[Retroanálisis] Super Mario World

Introducción a la trayectoria de Mario

El origen de Mario se remonta a 1980, donde el maestro Shigeru Miyamoto se basó en una persona real para crear al famoso fontanero (se dice que era el propietario de la casa donde habitaba Miyamoto en una de sus estancias en Nueva York). La primera vez que veremos a Mario será el conocido Donkey Kong para los salones Arcade y luego para NES. Al poco tiempo protagonizó Donkey Kong Junior, donde el mono tomaba el papel de héroe para convertir a Mario, por primera y única vez, en el villano. Posteriormente vinieron la tercera y cuarta parte (esta última en 1984), menos conocidas y sin llegar al éxito de las anteriores.

Pero no fue hasta 1985, cuando Mario protagonizaría junto a su hermano Luigi el aclamado Super Mario Bros, donde debían rescatar a la Princesa Peach, del Reino Champiñón, secuestrada por el rey Koopa Bowser (un argumento que desgracidamente perdura hoy en día y que a muchos seguidores de la saga nos cansa y nos aburre) ). El título catapultaría a nuestro gordito amigo hasta lo más alto del panorama videojueguil: multitud de niveles, pantallas secretas, preciosas melodías y una jugabilidad endiablada; consiguieron que las ventas de este título superaran en poco tiempo la cifra de 20 millones de copias. Una cifra que se duplicaría cuando apareció en Estados Unidos.

No hace falta que diga que Mario sentó un precedente en el género de las plataformas, Alex Kidd (la primera mascota de SEGA) fue uno de los primeros en plagiar sus bases, al que le siguieron Wonder Boy (Adventure Island), el mismísimo Sonic, Asterix, Mickey Mouse, New Zealand Story, Donkey Kong Country y un larguísimo etc.

Al año siguiente apareció su secuela, Super Mario Bros: The Lost Levels, aunque únicamente en Japón. Algún iluminado de Nintendo América decidió que esta no era la secuela para occidente del gran Mario y decidieron crear un nuevo juego basado en Yume Kouje Doki Doki Panic, pero cambiado a los personajes del mundo Mario. Este título es el que conocemos todos como Super Mario Bros 2 (1987), en Japón es conocido como Super Mario USA y es para mi el peor juego de Mario que jams ha existido es horrible….!! El juego cambiaba la jugabilidad del original, permitiendo seleccionar entre cuatro personajes (Mario, Luigi, Toad y la princesa), cada uno con habilidades diferentes; los enemigos y la forma de matarlos (aquí no saltábamos encima sino que arrancábamos hortalizas para lanzarlas a los enemigos), desaparecían las tuberías y lo más importante, nuestro queridísimo enemigo Bowser y toda su familia no aparecían, en su lugar teníamos a Wart y sus guardianes (Mouser, Triclyde, Fryguy y Clawgrip). Pese a estos cambios, el juego fue un éxito, aunque no se salvó de las críticas de que fuese una copia de Doki Doki Panic…

The Lost Levels	Super Mario Bros 2

A finales de 1989 aparecía el maravilloso Super Mario Bros 3, un juego que explotaba y mejoraba las capacidades de la NES (con la incorporación de custom chips para mejorar el sonido, los gráficos y el scroll del juego). El juego olvidaba el nuevo rumbo del anterior Super Mario Bros 2 (gracias a dios) para basarse en el original pero potenciado y mejorado hasta límites insospechados: más puzzles, enemigos, zonas secretas (que no eran obligadas de encontrar, únicamente para aumentar el nivel de dificultad)  y 80 niveles por explorar mediante un mapa de mundos, elemento que todavía se usa en la actualidad en New Super Mario Bros. Sencillamente impresionante.

Con la aparición de la portatil Game Boy apareció Super Mario Land, otra maravilla de juego que conseguía hacer un buen uso de la portátil de Nintendo. El juego arrasó en ventas (18 millones de copias), por consiguiente tuvo dos secuelas directas, Super Mario Land 2 y 3, que conseguirían sacar todo el potencial de la pequeñita Game Boy, y posteriores juegos de Wario Land.

Análisis de Super Mario World

A finales de 1990 aparecía en Japón la nueva consola de Nintendo, esa maravilla de la tecnología llamada Super Nintendo,conocida en nuestro país como “el Cerebro de la Bestia”, y junto con ella el que sería el cuarto juego de la mascota Nintendo, Super Mario World, una autentica obra maestra y dicho recientemente por el propio Miyamoto de que se trata de su juego de Mario favorito.. con el estrenábamos la Super Nintendo. Aunque en nuestro país tuvimos que esperar casi dos años (Junio del 1992).

Dirigido por Takashi Tezuka y producido por el propio Miyamoto, con Koji Kondo diseñando esa fantástica banda sonora (usando únicamente un teclado electrónico); el mismo equipo que el primer Mario Bros o The Legend of Zelda: A Link to The Past. El desarrollo del juego duró 3 años, con únicamente 16 personas en el equipo.

El argumento es de sobra conocido por todos: nuevamente Bowser rapta a la princesa Peach, por lo que Mario, junto a su hermano Luigi, deben salir al rescate. Aunque en esta ocasión los hermanos no estaban solos, pues un dinosaurio verde llamado Yoshi aparecía por primera vez, ofreciéndonos una variedad a nivel jugable nunca vista hasta la fecha. Una de las habilidades de Yoshi era comerse a la mayoría de los enemigos que se cruzaban agarrándolos con su lengua y engulliéndolos gustosamente. Si el enemigo era una tortuga o un caparazón, pulsando Y dejaba escapar una llamarada que fulminaba todo lo que había en su camino (¿qué motivos tenía yo para ir la excursión? ninguno! ) También nos protegía de los golpes de los enemigos, Mario no perdía vida pero Yoshi salía galopando y debíamos correr detrás si queríamos volver a montar. Ms adelante encontramos a los hermanos de Yoshi, reconocibles por ser de un color diferente y nacer de pequeños (hay que alimentarlos para que crezcan), cada uno de ellos tiene sus propias características, aspecto que recientemente hemos podido volver a ver en el maravilloso Mario Galaxy 2.

El juego nos llevaba por el descomunal mapeado del Reino de los Dinosaurios, compuesto por siete grandes mundos (la Isla de Yoshi, las Llanuras del Donut, la Montaña Vainilla, los Puentes Gemelos, el Bosque de la Ilusión, la isla de Chocolate y el Valle de Bowser y los mundos especiales..), nada menos que 96 niveles repletos de enemigos de todo tipo y tamaño. Algunos de ellos tenían dos posibles salidas, la normal y la oculta, que nos obligaba a estrujarnos un poco el cerebro para encontrar la recóndita llave y desbloquear el nuevo camino. Estos estaban marcados con un círculo en rojo y nos conducían a nuevos niveles ocultos y maravillosos…

Aquí ya no bastaba con saltar, también era necesario agacharse, trepar, subirse en nubes, usar todo tipo de objetos como muelles o llaves, volar e incluso flotar por los aires, mediante la ingesta de un globo de helio. Miles de plataformas de todo tipo, móviles, rotatorias, rebotantes, norias, teleféricos donde era necesario activar unos interruptores, plantas trepadoras, bloques que se transforman en monedas  ya visto en Super Mario Bros y otros bloques de colores que debíamos activar para poder hacer uso de ellos.

Por supuesto no faltaban los típicos disfraces mediante las setas y la flor de fuego, proporcionándonos nuevas habilidades. Super Mario Bros 3 introdujo novedades al respecto (Mario Mapache, Rana o Hammer Bros), que en Super Mario world se vieron mermadas por la única aparición de la pluma, un objeto que nos otorgaba la posibilidad de volar moviendo nuestra capa, nunca más volveriamos haber a Mario con una capa… Un nuevo disfraz que nos daba muchísimo juego y permitía alcanzar metas ocultas. Además y por primera vez en la saga, podíamos almacenar un ítem para poder usarlo cuando algún enemigo nos dañara. Naturalmente la ausencia de disfraces se compensaba con la aparición de Yoshi.

De esta forma teníamos unos niveles de lo más variados y originales, fases submarinas, aéreas, bosques, cuevas, tuberías, túneles, mundos ocultos, y por supuesto tampoco faltaban los castillos, donde vivían los hijos de Bowser: Iggy, Morton, Lemmy, Ludwig, Roy, Wendy y Larry; plagados de trampas, lava y otros obstáculos en forma de columnas con pinchos (y cara), paredes y suelos móviles, las archiconocidas tortugas esqueleto, rejillas, apisonadoras, etc.; al final de dichos niveles nos aguardaba un huevo de dinosaurio que rescatábamos eran los hermanos de Yoshi… A parte de estos niveles, aparecían por primera vez también las casas encantadas y nuestros queridos BOOS. Niveles más lúgubres y oscuros que nos obligaban a pensar un poco para encontrar la salida. Luego teníamos los palacios de Switch que nos activaban las plataformas de colores que inundaban los niveles, dando acceso a lugares secretos que en un  principio eran inaccesibles si no recuerdo mal había 3 o 4 de estos palacios. Por último teníamos repartidos por el juego cinco entradas al mundo estrella, otra de las novedades del juego; Un mundo nuevo en forma de estrella con una serie de fases de difícil resolución que nos otorgarían el premio de “Super Players” también conocido como mundo especial. Y además tampoco faltaban los niveles de bonus, que nos ofrecían la posibilidad de conseguir unas vidas extra.

Por si esto fuera poco, todos estos escenarios estaban habitados por la fauna y flora más variada y peligrosa que podáis imaginar: tortugas Koopa, plantas carnívoras, peces dormilones o pincho, todo tipo de fantasmas, bombas, gusanos, cactus desmontables, magos chiflados, deportistas de la NFL, triceratos, dragones y más tipos de dinosuarios no olvidemos que estábamos en un mundo de dinosaurios…

Aparte de recolectar monedas, Super Mario World introdujo otro tipo de monedas, las Yoshi, encontrando cinco de ellas en el nivel obteníamos otra vida extra. De hecho, fue uno de los primeros juegos en incorporar lo que a día de hoy conocemos como objetos recolectables las famosas monedas rojas de Super Mario 64 y varias cosas más que veriamos en futuros juegos de Mario y de otros juegos como Donkey Kong salieron de aquí.

A nivel técnico está claro que Super Mario World no fue gran cosa pero dejaba claro el potencial de la nueva Super Nintendo, sus escasas 4Mb no daban para mucho pero hoy en día nos sorprende que todo aquello cogiese solo en 4mb. Posteriores juegos sacarían todo el potencial real de la Super Nintendo como Street Fighter II, el maravilloso Donkey Kong Country (usando esa técnica de renderización ACM), Starfox o la misma secuela Yoshi’s Island, usando el conocido chip FX2. Sin duda, el gran éxito del título, así como de la mayoría de obras del genio Miyamoto, fue el excepcional diseño artístico de todo el conjunto, por cortesía de un tipo llamado Shigefumi Hino, que si bien no fue un apartado que sacaría lo mejor de Super Nintendo, realizó un formidable trabajo en todos sus aspectos, con unas buenas y divertidas animaciones sin ninguna ralentización; y las maravillosas melodías del maestro Koji Kondo, creadas únicamente con un teclado electrónico ( y que os podéis descargar de linknopermitido); todo ello orquestado por el genio Takashi Tezuka y supervisado y producido por el propio Shigeru Miyamoto.

Se hizo también una serie de dibujos animados que nos mostraban el mundo de Super Mario World al detalle:

Un juego 100% Mario pero elevado a la máxima expresión en cuanto a imaginación, originalidad, jugabilidad y diversión. Gráficos simpáticos y preciosos, melodías de ensueño, todo ello envuelto con la magia que solo Mario sabe desprender, añadiendo la posibilidad de guardar partidas y de activar metas de mitad de fase, un increíble mundo formado por una sinfonía de colores, docenas de niveles secretos, enemigos de lo más simpáticos, diversión infinita y la más alta jugabilidad y adicción que podrás imaginar jamás. Ha sido nombrado recientemente por el mismísimo Miyamoto como el mejor Super Mario de los que ha creado.