutamente todo lo que vaya ocurriendo.
Como veis hay opciones para rato y eso que solo lo hemos visto por encima. Una vez que os metáis de pleno en su jugabilidad las posibilidades se disparan. Desde luego, la Small Craft parece la navaja suiza de las naves espaciales…
En compañía ‘se llevan’ mejor las cosas
Affordable Space Adventures no cuenta con un modo online, algo lógico por el tipo de juego que es, pero sus desarrolladores han implementado un sistema de cooperación local realmente estupendo. Pueden estar hasta tres personas en la misma partida y la idea consiste en que cada jugador controla una parte de la Small Craft. El oficial principal se encarga del GamePad controlando e inspeccionando todos los sistemas de la nave; luego el Navegante es quien se responsabiliza de pilotar la nave y el Operador se ocupa de usar ambos escáneres, la linterna y el sensor. En el caso que fueran dos, el principal se hace cargo de la operatividad mediante el GamePad y el otro pilota y controla los escáneres.
Lo cierto es que la experiencia de un jugador es fabulosa pero en cooperativo la diversión aumenta a raudales. Lo ideal es tener comunicación entre todos pero no tardaréis con las bromas y las risas a medio camino en intentar sobrellevar el aparato entre dos o tres tripulantes. Es un muy buen punto a favor de este juego ya de por si excelente en la mayoría de sus aspectos. Pero aún más sorprendente es la compatibilidad total con los controles, que aparte del GamePad, evidentemente, es posible usar el Wiimote, el Wiimote con el nunchuck o el mando pro de la Wii U. Es incluso posible repetir mando, es decir, los otros dos jugadores pueden usar wiimote con nunchuck si lo desean, además nos permiten modificar el uso de los controles para adaptar los botones a nuestro gusto.
Así pues, podéis jugar toda la aventura completa acompañados de uno o dos compañeros. Eso si, más vale que vayáis entrenando esa afinidad, porque os va a hacer falta.
Conclusión
Con Affordable Space Adventures nos bien hallamos ante un juego sólido en su gran mayoría de apartados. En lo gráfico es sobresaliente con un aspecto y trabajo meticuloso y exquisito, pasando por el diseño de los niveles y el gran ingenio que desprende el original concepto de puzles entre la Small Craft, los artefactos alienígenas y el resto de elementos manipulables. El apartado sonoro también reluce con unos efectos muy bien llevados y que da una credibilidad total al ambiente del planeta. En cuanto al control de la nave, se deja llevar de maravilla gracias a una muy buena implementación de físicas que responde a la perfección según el sistema que activemos el grado de intensidad del mismo. Hay numerosas combinaciones y multitud de formas de manejar nuestro vehículo, lo que abre un gran abanico de posibilidades jugables. El broche lo pone un sensacional modo cooperativo para dos o tres jugadores.
Por otro lado, tenemos algunos puntos en contra que le restan un poco a una excelente valoración. El principal es la duración del título, que aún siendo los escenarios bastante variados, uno se queda con ganas de jugar a más. Cuenta con dos niveles de dificutad, Eventual y Técnico, pero no se aprecia esa diferencia real entre lo que debería ser una dificultad normal y otra difícil; en realidad muchas fases son iguales en ambos niveles, lo que uno no acaba por comprender. También se puede apreciar una molesta ralentización en el menú de pausa cuando estamos avanzados en la historia, así como, en ocasiones, unos tiempos de carga demasiado largos para lo que es el juego en si mismo. Sobre el modo Off-TV, queda descartado por el sistema de juego implementado.
En definitiva, Affordable Space Adventures es un gran juego ideal tanto para los amantes de los puzles como para quienes les gusten las aventuras de exploración. El admirable universo creado no va a dejar indiferente a nadie que lo pruebe. Explora, resuelve puzles y múevete con la nave espacial más chula jamás creada por un planeta repleto de aventuras. ¿Te perderás este Spectaculon?