[Análisis] Donkey Kong Land (eShop 3DS)
Donkey Kong Land nació como una versión alternativa del aclamado Donkey Kong Country en la portátil de Nintendo, Game Boy. Rareware, la desarrolladora de este título y otros como GoldenEye o Jet Force Gemini, nos trajo por primera vez este juego de plataformas en 1995. Esta vez podremos disfrutar de este título en nuestras 3DS con motivo de una nueva promoción de Nintendo.
Esta vez tendremos a Donkey Kong y Diddy Kong bajo nuestro control, entre los cuales iremos intercambiando según nos vayan matando. Todo esto será a través de 4 niveles muy diferentes entre si y que cada uno nos traerá un desafío diferente. Podemos situar estos cuatro escenarios en un barco pirata, Kremlantis, las montañas y la ciudad para finalmente enfrentarse con K. Rool por haber robado las provisiones de bananas. Destacablemente, se ha de decir que cada nivel contará con una serie de enemigos propios de ese nivel como las serpientes y las avispas Zing para el barco pirata.
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JUGABILIDAD: 8
En este título podemos encontrar todo aquello que nos conquistó en Donkey Kong Country como sus dos protagonistas, los enemigos, los barriles, esas bananas inalcanzables para mucho en los arboles y las famosas letras K, O, N y G que al conseguirlas nos aseguraba ganar el nivel. No obstante al funcionar en una consola de 8 bits, se tuvo que cambiar algunas de las mecánicas del título en cuestión, pues la pantalla era demasiado pequeña y la saturación gráfica demasiado alta para poder llevar a los dos protagonistas al mismo tiempo. Por ello, se optó por la alternativa de sustitución de uno por otro bajo ciertas circunstancias como que te derroten. En sí, los arquetipos introducidos en este título fueron tomados de Donkey Kong Country y aunque parezca que no tienen mucho en común a simple vista, uno está basado en el otro.
Cabe señalar, además de lo anterior mencionado, nuevos elementos que se introdujeron que no estaban en la versión de la cual se tomó este juego, como por ejemplo: el poder introducirse en tornados. No obstante, los controles se mantuvieron exactamente como estaban en Donkey Kong Country.
La movilidad que nos permite el juego es más que destacable y uno de los puntos mas fuertes del título, pues podremos columpiarnos con lianas y cuerdas, treparemos por cuerdas, edificios y velas de barco, saltaremos por encima de los arboles y nos tiraremos por rampas casi infinitas, sin contar con los famosos cañonazos que nos impulsarán a otros lugares y esos saltos casi imposibles de ejecutar. No obstante, para los impacientes puede llegar a ser un tantomonótono ir de plataforma en plataforma. En lo referente a las vidas, contaremos con unas 5 vidas inicialmente y podremos ir consiguiendo más cada 100 bananas que recojamos o cada bonus de vida extra.
Los controles que se nos presenta en esta versión de Dokey Kong Country para Gameboy son los siguientes:
- Cruceta: Movernos y agacharnos
- B: Rodar
- A: Saltar
- Start: Pausa
- Stick: Movernos
Finalmente, en este apartado se ha de hacer caso al hecho de que Diddy Kong se presenta ligeramente más ágil y rápido que Donkey Kong. Por ello, tal vez es mejor jugar con Diddy Kong si tenemos unos reflejos de los que presumir.
GRÁFICOS: 8.5
Como en el resto de los apartados técnicos, Rareware se basó también en los gráficos de la versión de Super Nintendo e incluso pretendió imitarlos pese a las limitaciones técnicas de Game Boy frente a la sobremesa. En general la calidad de los personajes, los escenarios en y enemigos en completo 2D son bastante frescos y vivos y pudiendo llegar estos a ser bastante frenéticos, todo ello contando con el nivel exquisito de detalle que podremos ver en los escenarios y personajes y que a algunos les puede resultar muy sobrecargado visualmente e incluso incomodo a la hora de jugar.
No obstante y como punto negativo, el alto nivel de detalle en los escenarios de la jungla o las montañas dificulta en ocasiones el poder distinguir a los enemigos del escenario, lo que podría llevar a que perdiésemos una vida si no prestamos especial atención en dichos niveles. Dicho fallo se vio solucionado posteriormente si se jugaba en una Game Boy Color o Advance, ya que el color nos permitía diferenciar claramente los enemigos del entorno.
SONIDO: 10
Sin duda alguna, el sonido es una de las principales si no la principal razón por la que este título tuvo tanto éxito, además de tener el poder de llevarnos a nuestra infancia. Estas obras musicales que han sido compuestas por grandes compositores musicales de videojuegos son motivo más que suficiente para ofrecerle a este gran título de Game Boy una oportunidad y deleitarnos con sus emblemáticas y carismáticas melodías.
En el título podremos ver melodías que ya conocíamos esta vez al mas puro estilo 8 bits, mientras que otras nuevas melodías serán incluso mejores que las antiguas. Dichas canciones nos irán acompañando a lo largo de nuestra aventura y cada una con un estilo propio que se amoldará a la situación en la que nos encontremos.
Todo ello va acompañado de los efectos de sonido que aparecerán cuando matemos a un enemigo, salgamos disparado de un cañón o nuestro personaje muera. No obstante, estas no son tan significativas y no se acercan al nivel ameno, divertido y dinámico de las melodías.
DURACIÓN: 7
El juego consta de 4 niveles con su jefe al final y cada nivel a su vez de unos 7 mini-niveles que nos tendrá ocupados alrededor de 3 – 6 horas, dependiendo de la maestría del jugador en los juegos de Plataformas.
Sin embargo, alguno de los niveles se nos harán excesivamente largos y otros excesivamente cortos, lo cual debía haber sido mirado en mas profundidad por los desarrolladores, además de que para completar el juego al 100% tendremos que dedicarle muchas horas más para tener la más alta puntuación.
CONCLUSIONES:
La alianza entre Donkey y Diddy Kong es algo que, al parecer, funciona según lo visto en este gran título que vio la luz hace casi 20 años en nuestras Game Boy’s y que ahora vuelve para llenarnos de nostalgia en nuestras Nintendo 3DS a un precio de 3.99 € con razón de una promoción en la eShop de 3DS.
A pesar de ser una versión alternativa de Donkey Kong Country, los resultados son más que satisfactorios en la portátil de 8 bits, señalando la música por encima de todo seguido por la jugabilidad y los gráficos. Los nuevos mundos, objetos, personajes y enemigos mantienen a la saga viva en esta entrega y se puede garantizar una diversión que nos dejará paralizados en el sofá de nuestro salón durante horas hasta pasarnos el nivel.
A pesar de no ser un título tan depurado gráficamente o en el apartado de jugabilidad frente a sus títulos hermanos, es un juego muy recomendable, el cual con su inconfundibles y pegadizas melodías nos harán introducirnos en el mundo de Donkey kong y del que nunca querremos salir, pues ante todo es un título para introducirnos en la saga y que no dejará a nadie indiferente. Por todo ello, se trata se un título mas que indispensable en nuestra colección retro y al cual siempre jugaremos cuando se nos presente ocasión.